Los tipos de interés a largo plazo, cerca de máximos

  |   Por  |  0 Comentarios

Los tipos de interés a largo plazo, cerca de máximos
Pixabay CC0 Public Domain. Los tipos de interés a largo plazo, cerca de máximos

El triunfo electoral de Donald Trump ha impulsado el aumento de los tipos de interés a largo plazo. Aunque es probable que los planes del presidente electo para el estímulo fiscal fomenten el crecimiento de Estados Unidos y alimenten al alza el dólar, tal y como están ahora las cosas parece que los tipos a largo plazo podrían estar a punto de dejar de subir.

Los tipos de interés a largo plazo ya estaban al alza cuando Donald Trump fue elegido, pero han aumentado desde entonces. En su primer discurso como presidente electo, el candidato republicano reafirmó las principales características de su política económica: estímulo fiscal (recortes de impuestos, aumento del gasto público) y una tendencia hacia el proteccionismo. Si el comercio mundial se desacelera, la oferta podría verse afectada y la inflación podría resurgir, pero es difícil de medir el impacto potencial mientras no haya propuestas claras. En este punto no se sabe qué acuerdos comerciales podría cuestionar la nueva administración. El estímulo fiscal, por otro lado, podría ser implementado rápidamente y provocar un importante repunte en el crecimiento de Estados Unidos, entre el 0,5% y el 1%. De hecho, el crecimiento ya está apoyando a los mercados y empujando a los tipos a largo plazo y al dólar hacia arriba. En cuanto a los tipos de interés a corto plazo, es muy probable que la Fed aumente el ritmo de sus aumentos de tipos.

Sin embargo creemos, basándonos en los datos actuales, que esta fuerte tendencia hacia los tipos a largo plazo podría estar llegando a su fin. El mercado ya ha revisado sus pronósticos para las subidas de tipos de la Fed hasta finales de 2018, y asegura que habrá de dos a cuatro. Según las previsiones, los estímulos fiscales que añaden un crecimiento del 1% por lo general desencadenan un aumento del 0,25% en la tasa real neutra. Y los inversores ya han puesto precio a la posibilidad de que se lleve a cabo un plan de estímulo sustancial.

Además, creemos que la Fed estará limitada en sus acciones por la subida del dólar, que asumirá el papel de variable de ajuste. Asimismo, si los tipos subieran demasiado rápido, los activos de riesgo terminarían sufriendo. Por último, cabe señalar que los planes se destinan únicamente a medidas de estímulo específicas en lugar de cualquier cambio estructural importante en la economía estadounidense, y su potencial de crecimiento sigue siendo históricamente bajo a menos que, por supuesto, los gastos propuestos fueran realmente aumentar la productividad empresarial a largo plazo.

Nuestro estilo de gestión de retorno absoluto nos permite gestionar activamente las ponderaciones de los segmentos en los que estamos invertidos. Particularmente el crédito investment-grade estadounidense y el alto high yield (a través de CDS), así como la deuda bancaria subordinada. Dado el entorno descrito anteriormente y la inestabilidad política actual, este tipo de gestión de activos es especialmente útil.

Columna de Christel Rendu de Lint, responsable del equipo de Global & Absolute Return Fixed Income de Union Bancaire Privée (UBP)

Una extraña combinación de factores hace de 2017 el momento de apostar por los mercados emergentes

  |   Por  |  0 Comentarios

Una extraña combinación de factores hace de 2017 el momento de apostar por los mercados emergentes
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Marco Bellucci. Una extraña combinación de factores hace de 2017 el momento de apostar por los mercados emergentes

Bajas valuaciones, mejores perspectivas económicas y monedas fuertemente devaluadas. Este trinomio es una extraña combinación que se ha dado pocas veces en la historia de los mercados emergentes y que se configuran como los factores principales para apostar a estas bolsas de cara al año que comienza en días.

Lo acontecido en los últimos 12 meses para estas bolsas fue ciertamente vertiginoso, pasando de la decepción a la euforia para luego volver al escepticismo nuevamente. En este sentido, el 2016 se divide en dos etapas bien diferenciadas para dichos mercados: la era pre-Trump y la época post-Trump.

Después de la gran caída que sufrieron las acciones en el mes de enero, la recuperación ha sido muy fuerte, sobre todo en las bolsas de la periferia que se acoplaron a los récords de Wall Street.

