Renta variable asiática: Pokemon, G20 Meetings y la realidad aumentada

  |   Por  |  0 Comentarios

Renta variable asiática: Pokemon, G20 Meetings y la realidad aumentada
. Renta variable asiática: Pokemon, G20 Meetings y la realidad aumentada

La popularidad generalmente es difícil de predecir, y mucho más difícil de entender. En 2015, nadie habría sido capaz de adelantar la popularidad que iba a adquirir el juego de Pokemon Go. La esencia es bastante simple: la victoria de los monstruos más fuertes. Similar fue el dictado de los banqueros y líderes del mundo hace un año: las economías más fuertes lo harán mejor. Por el contrario, las economías más débiles (los que cargaban con una deuda elevada) necesitaban un empuje de austeridad fiscal para reforzar sus cuentas públicas. Doce meses más tarde, en un contexto de crecimiento mundial todavía anémico, parece que la austeridad ya no está de moda, y la expansión fiscal es una mejor opción para el entorno actual.

Antes del Brexit, se produjo el Grexit. El año pasado, los mercados alertaban de que, sin un plan de rescate por parte del Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo, Grecia tendría que abandonar el euro y volver al dracma. Después de un referéndum griego que fracasó, se llegó a un acuerdo para evitar la crisis. Pero el mensaje lanzado para los países con dificultades era que no podrían seguir gastando más de lo que ingresaban. Sobre el otoño del año pasado, la economía estadounidense parecía convencida de que llegaría la normalización de los tipos de interés y las perspectivas de crecimiento mundial eran optimistas. Sin embargo, como el crecimiento empezó a estancarse, algunos de los principales partidos políticos utilizaron la desaceleración como un indicativo del fracaso de esas políticas. Esa frustración avivó el populismo hasta que, en el verano de 2016, el Reino Unido votó en referéndum abandonar la Unión Europea.

Durante la reunión del G20, celebrada en el mes de julio en la ciudad de Chengdu, la primera tras el Brexit, los líderes mundiales se reunieron en medio de persistentes desafíos sobre la retórica del proteccionismo. Repitieron los compromisos de reuniones anteriores, pero parece que mostraron una mayor aceptación hacia la ampliación de las medidas de expansión fiscal, como una más de todas las herramientas políticas a su disposición, con el fin de generar un «crecimiento inclusivo». Aunque también se hicieron eco de las advertencias anteriores de los bancos centrales sobre la ineficacia de las políticas monetarias ultra laxas. En nuestra opinión, la contribución fiscal ayuda al crecimiento global. Similar a lo que ocurre con las políticas monetarias excesivamente laxas, la efectividad de las mismas se desvanece cuando las tasas reales se aproximan a cero, porque el perfil de deuda sigue siendo elevado. El mismo concepto se aplicaría a las políticas fiscales liberales y al gasto público que sólo aumentaría el crédito y expondría vulnerabilidades económicas.

Pero las políticas fiscales expansivas probablemente serían más efectivas en aquellas economías donde la deuda es baja, pero con el apoyo de unas balanzas de pago saneadas. Estas características son más evidentes en las economías asiáticas emergentes, particularmente las de la ASEAN y la India, que también son menos vulnerables a una desaceleración en el comercio mundial, debido a la mayor contribución de crecimiento de los mercados nacionales. La inversión sobre el PIB en ASEAN y la India, de 29% y 33% respectivamente, es menor en relación a la de los países de la Asia emergente, situada en el  38% del PIB. Mientras que en los países del G7, el gasto de inversión es sólo el 20% de la economía total, y la deuda pública es del 120% del PIB, frente al 48% en los países emergentes de Asia.

Los mercados no sólo pueden proporcionar incentivos a las economías donde las medidas fiscales expansionistas son más eficaces, sino que también pueden prolongar esos incentivos si la disponibilidad de capital es financiada con deuda y con las ganancias de comercio neto que generan una balance de pagos saludable. Así, que los países emergentes de Asia cuenten con superávit por cuenta corriente es positivo e importante porque proporciona una importante fuente de financiación, mientras que un balance por cuenta corriente negativo en países del G7 generaría una dependencia en la deuda o una devaluación de la divisa. Los países emergentes asiáticos también se benefician de las tasas de interés positivas, que meten menos presión a la depreciación de su moneda, lo que constituye una ventaja comercial.

La idea de elevar la deuda puede ser más popular mientras que el crecimiento económico mundial siga estando por debajo de lo esperado, tras la crisis financiera global. En este contexto, las reformas estructurales se han vuelto menos populares porque hacen poco para estimular el crecimiento en el corto plazo. Sin embargo, creemos que un repunte en el gasto fiscal sería más efectivo en los países emergentes asiáticos, donde el gasto en infraestructuras y las inversiones públicas no sólo han comenzado, sino que se mantienen gracias a que los gobiernos locales han mejorado el panorama de inversión, con la reforma de leyes y el fomento de una mayor competencia extranjera. Creer que, sin reformas estructurales y voluntad política, las políticas fiscales expansivas por sí solas pueden arreglar la situación económica actual, es algo que solo funciona en la realidad aumentada.

Columna de opinión de Christopher Chu, gestor de fondos y analista de mercados asiáticos de Union Bancaire Privée (UBP)

¿Punto de inflexión en los mercados emergentes?

  |   Por  |  0 Comentarios

¿Punto de inflexión en los mercados emergentes?
CC-BY-SA-2.0, FlickrPhoto: Darron Birgenheier. An Inflection Point For Emerging Markets?

Históricamente, los precios de las materias primas y los activos de los mercados emergentes han estado estrechamente correlacionados. Esto fue así durante el mercado alcista de las materias primas visto en la década del 2000 y ha continuado siendo así en el siguiente impulso del mercado de materias primas registrado a partir de 2011. Mientras que este último tuvo lugar en medio de un mercado alcista en general, siempre ha parecido que los activos de los mercados emergentes tienen un sesgo bajista durante las correcciones del mercado. De hecho, por lo general, han demostrado tener un comportamiento bajista.

Sin embargo, en la primera parte de 2016 esta tendencia parecía haberse revertido. Los mercados se desplomaron en medio de temores de que el Banco Popular de China pudiera devaluar el renminbi otra vez y en la estela del modesto aumento de tipos de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos. A pesar de estas turbulencias, las principales materias primas, las divisas de los mercados emergentes, la renta variable y los títulos de renta fija resistieron esta tormenta mucho mejor que en los casos anteriores.

Más a menudo que no, el comportamiento de los precios del mercado es más elocuente sobre el verdadero posicionamiento de los inversores que las encuestas e informes sobre los flujo de fondos. En consecuencia, el comportamiento de los precios de mercado, visto como un cálculo entre la evaluación de la confianza de los inversores y de los flujos, constituye uno de los elementos clave de nuestro marco básico decisiones de inversión, Compelling ForcesTM, junto con los ‘fundamentales’ y la ‘valoración’.