Finalizando febrero, lo peor pareció haberse dejado atrás, ya que la Reserva Federal de Estados Unidos no continuó con su ajuste de tasas de interés, asegurando liquidez en los mercados financieros. Por su parte, la economía de China se estabilizó y los temores sobre posibles devaluaciones del yuan cedieron.

Así, los mercados emergentes no solo que ganaron un interés particular, sino que la suba se dio con un interesante ingreso de capitales, revirtiendo el desinterés mostrado en 2015.

En esta línea, la salida de capitales en emergentes fue mermando en el primer y segundo trimestre, mientras que crecía el ingreso de fondos en busca de una renta extraordinaria. Finalmente, en el tercer trimestre los ingresos superaron ampliamente a los egresos, permitiendo un flujo neto positivo de casi US$ 7.000 millones.

Sin embargo, algo que parecía encaminado a la recuperación se quedó en el camino por ds eventos que minaron el territorio de las economías en proceso de desarrollo:

  1. La victoria de Donald Trump.
  2. La suba de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal.

Este fue un cóctel explosivo que llevó a una rápida salida de fondos de esos mercados, revirtiendo la tendencia del tercer trimestre, una depreciación acelerada de las monedas contra el dólar y una caída de las Bolsas.

La foto de lo sucedido se resume en el siguiente gráfico:

Mientras las acciones estadounidenses consolidaron su andar y trayectoria alcista, las emergentes fueron castigadas, principalmente las latinoamericanas como se observa más arriba.

Mirando hacia adelante

Como mencioné anteriormente, me permito ser optimista hacia adelante. Es cierto que la foto actual luce de ser la mejor para las economías emergentes: las tasas de interés subieron y hay una amenaza latente de mayor proteccionismo global impulsado por el presidente elector de Estados Unidos.

Sin embargo, aun con esto, hay lugar para pensar en buenos negocios. Tres son las razones que impulsan mi optimismo con las bolsas emergentes:

1. Valuaciones bajas (y atractivas)

Uno de los indicadores más utilizados para medir el potencial de un mercado en particular es el indicador Shiller P/ E que lo que hace es ajustar las ganancias por los ciclos de mercado para lograr una idea de tendencia desestacionalizada.

Para ello, se toma un promedio de las ganancias de la última década y se las compara con el precio actual del valor del índice.
Así, el promedio de Shiller P/E para los mercados emergentes es de 11,2 veces en la actualidad, bien por debajo de las 13 veces verificadas en la crisis de 2008 y de las más de 20 veces que tiene el S&P 500.

2. Monedas deprimidas

Las monedas de los mercados emergentes han sobre reaccionado negativamente a la llegada de Trump y la suba de las tasas de interés de Estados Unidos.

De acuerdo al índice de monedas emergentes llevado adelante por JP Morgan, en promedio las monedas cotizan con un descuento contra el dólar estadounidense equivalente al de la Crisis Asiática en 1997 y el default de Rusia en 1998.

Este nivel de descuento sugiere una recuperación para los próximos meses / años en virtud de la reversión cíclica de la historia de estas monedas.

3. Perspectivas económicas

Todo indica que el duro período 2015/2016 para las economías emergentes tendría su punto de inflexión a partir del año próximo, lo que supone mayor crecimiento esperado con su consecuente impacto positivo en las ganancias corporativas.

De esta manera, de prosperar esta visión, las economías en desarrollo volverán a ser el motor fundamental del crecimiento global.

Estos tres factores me invitan a tener un mayor optimismo para los mercados emergentes de aquí en adelante, presentándose como una oportunidad de valor para los inversores pacientes y de largo plazo.

Diego Martínez Burzaco, es economista jefe de Inversor Global y portfolio manager.

¿Es sostenible el reciente repunte de las bolsas?

  |   Por  |  0 Comentarios

Amundi lanza el primer ETF con exposición a bonos flotantes denominados en dólares
Pixabay CC0 Public Domain. A Mixed Bag, Not A Game Changer

En las últimas semanas, el mercado ha estado repleto de conversaciones sobre la existencia en las bolsas de una rotación desde sectores más defensivos, como los servicios públicos, los REIT y las compañías de gran capitalización, a otros «coyunturales más arriesgados «. Aunque es cierto que hay claramente una rotación en marcha, no creo que la tendencia actual vaya a durar.