Las características de correlación parecen estar cambiando en un entorno de mercado en tensión, lo que sugiere que los precios de los metales y de los activos de los mercados emergentes podrían estar empezando el proceso de estabilización o habrían llegado realmente a sus puntos más bajos del cíclico. Los precios del petróleo, sin embargo, ahondaron en las caídas a principios de este año, demostrando una correlación inusualmente alta con los activos de crecimiento y con los mercados de renta variable en particular.

Sin embargo, el petróleo tiene una dinámica única debido a la influencia de la OPEP. Las prácticas del cártel, de mantener los precios anormalmente altos controlando la oferta de crudo, favoreció la inversión en nuevas tecnologías y la aparición de nuevos operadores, lo que ha restado poder a la organización. Esto ha hecho que el precio de mercado sea más relevante y es probable que el petróleo se ponga al día con el resto de mercados mundiales de materias primas.

Compañías de extracción de oro

El cambio clave en los fundamentales ha sido la capacidad de recortar y restringir la oferta. Muchos participantes del mercado estaban simplemente «siguiendo la curva», porque el impulso negativo del mercado estaba en marcha. Pero el espectacular rendimiento de las acciones relacionadas con el oro en el primer trimestre del año ilustra tan bien que cuando los vendedores han vendido, sólo se necesita una pequeña cantidad de posiciones de compra para tener un impacto dramático en el precio. Para finales de junio, estas acciones, subían un 100%.

En Investec, tomamos la relativa resistencia de los precios de las materias primas y de las divisas de los mercados emergentes como una señal para empezar a reconstruir en nuestras carteras la exposición a los activos de los mercados relacionados con materias primas y de los emergentes en general. Hemos resistido el canto de sirena de las métricas simplistas de valoración relativa durante un considerable número de años. Vale la pena recordar el consejo de un experimentado observador del mercado emergente: «Nunca compre renta variable hasta que las respectivas divisas estén en sus mínimos».

Específicamente, las acciones de compañías relacionadas con las materias primas, y los mercados emergentes en general, tienden a ser muy cíclicas y, en nuestra opinión, deben ser tratados como una inversión oportunista en lugar de una exposición principal en un contexto multi-activos. En esta era de crecimiento y rendimientos limitados, no podemos permitirnos ignorar los mercados emergentes y las exposiciones relacionadas, que representan una oportunidad importante y creciente. Pero como inversores, debemos aceptar su ciclicidad inherente y actuar en consecuencia.

Philip Saunders es co-responsable de Multi Asset Growth de Investec.

 

¿Es realmente tan terrible para los mercados financieros la amenaza de que Reino Unido salga de la Unión Europea?

  |   Por  |  0 Comentarios

¿Es realmente tan terrible para los mercados financieros la amenaza de que Reino Unido salga de la Unión Europea?
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Kevin Dooley. ¿Es realmente tan terrible para los mercados financieros la amenaza de que Reino Unido salga de la Unión Europea?

¿Salir de la UE o no salir? Apostamos a que esta duda shakespeariana va a seguir generando turbulencias y fisuras durante los próximos meses en un Reino que hasta ahora estaba Unido.

¿Es realmente tan terrible para los mercados la amenaza de que Reino Unido salga de la Unión Europea? En primer lugar, en este debate de naturaleza tan emotiva conviene ser sensato. A lo largo de los años, se han tejido infinidad de vínculos entre Gran Bretaña y la Unión Europea, de ahí que el desmantelamiento completo de estas relaciones sea extremadamente complejo y altamente improbable. Inglaterra es una economía de servicios —principalmente financieros—, cuyo futuro es especialmente vulnerable a cualquier cambio en la legislación europea que sea desfavorable para sus intereses.

Sin que sirva de precedente, la incertidumbre que se ha creado debería ser beneficiosa. En Europa, la crisis política y económica en la que está sumiéndose Gran Bretaña tiene un efecto disuasorio de los movimientos soberanistas que prosperaban últimamente, sobre todo en los países del sur.

Además, durante los últimos días, los diferenciales de la deuda pública española e italiana se han acercado a sus mínimos históricos frente al bono alemán. Parece que la Europa política saldrá reforzada de este trance. La primera prueba que deberá superar esta Europa reforzada será la actitud que muestre Bruselas ante la aplicación de un plan de rescate de los bancos italianos, cuya precaria situación está minando la actividad económica transalpina.

Más allá de nuestras fronteras, el debilitamiento de la construcción europea podría lastrar una actividad mundial de por sí poco vigorosa, de ahí que la Fed y el Banco de Japón estén multiplicando sus declaraciones tranquilizadoras y dejando clara su determinación para mitigar el efecto de la amenaza de una salida de Reino Unido de la UE.

Estos mensajes tranquilizadores concertados han tirado a la baja los tipos nominales de los bonos, pero, y he aquí la novedad, también en términos reales se está incentivando más el consumo o la inversión. A esto se suma otro efecto beneficioso que dista mucho de ser secundario: la caída de los tipos de los bonos en todo el mundo reduce el riesgo de un drástico desplome del yuan, que ya ha sufrido una depreciación gradual de más del 9 % frente a las monedas de sus socios comerciales desde el pasado mes de noviembre.

¿Viviremos por fin un verano apacible en los mercados? A la vista de la experiencia de años anteriores y las incertidumbres que siguen estando presentes, no me atrevería a aventurar esta posibilidad. No obstante, los temores infundados en torno a la salida de Reino Unido deberían contribuir a ello.

Deseándoles unas excelentes vacaciones, reciban mis más cordiales saludos.

Edouard Carmignac es fundador, CIO y presidente de Carmignac Gestion.

 

Razones para ser optimistas en Brasil

  |   Por  |  0 Comentarios

Razones para ser optimistas en Brasil
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Kirilos. Razones para ser optimistas en Brasil

En enero de 2016, las perspectivas de Brasil eran muy sombrías. El país había estado experimentando no sólo una recesión, sino también una parálisis política que frenaba la capacidad de la administración para poner en práctica medidas que mejorasen su posición fiscal. Además la confianza de los negocios y de los consumidores se estaban viendo afectadas. En ese momento, las bolsas brasileñas alcanzaron un punto bajo y los CDS tocaban el punto máximo.

Pero con la llegada de Michel Temer, como presidente interino, tras la destitución de Dilma Rousseff, esto ha cambiado. La nueva administración permitirá que se adopten las decisiones gubernamentales más importantes, restaurando la credibilidad y proporcionando un impulso muy necesario a la confianza de la inversión.

Desde una perspectiva top down, hay varias razones para ser optimistas. Situados en el 14,25%, los tipos de interés básicos del país son muy altos para los estándares mundiales. La inflación, tras alcanzar un máximo en 2015, ahora se está viniendo abajo y la recesión en curso rebaja las presiones relacionadas con la capacidad. Por lo tanto, existe un margen significativo para reducir los tipos de interés de los niveles actuales al 10% a finales de 2017.

Por otra parte, después de dos años de recesión severa –con una contracción del PIB del 3,8% en 2015, y una cifra del 3,5% esperada para 2016–, es probable que veamos una leve recuperación del crecimiento de cara al 2017, donde podríamos ver una cifra del 1%.

La alta calidad del nuevo equipo económico del gobierno ya está ayudando a impulsar la credibilidad de la política de Brasil. Por otra parte, estamos viendo los primeros signos de cambio en algunas de las empresas de propiedad estatal. Por ejemplo, Petrobras ha cambiado por completo sus gestores y ahora está trabajando de manera más consistente en la venta de activos y la restauración de su balance.

La perspectiva macro y empresarial sigue siendo un reto, pero si observamos la actual temporada de resultados, podemos decir que ha tocado fondo ya en varios sectores. Es importante tener en cuenta que el consumidor todavía está en mal estado dadas las expectativas de aumento del desempleo y la falta de disponibilidad de crédito al consumo. Por lo tanto, esperamos que la recuperación este a cargo de las inversiones y la producción industrial.

¿Dónde están las oportunidades?

Dado que los tipos se sitúan en el 14,25% y la inflación está cayendo, esperamos que las tasas bajen a partir de este nivel. Por otra parte, la credibilidad del nuevo gobierno puede reducir el riesgo país a los ojos de los inversores. Sin embargo, los fundamentos económicos siguen siendo difíciles y el consumo sigue bajo presión. Vemos oportunidades en las empresas que se benefician de menores tasas de interés, incluyendo los servicios públicos, los centros comerciales y algunos valores financieros no bancarios.

Como ejemplo, Iguatemi es una empresa de centros comerciales con una cartera de muy alta calidad, que debería permitirle resistir el entorno de consumo desafiante. Se espera que la empresa se beneficie del menor coste de la deuda.

Otro ejemplo es Telefónica Brasil, una empresa de telecomunicaciones, que probablemente se beneficie de la demanda elástica de sus servicios en un entorno macro débil, y de la demanda de datos, que sigue creciendo. La empresa sigue extrayendo sinergias de la adquisición de GVT. La acción ofrece una atractiva rentabilidad por dividendo, que también debería ayudar a su evolución, una vez que los tipos de interés empiecen a caer.

Ilan Furman es gestor de renta variable de mercados emergentes de Columbia Threadneedle Investments.

Terceras elecciones en España, Cataluña y la banca italiana: los riesgos que deberían preocupar a los inversores

  |   Por  |  0 Comentarios

Terceras elecciones en España, Cataluña y la banca italiana: los riesgos que deberían preocupar a los inversores
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: R@úl . Terceras elecciones en España, Cataluña y la banca italiana: los riesgos que deberían preocupar a los inversores

Los inversores han aprendido que no hay un verano tranquilo para los mercados financieros. Desde la victoria del ‘sí’ al Brexit, los riesgos han aumentado considerablemente. Las luces rojas de advertencia están luciendo de nuevo en la economía global. Las encuestas de PMI del mundo muestran que la economía global tuvo su peor trimestre desde 2012, las primeras señales de recesión se están dejando ver en Reino Unido. Por otra parte, el riesgo geopolítico sigue creciendo, sobre todo en Europa y podría ser el principal impulsor de los mercados financieros y la economía mundial en los próximos meses.

La principal paradoja de este periodo es que los riesgos nunca han sido tan numerosos como hasta ahora, sin embargo, los inversores parecen estar bastante seguros en el futuro. El Índice de Riesgo Macro de Citi se encuentra actualmente en un 2,24, lo que demuestra que los inversores están bastante relajados. La brecha entre la visión del mercado y la situación económica no puede durar mucho tiempo. Tarde o temprano habrá una brutal vuelta a la realidad.

Todos los ojos se centran de nuevo en los bancos centrales en agosto. Se esperan mayores políticas de flexibilización monetaria por parte del Banco de Inglaterra y el Banco Central de Turquía. Además, como cada año, el principal foco de preocupación para los inversores será el encuentro económico de Jackson Hole, que se celebrará del 25 al 27 de agosto en Wyoming. Este año, el tema central será: “El diseño de marcos de política monetaria resilientes para el futuro”. El discurso de la presidenta de la Fed, Janet Yellen, será el centro de atención de los inversores, quienes buscarán alguna pista sobre la evolución de la política monetaria de EE.UU. y, en concreto,  el posible resultado de la reunión de septiembre de la Fed, que supone a día de hoy la mayor puerta abierta a una subida de tipos de interés en Estados Unidos este año.

Previsión global: aumentan los riesgos geopolíticos

Los riesgos están aumentando y, sin embargo, los inversores parecen algo relajados. El Índice de Riesgo Macro de Citi, que se usa como guía para medir la aversión al riesgo, se sitúa en un 2,24, lo que significa que los inversores no están preocupados por el futuro. El mismo optimismo se puede detectar en relación a los mercados emergentes: el índice de riesgo en el mercado de divisas emergentes de Barclays ha alcanzado recientemente su punto más bajo desde el comienzo de año. El riesgo está claramente infravalorado por los inversores. El importante hueco entre la percepción de los inversores y la realidad económica probablemente no dure mucho tiempo más. La vuelta a la realidad será complicada.

Uno de los posibles factores podría ser el aumento de los riesgos políticos en las próximas semanas. Tenemos a la vista seis elecciones clave y referéndums entre el 26 de septiembre y el 8 de noviembre en Europa y en Estados Unidos. Si España no logra formar gobierno y no hay acuerdos entre los partidos, el país se ve obligado a unas terceras elecciones, haciendo aún más inestable la situación. Además, el 26 de septiembre Cataluña someterá a referéndum el voto de confianza.

El referéndum en Italia, por su parte, podría dar lugar a la dimisión del primer ministro Matteo Renzi y abrir una nueva página de inestabilidad política para el país en el peor momento, ya que el problema del sector bancario italiano está todavía pendiente. Además, el referéndum sobre las cuotas de inmigración en Hungría podría confirmar el inexorable aumento del populismo en Europa y constituye un nuevo contratiempo para la Unión Europea, tan sólo unos meses después del Brexit. De hecho, cada uno de estos eventos tiene un pequeño impacto por sí mismo, pero es el conjunto de todos ellos en un corto periodo de tiempo lo que puede tener un efecto negativo en los mercados financieros y podría elevar la crisis de confianza en Europa. Desde septiembre, los inversores no tendrán tiempo de respirar. Los riesgos políticos están en la parte alta de la agenda.

 

Mirando el lado bueno de las cosas, los bancos centrales todavía tienen maneras de calmar a los mercados en el corto y medio plazo. Además, su acción fue decisiva para evitar el pánico financiero a raíz del referéndum de Reino Unido. No obstante, la omnipotencia del banco central está en decadencia y el riesgo planificador central puede ser mayor, más que nunca antes, en los próximos meses, con pocas herramientas y gobiernos clave, como el de los Estados Unidos, congelado por las elecciones generales.