Esta rotación comenzó en septiembre, cuando los datos económicos comenzaron a confirmar un repunte en el ritmo de crecimiento de EE.UU., y se reforzó después de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Los comicios dieron al mercado algo de adrenalina, al anticipar los inversores unos impuestos más bajos, menos regulaciones gubernamentales y un aumento significativo del gasto en infraestructuras, que teóricamente deberían mejorar el ritmo de crecimiento económico. En el entorno post-electoral, los sectores golpeados y de baja calidad como los bancos y las compañías industriales debido a niveles de deuda más altos y capacidades de generación de flujo de caja menos seguras, asumieron papeles de liderazgo de mercado.

Vamos a poner la reciente subida de las bolsas en en su contexto. Históricamente, las acciones tienden a subir en el cuarto trimestre del año, es un efecto conocido como el llamado «Santa Claus rally”. Además, tienden a aumentar durante tres o cuatro meses inmediatamente después de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Sin embargo, la rotación que estamos viendo desde el growth al value este año es atípica.

Sostenibilidad en cuestión

Dado todo el ruido que hay, es natural preguntarse si el repunte como consecuencia de la llegada de Trump es sostenible. Lo dudo. Estas son algunas de las razones:

  1. Los hedge funds, que en los últimos años han tenido un desempeño muy inferior a sus índices de referencia, han sido en gran parte responsables de la mayor parte del reciente movimiento del mercado, intensificando su actividad en un intento por mejorar sus cifras de desempeño y desencadenando un impulso altamente apalancado en las operaciones con compañías cíclicas y de más riesgo.
  2. Los operadores intradía vuelven a cobrar fuerza. Después de haber estado descansando durante gran parte del mercado alcista, que ya dura siete años, los volúmenes de operaciones intradiarias han aumentado sustancialmente en las últimas semanas, superando últimamente el volumen institucional.
  3. La participación minorista también ha aumentado. Eso tiende a ser un fenómeno de ciclo tardío, ya que el inversor medio tiende a comprar durante períodos de euforia y vender durante tiempos de desesperación.
  4. Es poco probable que el reciente rebote de ganancias observado en el tercer trimestre. El aumento de los precios de la energía, el fuerte fortalecimiento del dólar y el aumento de los tipos de interés son los principales obstáculos para las ganancias y el crecimiento económico. Estos factores podrían eliminar las ventajas de cualquier estímulo fiscal que llegue desde Washington el próximo año. Además, dada la avanzada fase del actual ciclo económico, la historia sugiere que sería prudente esperar una posible recesión en algún momento durante el primer mandato de Trump.

Alerta con la fase del ciclo

Las narrativas del mercado pueden ser poderosas, pero también pueden ser engañosas. Recordemos la narrativa a principios de 2009, en el momento más crítico de la crisis financiera mundial. La economía era demasiado frágil y el sistema financiero estaba sometido a demasiadas tensiones. Se pensó que en un entorno así, el crecimiento de las ganancias sería anémico, si no imposible. Los inversores se asustaron y muchos ni siquiera han regresado hasta hace poco.

Ese fue precisamente el enfoque equivocado. Si los inversores hubieran mirado más allá, se habrían dado cuenta de que los responsables políticos de todo el mundo estaban llevando a cabo un esfuerzo extraordinario para sanar los mercados financieros y las economías. Y lo consiguieron. Hemos experimentado un increíble crecimiento de los beneficios a medida que los mercados se recuperaron de la crisis.

Ahora, años más tarde, la narración es algo eufórica. Pero igual que fui escéptico de la narrativa negativa después de la crisis, soy escéptico de la euforia que vivimos hoy. La euforia es a menudo un fenómeno de las últimas fases del ciclo.

En mi opinión, es importante estar atento a varios inhibidores del crecimiento. La economía mundial sigue enfrentándose a una montaña de deudas, y dependiendo de la mezcla de políticas adoptada por la nueva administración, esa montaña podría crecer más rápidamente. Nos enfrentamos al desafío demográfico sustancial de una fuerza de trabajo envejecida y menos productiva.

Aunque los menores impuestos personales y corporativos y un impulso al gasto en infraestructuras probablemente aceleren el crecimiento, no son suficientes, en mi opinión, para contrarrestar los factores que han limitado tanto el PIB estadounidense como el mundial durante casi una década. Tal vez las medidas del gobierno consigan extender el ciclo actual un tiempo, pero es poco probable que consigan subirle la velocidad.

Hay algo de calidad en la rotación

Si creo que parte de la reciente rotación tiene sentido y probablemente perdurará. Las acciones bancarias se van a beneficiar de un régimen regulador más flexible y de unos tipos de interés más altos. También las empresas de energía, en particular los productores de carbón, tendrán una vida más fácil en el nuevo entorno.