El último informe anual del BIS fue muy claro al respecto: estamos en los límites de la política del banco central debido a los rendimientos decrecientes y un mayor riesgo de burbujas especulativas. A pesar de más de 660 recortes globales desde la caída de Lehman Brothers, el crecimiento está siendo muy leve. Los bancos centrales no tienen una idea precisa de qué hacer a continuación, pero el mercado parece no preocuparse mucho al respecto por el momento.

Con respecto a este asunto, los inversores se centrarán este mes en el discurso de Janet Yellen, en el Simposio de Jackson Hole. Sin embargo, no hay mucho que esperar. La información directa sobre el calendario de la próxima subida de tipos sin duda será escasa. Los riesgos a corto plazo, especialmente vinculados al Brexit, están disminuyendo, pero las perspectivas para la economía de EE.UU. siguen siendo mixtas.

El mercado laboral y el gasto de consumo están siguiendo una tendencia positiva, pero el PIB está mostrando señales de debilidad. El PIB en el segundo trimestre fue bastante decepcionante (1,2% vs. 2,5% esperado) y el PIB en el primer trimestre fue revisado a la baja (0,8% vs. 1,1% en la primera estimación). Desde mi punto de vista, la mejor oportunidad para aumentar los tipos de interés este año se mantiene en septiembre pero la decisión final del FOMC está cerca del 50/50 y dependerá fuertemente de los datos económicos que veamos durante julio y agosto.

Europa Occidental: «Es todo culpa de Brexit»

En Europa, la trayectoria del crecimiento económico se mantiene en duda. Será muy fácil culpar al Brexit de la desaceleración del crecimiento. No obstante, el proceso de la desaceleración del crecimiento comenzó a principios de 2016. Europa y Estados unidos se están aproximando al final del ciclo económico.

En Reino Unido, la construcción PMI, que es un indicador temprano de la tendencia del PIB, ya ha estado en contracción durante unos meses, lo que confirma que la economía del Reino Unido se habría desacelerado incluso si el país ha votado a favor de “Permanecer”. El resultado del referéndum sólo acelerará el proceso. De acuerdo con las estadísticas preliminares, Reino Unido será golpeado fuertemente a corto plazo. Los PMIs apuntan a una contracción post Brexit no vista desde 2009, mientras que el optimismo CBI empresarial cayó a -47 en julio desde el -5 el mes anterior, que es el nivel más bajo desde 2009.

La recesión está claramente en camino, como esperaba el Banco de Inglaterra. El banco central optó por el status quo en julio, pero podría decidir bajar los tipos de interés en la próxima reunión del 4 de agosto desde las primas señales que confirman que el crecimiento se está ralentizando tras el Brexit. El consenso espera que los tipos de interés bajen en 25 puntos básicos.

Es sólo una cuestión de tiempo antes de que el Reino Unido anuncie más medidas de flexibilización monetaria. El reto inmediato clave para el Reino Unido será hacer frente a un importante déficit por cuenta corriente, alcanzando casi el 7% del PIB. A largo plazo, no obstante, prevalece el optimismo para la economía británica. El único país que podría superar con éxito los retos de la salida de la Unión Europea es sin duda el Reino Unido.

En cuanto a la UE, el impacto es aún difícil de estimar. De acuerdo con el consenso de Bloomberg, el Brexit podría reducir el PIB de la zona euro un 0,1 puntos porcentuales en 2016 y en 0,3 en 2017. Estas estimaciones deben tomarse con precaución debido a las numerosas incertidumbres relativas al proceso político que acaba de comenzar.

Otra de las preocupaciones de la Unión Europea es la salud del sistema bancario italiano, que se ha estado deteriorando lenta, pero constantemente durante años. Los créditos morosos como porcentaje del total prestado alcanzan el 1,5% en Reino Unido, el 5% en Francia y el 18% en Italia. En total, la cartera vencida en el sector bancario italiano asciende a 400.000 millones de euros, que supone el 20% del PIB de Italia. Sin embargo, sólo el 10% de esta cantidad representa un verdadero riesgo inmediato.

Se trata de un nivel crítico, pero, en ningún caso, un problema que no se pueda revolver. Lo que falta es la voluntad política para actuar. De hecho, los bancos italianos son el árbol que oculta el bosque. El principal problema de Italia es la falta de crecimiento económico, a pesar de las reformas estructurales, especialmente en relación con el mercado de trabajo implementadas por Matteo Renzi.

El PIB italiano no ha aumentado en 15 años. ¡15 años de ausencia de crecimiento! Los problemas del sector bancario serán resueltos pero resurgirán de nuevo antes o después si el país no puede crear un crecimiento sostenible.

Christopher Dembik, analista financiero de Saxo Bank.

Blanquear o no blanquear, esa no es la cuestión

  |   Por  |  0 Comentarios

Blanquear o no blanquear, esa no es la cuestión
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Nico Paix. Blanquear o no blanquear, esa no es la cuestión

Desde que se aprobó en Argentina la Ley de Sinceramiento Fiscal (Ley 27.260), algunas personas se han manifestado contrarias a blanquear sus activos en el exterior. En líneas generales, las razones que esgrimen para justificar dicha postura son las siguientes:

  1. Una vez que los activos que están fuera del país han sido exteriorizados, aun cuando no se los repatríe, el contribuyente en cuestión quedará sujeto a mayores impuestos.
  2. Al mismo tiempo, el propietario de los activos de que se trate tendrá un patrimonio mayor que responderá tanto por sus deudas como por hechos o acciones susceptibles de generar responsabilidad civil (mala praxis, accidentes de tránsito, deudas comerciales, juicios laborales, etc.).
  3. Una vez que el gobierno argentino tome conocimiento de la existencia de tales bienes, los mismos estarán sujetos al riesgo argentino (argumento que nos parece el más fuerte de todos a quienes hemos sido testigos del corralito financiero, del corralón, del Plan Bonex, del cepo cambiario y de sucesivos defaults).
  4. Una vez que esos activos pasen a integrar la declaración jurada del titular de los mismos, puede haber alguna repercusión en la seguridad personal de dicha persona.
  5. El blanqueo también tiene un efecto en procesos de divorcio, no solo presentes y futuros sino también pasados (a menos que el dueño de los bienes blanqueados los hubiera incluido en el acuerdo de separación de bienes firmado oportunamente).

Existen otros riesgos puntuales, que afectan a algunos contribuyentes y a otros no, y que han surgido por errores u omisiones de la Ley 27.260. Entre ellos, destacamos el tema de los seguros de vida contratados offshore y el de los trusts irrevocables ya existentes a la fecha de preexistencia. No vamos a referirnos a estas cuestiones en esta columna.

Si bien personalmente estamos 100% de acuerdo con todas y cada una de estas afirmaciones, especialmente aquella vinculada a la tradicional falta de seguridad jurídica argentina, también tenemos claro que el mundo cambió, que el intercambio automático de información financiera es ahora la regla y que quien decida no ingresar a la amnistía fiscal propuesta por el gobierno argentino, deberá optar entre operar con plazas financieras que van a informar a Argentina acerca de la existencia de sus cuentas bancarias, y/o con otras que por ahora no van a intercambiar esa información pero que tampoco los van a dejar manejarse con las comodidades a las que estaban acostumbrados.

La amnistía fiscal actualmente vigente se da en medio de un profundo cambio de paradigma que afecta a la industria de estructuración patrimonial y esto no es en absoluto un detalle menor. En este contexto, las razones que utilizan para justificar su decisión quienes no quieren entrar en el blanqueo, en realidad no son en absoluto suficientes para respaldar esa postura, pero justifican largamente la necesidad de estructurar sus patrimonios luego de haberse acogido a la amnistía.

Y es que existen estructuras legales que permiten mitigar todos los riesgos mencionados y que son aceptadas desde hace tiempo por AFIP y la justicia argentina. Nos referimos puntualmente al trust, aunque hay otras alternativas no tan ventajosas como ese, como ser el armado de una sociedad en el extranjero, la estructuración de un fideicomiso local y/o la redacción de un testamento, que también pueden (y deben) explorarse.

¿Qué es un trust?

Para definirlo de manera rápida y sencilla, diremos que el trust es un contrato mediante el cual una persona (settlor) transfiere la propiedad de ciertos activos a otra (trustee) para que los administre en beneficio de uno o más terceros (beneficiaries), y los transfiera definitivamente a éstos (u a otros beneficiarios) ante el cumplimiento de un plazo o el advenimiento de una condición (generalmente la muerte del settlor).  No se trata de una definición académica, pero resulta de utilidad a los efectos del presente análisis.

Este tipo de estructura permite no solo una adecuada administración de los activos en cuestión, sino también determinar con precisión las circunstancias relativas al traspaso de la propiedad de los mismos a los beneficiarios. Adicionalmente, desde el mismo momento en que se establece el trust, la propiedad de los bienes incluidos en él, salen del patrimonio del settlor (el dueño originario de los mismos), lo cual implica, por un lado, una serie de ventajas impositivas y, por el otro, que dichos activos queden automáticamente protegidos de cualquier acción legal por parte de eventuales acreedores del mismo y que no deban ser incluidos en las declaraciones de bienes personales de sus antiguos dueños.

Existen varias clases de trust: revocable, irrevocable, discrecional, no discrecional, etc., y muchas jurisdicciones donde constituirlos. Obviamente cada clase y jurisdicción deberá ser evaluada en detalle por un especialista internacional así como por asesores locales del settlor.

Es común oír a profesionales del Derecho sin mucha experiencia en estas cuestiones, decir que los trusts no son reconocidos por los regímenes de derecho civil vigentes en América Latina (entre los que se incluye obviamente Argentina), y que por ende, los mismos no son oponibles a terceros ni tienen efectos jurídicos. Muchos de estos argumentos se apoyan también en el hecho de que en estos países existe en general la herencia forzosa y en que la figura del trust es de origen anglosajón y no latino. Por más razonable que a simple vista parezca este argumento, el mismo no es correcto ni resiste la crítica.

De hecho, siempre y cuando se tomen los recaudos del caso al armarlos, los trusts son perfectamente válidos y sus efectos van a respetarse casi en su totalidad.

¿A que nos referimos cuando hablamos de que deben tomarse “los recaudos del caso”? 

Básicamente, queremos decir lo siguiente:

Si bien en América Latina solo Panamá ratificó la Convención de 1985 sobre Derecho Aplicable a los Fideicomisos y si Reconocimiento, muchos países de la región han aprobado leyes o regulaciones sobre el fideicomiso, entre ellos: Argentina, México, Brasil, Perú, Paraguay y Uruguay.

Siendo ello así, ningún juez en esos países puede sostener que la figura del trust sea ajena al régimen jurídico vigente allí, como si, ocurrió, por ejemplo, en España. En el caso puntual de Argentina, existen muchos fallos judiciales que establecen que son válidos los trusts irrevocables establecidos en países de alta tributación. Otros exigen adicionalmente razonabilidad en los términos y condiciones del trust, que el trustee sea independiente y/o que el settlor no sea a su vez beneficiario.

El último tema a considerar es el control que el settlor, de un modo u otro, ejercerá en la práctica en el funcionamiento del trust. A mayor control del settlor, obviamente mayor tranquilidad para él, pero al mismo tiempo, mayor será el riesgo de que la estructura pueda ser atacada sobre la base de que los activos en realidad nunca salieron de su patrimonio.

Sin perjuicio de lo dicho hasta aquí, debe considerarse la posibilidad de que aun cuando se declare válido el trust, si el mismo viola leyes de orden público en el país de que se trate (como ser el caso de normas sucesorias), es posible que el juez deba respetar lo que el trust establezca para activos ubicados fuera de dicho país pero que luego trate de compensar a través de la distribución/asignación de bienes ubicados allí. Se trata de otra cuestión que hay que analizar con el settlor al momento se armar la estructura, de manera de que se puedan alcanzar sus objetivos en lugar de que estos se vean frustrados por la acción de un juez.

Argentina tiene la jurisprudencia más rica y consistente de la región en materia de validez y efectos de los trusts. Es claro que en el caso de que una persona con residencia fiscal allí establezca un trust irrevocable en una jurisdicción de alta tributación (Nueva Zelanda, Reino Unido, Estados Unidos, etc.), contrate los servicios de un trustee independiente y no pretenda ser beneficiario del mismo, el trust en cuestión será válido y permitirá reducir los riesgos a los que aludimos al comienzo de la presente columna.

Otro tema a considerar a la hora de determinar la mejor estructura post-blanqueo, son los impuestos que paga cada tipo de inversión. A modo de ejemplo, si los bonos argentinos no pagan impuestos en cabeza de una persona física (o humana, en el lenguaje de la Ley 27.260), no tiene sentido colocar esa inversión debajo de una sociedad offshore o de un trust.

Hasta el momento todas estas cuestiones no tenían mayor relevancia porque en muchos casos la planificación pasaba por el ocultamiento y poco más. A partir de ahora habrá que cambiar el chip. Por ello, la cuestión no es si blanquear o no sino más bien qué hacer luego, una vez que los activos de que se trate han sido en efecto exteriorizados.

Fibras: buenos dividendos, pobres ganancias de capital en el segundo trimestre

  |   Por  |  0 Comentarios

Fibras: buenos dividendos, pobres ganancias de capital en el segundo trimestre
CC-BY-SA-2.0, FlickrPhoto: TJDtrader. Mexican REITs (Fibras): Atractive Dividends, Poor Capital Gains in Q2

Los dividendos de las Fibras para el segundo trimestre de 2016 fueron, en términos generales, similares a los del trimestre anterior, aunque hubo diferencias al revisar caso por caso. El dividendo promedio para las 10 Fibras (REITs mexicanos) fue del 6,7% en el segundo semestre el cual fue muy similar al 6,6% que pagaron el trimestre anterior y superior al promedio que pagaron en 2015 que se ubicó en el 5,4% en promedio.