En mi opinión, lo que está por delante tiene cosas buenas y malas, pero no va a cambiar el entorno. No creo que vaya a haber un aumento dramático en el crecimiento económico como consecuencia de las políticas de la nueva administración de Trump. En este contexto, continúo prefiriendo empresas de alta calidad con un historial de sólido crecimiento del flujo de caja, fuertes balances y altos rendimientos del patrimonio. Este tipo de empresas tienen un largo historia en superar las medias del mercado con el tiempo. Creo que seguirán ganando a largo plazo.

James Swanson es estratega jefe de MFS.

 

Afores, la enorme brecha en la participación de mercado

  |   Por  |  0 Comentarios

Afores, la enorme brecha en la participación de mercado
Pixabay CC0 Public DomainFoto: MaxAce. Afores, la enorme brecha en la participación de mercado

Rumbo a los primeros 20 años del sistema de cuentas individuales en el SAR, existe una marcada desigualdad entre las instituciones, algunas son demasiado grandes y otras muy pequeñas.

La diferencia o brecha entre la Afore que mayor participación de mercado tiene y la que menos acapara es de 29,44 puntos porcentuales; estamos en el nivel más amplio de la historia en dicho indicador. Es tan amplia la diferencia entre la Afore que más cuentas tiene respecto a la que menos participación registra, que la primera supera en más de 23 veces a la segunda, así de desigual es el mercado cuando está a unos meses de alcanzar los 20 años del sistema de cuentas individuales.

De acuerdo con los datos oficiales proporcionados por el agente regulador, la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), la Afore más grande del sistema, XXI Banorte, tiene un porcentaje de participación de mercado del 30,73% del total. En contraste, la Afore Metlife tiene un pedazo del pastel de apenas el 1,29%.

De hecho, solamente cuatro instituciones tienen una lectura de doble dígito en cuanto a su participación de mercado: XXI Banorte, Citibanamex, Coppel y SURA; el resto de las Afores apenas tienen un dígito.

Dos de ellas tienen un porcentaje de mercado inferior al 2%, se trata de Afore Inbursa con 1,91 y la ya mencionada Metlife con 1,29 puntos porcentuales.

En términos generales, la brecha en el mercado de las Afores es muy amplio, el porcentaje de participación de mercado solamente demuestra lo que consignamos anteriormente en otro análisis, el hecho de que cuatro instituciones del mercado mexicano acaparan casi el 75% del total, el resto se reparte entre las siete Afores sobrantes.

El sistema cumplirá en julio de 2017 sus primeros 20 años de existencia en su faceta de cuentas individuales, todo indica que llegará sumamente concentrado. Por las cifras oficiales, dos instituciones están en aprietos debido a una clara participación de mercado insuficiente, a menos que sean instituciones sumamente pequeñas que no aspiren a más.

Éstas instituciones son Afore Inbursa con poco más de un millón de clientes, 1.086.058 afiliados para ser exactos. La otra Afore es Metlife, con apenas 733.958 cuentas en administración.

Columna de Antonio Sandoval

Aumenta la divergencia entre los mercados emergentes

  |   Por  |  0 Comentarios

Aumenta la divergencia entre los mercados emergentes
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Clint Mason. Aumenta la divergencia entre los mercados emergentes

Los mercados emergentes han iniciado en 2016 una notable –aunque moderada– recuperación del crecimiento, gracias en gran medida a una flexibilización de las condiciones financieras como consecuencia de la mejoría de los movimientos de capitales y de una política monetaria más laxa. La recuperación de los precios de las materias primas también ha sido de ayuda.

El repunte del crecimiento en los mercados emergentes se ha visto impulsado principalmente por las condiciones monetarias más expansivas. Entretanto, hemos observado una mayor divergencia entre los países que han afrontado reformas y mejorado su gobernanza y los países con líderes populistas/no ortodoxos. Las reformas siguen siendo la clave para una recuperación sostenible del crecimiento, en vista del elevado apalancamiento financiero en los mercados emergentes y de la atonía del comercio global.

Con respecto a lo último, la elección de Trump es un factor de riesgo. Las compañías exportadoras de los emergentes han estado atravesando por dificultades a causa de la debilidad del crecimiento del comercio global. Un rumbo político más proteccionista en EE.UU. dificultará aún más a los emergentes el retorno a un crecimiento positivo de las exportaciones. Es probable que los mercados financieros reflejen en sus precios la incertidumbre y los crecientes riesgos para sus intercambios comerciales. Ello podría traer consigo un descenso de las entradas de capitales a los mercados emergentes.