El rango de los dividendos al segundo trimestre fue muy amplio al ubicarse entre el 5,00% que pagó Fibra UNO (FUNO) y el 7,99% que pagó Fibra Terra (TERRA). Los dividendos más atractivos y que estuvieron por arriba del promedio, además de TERRA, fueron para Fibra Macquarie (FIBRAMQ) quien pagó el 7,97%; Fibra Prologis (FIBRAPL) con el 7,75% y Fibra Monterrey (FMTY) el 7,03%. En el otro extremo, los dividendos por debajo del promedio fueron para Fibra SHOP (FSHOP) con un 6,60%; Fibra Inn (FINN) un 6,42%; Fibra HD (FIBRAHD) un 6,38%; Fibra Hotel (FIHO) un 6,08%; Fibra Danhos (DANHOS) un 5,89% y Fibra UNO (FUNO) un 5,0%.

En todos los casos el dividendo se divide entre el precio de cierre de la fibra al 31 de diciembre de 2015 con fines comparativos, aunque cada inversionista tiene su propio dividendo en función del precio al que adquiere la Fibra.

Si se considera la reciente emisión de deuda de DANHOS a 3,5 años y que con calificación AAA paga una tasa de TIEE + 65 puntos base que equivale al 5,23% se puede decir que el dividendo de las Fibras es bueno, donde el riesgo es la volatilidad en el precio.

Al revisar el desempeño de las Fibras en términos de sus cotizaciones en 2016, se puede ver que 5 Fibras muestran un comportamiento positivo, una mantiene su precio sin cambios y 4 presentan perdidas en el acumulado en el año (al 31 de julio de 2016). Este resultado para las Fibras es mejor si se considera que en 2015 su desempeño de la industria fue negativo al reflejar una contracción del 9% donde solo 2 de 10 tuvieron un desempeño positivo en 2015.

Las Fibras con desempeño positivo son: FIBRAPL (13%); TERRA (11%); FIBRAMQ (10%); FMTY (4%) y FUNO (1%). Fibra HD no tuvo variación en su precio. Por otra parte, las Fibras con pérdidas en sus cotizaciones en el acumulado en el año (al 31 de julio) son: FIHO (-14%); FINN (-11%); DANHOS (-4%); y FSHOP (-1%).

Desde nuestro punto de vista los factores que explican el desempeño de las Fibras son: La expectativa de alza en tasas; así como las reaperturas y un mayor endeudamiento (emisiones de deuda).

Cuando las tasas suben los inversionistas demandan mayores dividendos a las Fibras y esto baja el precio de las Fibras. Mayores tasas también son mayores costos para financiar compras y esto pone presión sobre los márgenes.  En la medida que se auguren mayores alzas para las tasas de interés locales esto será una limitante en su desempeño.

Los dividendos los generan las rentas estables.  Las rentas suben con inflación o con el movimiento en el tipo de cambio, pero el aumento en el ingreso depende de cómo se tiene establecido en el contrato.

Otro punto a tomar en cuenta son las reaperturas y el endeudamiento. Las Fibras buscan economías de escala y por ello buscan hacerse de más recursos ya sea a través de reaperturas o de un mayor endeudamiento. Al momento de hacerse de recursos por cualquiera de estos mecanismos hay un periodo en el que el dinero tarda en colocarse en bienes raíces y esto afecta el desempeño tanto de la Fibra como del dividendo.

Las Fibras en México tienen 5 años de haber surgido como alternativa de inversión. 8 de las 10 Fibras que hay en el mercado han recurrido a la reapertura (las excepciones son DANHOS y PROLOGIS); mientras que 4 de 10 (FUNO, FSHOP, FINN y DANHOS) han utilizado la emisión de deuda en el mercado como mecanismo para hacerse de recursos.

Si se analizan las Fibras en función a su especialización se puede observar que las diversificadas en por lo menos dos de los tres sectores en los que participan, son las que mejores resultados han ofrecido (industriales, comerciales y oficinas).  Las especializadas en el sector industrial han tenido un  buen desempeño, no siendo así para las especializadas en hoteles y centros comerciales.

Columna de Arturo Hanono

 

¿Efecto contagio del Brexit? El S&P500 y el FTSE, por encima de niveles pre-referéndum

  |   Por  |  0 Comentarios

¿Efecto contagio del Brexit? El S&P500 y el FTSE, por encima de niveles pre-referéndum
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: OliBac . ¿Efecto contagio del Brexit? El S&P500 y el FTSE, por encima de niveles pre-referéndum

Tras el Brexit, los mercados de activos se han ido serenando. Aunque la libra no ha repuntado, los mercados de renta variable se sitúan ahora cerca de sus niveles anteriores al referéndum, o incluso por encima de ellos en el caso del S&P 500 y el FTSE 100, este último favorecido por la presencia de numerosos exportadores beneficiados por la bajada de la libra.

Los tipos de los bonos de Estado siguen siendo inferiores a sus niveles anteriores al referéndum, pero no hemos observado ninguna revisión al alza significativa del riesgo de crédito. Esta calma relativa sin duda se explica por la rapidez de la transición política británica, y por el hecho de que el proceso de salida no será precipitado.

Esta serenidad financiera es un factor importante pues, aparte de los efectos directos sobre las importaciones británicas, la tensión de las condiciones financieras y el deterioro de la confianza constituían los principales vectores de contagio. En cualquier caso, es a través de éstos como se habrían podido verificar las hipótesis más negativas para el crecimiento mundial. La publicación de los índices PMI avanzados del mes de julio apuntan que, de momento, el impacto parece circunscribirse al Reino Unido. Eso no quita que tengamos por delante un largo proceso, que puede deparar nuevas sorpresas.

“Brexit means Brexit”

Tras el nombramiento de Theresa May como primera ministra, Philip Hammond, ex ministro de Asuntos Exteriores, ha sido designado al cargo de ministro de Hacienda. Sus últimas declaraciones dejan vislumbrar una pausa en los esfuerzos de reducción del déficit (-4,2% en el ejercicio fiscal 2015), y el abandono del objetivo de retorno al equilibrio en 2020 al final de la actual legislatura. No se espera el anuncio de presupuestos de emergencia antes de la presentación tradicional del presupuesto en el mes de noviembre.

Hammond ha abierto la puerta a una política presupuestaria más acomodaticia para los próximos años. Tal y como se esperaba, el Banco de Inglaterra ha recortado los tipos en 25 puntos básicos, aunque hay que recordar que Mark Carney, gobernador del BoE, no es muy partidario de los tipos negativos.

Parece claro que los británicos tardarán varios meses en activar el artículo 50. Pese a la insistencia de la Comisión Europea y de varios países, Angela Merkel desea dar tiempo a los británicos para que definan su planteamiento de cara a las negociaciones, y François Hollande ha compartido su punto de vista. El artículo 50 se debería activar a principios del año que viene, pero no habrá negociaciones informales sobre el fondo antes de esa fecha. En cambio, sin duda los británicos y la Unión Europea empezarán por debatir un código deontológico y un calendario para esas negociaciones. Concretamente, se trataría de autorizar al Reino Unido para que inicie conversaciones sobre nuevos acuerdos comerciales antes de su salida de la UE, cosa que tiene prohibida en la actualidad.

De momento, los efectos se ciñen al Reino Unido

Si cabía temer un contagio a través de los vectores de la confianza y los mercados financieros, este parece muy reducido por el momento. Efectivamente, el Reino Unido se ha visto afectado por diversas vías. La más destacada ha sido la caída de la divisa británica, que ha empezado a empujar al alza losprecios de las importaciones, lo cual debería desembocar en unaumento de la inflación y lastrar el consumo.

Los precios del sector inmobiliario comercial están bajo presión, lo que ha provocado cierres de fondos abiertos invertidos en esa categoría de activos, que han llevado a algunos a comparar la situación actual con los comienzos de la crisis financiera en 2007. Pero la situación que tenemos hoy es totalmente diferente. Por entonces, se trataba de productos monetarios “dinámicos” que para las empresas conllevaban un riesgo de falta de acceso a su tesorería; hoy, en cambio, se trata de productos considerados de mayor riesgo. Por otra parte, esta vez el activo subyacente es físico, y por tanto más fácil de evaluar y transmitir que un tramo de obligaciones con garantía de deuda.

En un contexto de tipos de interés bajos, el nivel de rentabilidad puede resultar atractivo para los inversores institucionales, sobre todo si la transacción se lleva a cabo a un precio infravalorado. Por ejemplo, según Bloomberg, el fondo soberano noruego ha comprado a Aberdeen Asset Management un complejo inmobiliario con un descuento del 15%. Por tanto, se trata ante todo de un problema de liquidez, más que de solvencia: esos fondos compran activos muy poco líquidos y prometen una liquidez diaria. Quienes habían conservado un cesto de tesorería importante no han necesitado cerrar.

Globalmente, las condiciones financieras siguen siendo acomodaticias tanto en el Reino Unido como en la zona euro. Sin embargo, en un contexto donde está en cuestión el marco institucional de la actividad internacional de las empresas británicas, en general las empresas restringen sus actividades. Los índices PMI avanzados publicados el 22 de julio apuntan ahora una contracción de la actividad.

A juzgar por los primeros indicadores correspondientes al mes de julio, parece que de momento la zona euro no se ha visto muy afectada. La confianza de los consumidores solo ha bajado marginalmente, y el PMI compuesto retrocede tan solo 0,2 puntos, situándose en 52,9, a pesar de que el consenso barajaba una caída más fuerte, al 52,5. Este nivel sigue siendo compatible con un crecimiento anual del 1,5%.

El comportamiento de los diferenciales de crédito de los países periféricos demuestra que, por ahora, los mercados descartan el contagio “político”. Está claro que la actuación del Banco Central Europeo limita el riesgo de derrape de estas obligaciones, pero también hay que tener en cuenta el resultado de las elecciones españolas del 26 de junio, cuando fracasaron las maniobras de Podemos para conquistar el poder.

De momento, ningún otro país ha anunciado su voluntad de celebrar un referéndum sobre la permanencia en la Unión Europea. No obstante, en un contexto de enfado de una parte nada desdeñable de la población de los países desarrollados, en el que ya no se escucha a las élites y a los expertos, y las cuestiones migratorias se imponen a las cuestiones económicas, la política puede seguir siendo una fuente de sorpresas durante los próximos meses.

De momento, las consecuencias del voto británico parecen concentrarse en el Reino Unido, y los indicadores de la zona euro resultan tranquilizadores. Si se confirma, la ausencia de contagio financiero y de impacto en la confianza significa queel crecimiento de la demanda interna de la zona euro debería seguir siendo sostenido, y el efecto se limitaría al comercio exterior.

Como la coyuntura estadounidense también presenta signos tranquilizadores, y la actividad se está estabilizando en algunos países emergentes que padecen recesión, el segundo semestre podría reservarnos sorpresas favorables en materia de actividad económica. Estas podrían ser un factor de apoyo a los activos de riesgo, tras una primera mitad de año difícil, máxime a la vista de unos resultados del segundo semestre algo mejores de lo esperado.

A la espera de la activación del artículo 50, el Brexit debería pasar a segundo plano, pero el referéndum italiano del mes de octubre y las elecciones presidenciales de Estados Unidos de América sin duda seguirán dando pábilo a la incertidumbre política.

Julien-Pierre Nouen, economista y estratega de Lazard Frères Gestion, filial de dedicada a la gestión de activos de la Compagnie Financière Lazard Frères.

¿Cómo evolucionan los mercados de bonos tras el Brexit?

  |   Por  |  0 Comentarios

¿Cómo evolucionan los mercados de bonos tras el Brexit?
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Thomas Leuthardc. ¿Cómo evolucionan los mercados de bonos tras el Brexit?

Un mes antes del Brexit, el mercado y los comentarios de Yellen, presidenta de la Reserva Federal de los Estados Unidos, apuntaban a un aumento de las tasas para julio de 2016. Con el anuncio de un bajo número en las nóminas salariales en mayo, el mercado redujo las expectativas de una subida de los tipos y Yellen, por su parte, cambió su tono extremista por uno más moderado. Además, en los últimos años, el mercado ha sido sistemáticamente más escéptico que la Reserva Federal sobre las expectativas de aumentos de las tasas.

El gráfico muestra como el  pronóstico de “puntos” de la Reserva Federal para los fondos federales hasta diciembre de 2017 disminuyó de 2,4 % en diciembre de 2015 a 1,6 % en junio de 2016. Las expectativas del mercado, como lo indican los contratos de futuros de fondos federales, bajaron de 1,4% a 0,45% durante el mismo período.

La Reserva Federal dio el primer paso hacia el ajuste en diciembre de 2015, pero parece que todo el plan está ahora en suspenso. Tras el Brexit, existen pocos motivos para creer que la política monetaria en Europa no seguirá siendo muy acomodaticia, empujando algunos rendimientos soberanos dentro de territorio negativo.

Muchos han cuestionado la efectividad de las medidas no convencionales de la política monetaria perseguidas por los principales bancos centrales del mundo debido al evidente impacto limitado para incentivar el crecimiento económico. Sin embargo, no hay duda de que dichas medidas hicieron que los activos de riesgo repuntaran.

Rentabilidad de los activos de riesgo

Por ejemplo, en los Estados Unidos, la Reserva Federal puede atribuirse el mérito de que, mediante sus acciones, tanto llas bolsas como los mercados de deuda high yield de los Estados Unidos tuvieron un crecimiento de dos dígitos. Desde el 1 de enero de 2009 hasta el 31 de diciembre de 2014, el S&P 500 tuvo una rentabilidad total anual promedio de 17,2% y los bonos de alto rendimiento de 16%, según el Barclays U.S. Corporate High Yield Index.

Sin embargo, en los últimos años, la posición actual más prudente de los bancos centrales ha tenido menos impacto en la rentabilidad y los precios de los activos financieros. En los últimos dos años, la rentabilidad de los activos de riesgo disminuyó debido a las preocupaciones por el crecimiento vacilante, la calidad del crédito y la falta de valor, como puede verse en el segundo gráfico. Por ejemplo, desde el 1 de enero de 2015 hasta el 30 de junio de 2016, la rentabilidad total anual promedio del S&P fue de 3,5% y la de la deuda high yield, 2,7%.

A comienzos de año, vimos los sectores de inversión, como la deuda high yield y los préstamos a tasa flotante de Estados Unidos, como extremadamente baratos según valoraciones históricas y relativas. A nuestro entender, esas valoraciones atrajeron inversores que subieron la oferta de precios y ahora re ejan su valor de manera razonable. Sin embargo, como muestra el tercer gráfico, los préstamos y la deuda high yield permanecen dentro de los sectores de más alto rendimiento y, a diferencia de otros sectores de renta fija, sus rendimientos son más altos que hace un año.

Apoyo a la volatilidad

No creemos que la economía de los Estados Unidos entre en recesión a corto plazo, pero es poco probable que las marchas y contramarchas del crecimiento desaparezcan. Por ejemplo, tres meses atrás, se habló de un fortalecimiento del mercado laboral y un crecimiento económico débil, pero eso se ha invertido. Recientemente hemos experimentado un crecimiento económico más fuerte y un mercado laboral más débil. Además, no sabremos cuál será el impacto real del Brexit durante varios años. Son muchas las preguntas que surgen luego del referendo, pero nos enfocaremos en las siguientes:

  • ¿Cuáles serán los términos comerciales principales entre la Unión Europea y el Reino Unido? La intención de la Unión Europea es que los términos sean severos para desalentar a los otros países de seguir los mismos pasos.
  • ¿Cómo reaccionarán los otros países dentro de la Unión Europea, en el contexto de la creciente opinión pública en contra de seguir en la Unión Europea? ¿Los otros países llevarán a cabo referendos similares? El próximo año habrá elecciones en Francia y Alemania.
  • ¿Ocasionará una divergencia aún mayor entre la economía de los Estados Unidos y la europea?
     

Oportunidades tras el Brexit

Para los inversores, creemos que la consideración más importante es evitar acciones apresuradas impulsadas por el temor, sin ser complacientes. Hemos sido testigos de una recuperación importante de los mercados de valores del Reino Unido, europeos y estadounidenses. Aunque aún no hemos visto una recuperación comparable en el rendimiento de bonos líderes a 10 años del Tesoro de los Estados Unidos, que no han variado demasiado luego del Brexit. En el mercado de bonos se rumorea que la volatilidad del precio acecha.

En un entorno de bajo crecimiento y de bajas expectativas de rentabilidad que apoyan los bancos centrales, creemos que el crédito corporativo bajo el grado de inversión de los Estados Unidos, bonos de alto rendimiento y préstamos a tasa  otante, ofrece una propuesta atractiva de riesgo/rentabilidad. (Creemos que los cupones altos compensarán con creces las posibles pérdidas crediticias). Cualquier liquidación brusca en estos sectores, o en valores especí cos que se encuentran aislados del impacto directo del Brexit, podrían presentar oportunidades de compra incluso más atractivas.

Payson F. Swaffield es director de inversión de renta fija de Eaton Vance Management.

Una alarma que no debemos ignorar

  |   Por  |  0 Comentarios

Una alarma que no debemos ignorar
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: a.has. Una alarma que no debemos ignorar

Estamos ante un típico escenario donde los inversores bajan la guardia, se siente confiados y no perciben los riesgos. Hay un indicador clave que nos está mandando una alarma que no debemos dejar pasar.

Por más que uno sea un inversor de largo plazo, muchas veces debe saber que hay un lema que nunca debe dejar de lado al momento de invertir: «Es tan importante el timing de comprar una acción, como el momento de venderla si las ganancias son significativas».

El timing de venta se torna aún más importante en situaciones de exceso de confianza de los inversores y mercados en zona de sobrecompra. Hoy estamos ante esta realidad.

¿Qué es lo que me hace pensar esto?

Hay un indicador que es objetivo y que se calcula en base a las ganancias concretas de las compañías y a los precios que las mismas tienen en Bolsa. Se trata, ni más ni menos, que del ratio Precio/Ganancia.

Este múltiplo, que surge del cociente entre el precio de una acción y las ganancias de esa firma, nos indica cuántos años de iguales ganancias son necesarios para recuperar la inversión si la empresa distribuyera la totalidad de las mismas como dividendos en efectivo.

Cuanto más bajo es el valor del ratio P/G, menos años necesito en teoría para recuperar el dinero, y más conveniente es la inversión.

Uno como inversor puede calcular el P/G para una acción concreta, un grupo de acciones, una industria o un sector determinado. Siempre es válido el valor del P/G comparado con otro, ya que se trata de una valuación relativa.

En esta línea, podemos comparar distintos P/G de diferentes compañías que pertenecen a la misma industria para saber cuál está más barata que otra. O también, podemos comparar el Precio/Ganancia actual del activo contra la evolución promedio histórica de ese ratio y determinar si está muy cara o no en los momentos vigentes.

Si hacemos esto último con el índice S&P 500 vamos a descubrir que hoy la Bolsa está cara.

El gráfico anterior es elocuente de lo que ocurre con el S&P 500, el principal indicador bursátil del mundo que incluye las 500 empresas más grandes de Estados Unidos.

El indicador Precio/Ganancia se encuentra en 19,4 veces. Esto es superior a las 17,6 veces de promedio de los últimos 15 años (línea marrón) y las 15,9 veces del promedio de los últimos 10 años (línea gris). Ese es el primer llamado de atención.

La segunda luz amarilla se enciende a partir de que cuando este ratio cruza de abajo hacia arriba el promedio de los últimos 15 años, entonces se está gestando una crisis. Un claro ejemplo fue a finales de 2007 cuando luego estalló la burbuja inmobiliaria.

Son alertas que no podemos ignorar.

Hay dos posibles causas de la suba del P/G del S&P 500. O sube mucho el precio de las acciones (numerador) o no crecen lo suficiente las ganancias corporativas (denominador). Hoy ambos efectos ocurren en simultáneo.

¿Todas las acciones caerán con una inminente corrección del mercado? No. Pero es el momento de estar más alerta y selectivo que nunca.

Opinión de Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global, conferencista, administrador de portafolios y creador del sitio www.diegomartinezburzaco.com