Por tanto, mostramos preferencia por los mercados que no dependen, en demasía, de las exportaciones y en los que el cambio estructural y una mejor ejecución de sus políticas están generando un mayor crecimiento. Al equipo de NN Investment Partners nos gustan la India, Indonesia, Colombia, Argentina y Vietnam, mientras que adoptamos posiciones infraponderadas en Turquía, Brasil, Malasia, Sudáfrica, Rusia, Egipto, Filipinas y China.

Maarten-Jan Bakkum es estratega senior sobre Mercados Emergentes en NN Investment Partners.

Política y renta variable no siempre van de la mano

  |   Por  |  0 Comentarios

Política y renta variable no siempre van de la mano
CC-BY-SA-2.0, FlickrPhoto: Steve Snodgrass . Let’s Stick To The Knitting

A veces la política influye en los factores económicos, a veces no. El ex presidente Ronald Reagan fue un gran defensor de la economía centrada en la oferta, utilizando el trabajo de importantes economistas como Friedrich Hayek para proporcionar justificaciones teóricas de sus medidas políticas. Pero tengo que admitir una sensación de frustración que ha estado creciendo constantemente durante todo el año cuando alguien en la oficina comienza a hablar conmigo sobre política.

¿Cuándo nos volvimos todos expertos expertos, dispuestos a expresar nuestras opiniones sobre cuestiones que van desde el Brexit a Trump, pasando por el referéndum italiano y el futuro probable de Marine Le Pen en las próximas elecciones presidenciales francesas? ¿En qué momento los beneficios empresariales, los múltiplos de valoración y las perspectivas dejaron paso a la última encuesta de opinión como referente para las bolsas?

Hasta que Mariano Rajoy volvió a ser nombrado como presidente en España, el país estuvo sin gobierno durante más de 10 meses. En ese periodo de tiempo, el crecimiento del PIB español no se detuvo, registrando un 0,8% en los dos primeros trimestres de 2016 y un crecimiento ligeramente menor del 0,7% en el tercer trimestre. Un ejemplo que ilustra como a menudo no existe ningún vínculo entre la política y la economía.

Tampoco está clara la correlación entre el crecimiento económico subyacente y el comportamiento de las bolsas. Las ganancias de una empresa no se pueden comparar al crecimiento del PIB. Sólo porque una economía está yendo bien, o mal, no significa necesariamente que los mercados de valores vayan a correr la misma suerte.

Al observar las empresas más pequeñas, así es cómo funciona en la práctica. La rentabilidad de Prosegur, el negocio español de seguridad y transporte de dinero, depende del crecimiento del mercado europeo de alarmas y del mercado de movimiento de efectivo en América Latina. Los ingresos de otro grupo español, Viscofan, el fabricante de envolturas para cárnicos, responden exclusivamente a la demanda mundial de proteínas. ¿Lo entienden?

Independientemente del panorama económico, nuestra estrategia de inversión, mezcla de estilos ‘value’ y ‘growth’, favorece a las empresas que se benefician de las situaciones de crecimiento estructural, las posiciones de recuperación y los negocios cíclicos. Es cierto que esto último está más relacionado con la evolución de la economía.

Un buen ejemplo del tema del crecimiento estructural es el de la externalización europea. Las grandes empresas, limitadas por la burocracia, han logrado una mayor flexibilidad utilizando este método en una amplia gama de industrias, incluyendo sistemas de tecnología de la información, ingeniería, software y automoción.

Las situaciones cambiantes son una característica particular de los fabricantes europeos de materiales de construcción. En una industria conocida por su engranaje operativo, las empresas han reducido los costes desde la crisis financiera mundial. Cuando las ventas lleguen a niveles más parecidos a su media a largo plazo, el crecimiento debería ser significativo.

Al comienzo de cada año, los analistas tienden a hacer pronósticos optimistas sobre el crecimiento de los beneficios empresariales europeos, y en los meses siguientes tienen que rebajarlos. Así que cuando hago mis previsiones para el crecimiento de las pequeñas empresas europeas para el año 2017, los colegas empiezan a parecer escépticos.

Pero aquí están las matemáticas. El aumento del empleo sigue impulsando la eurozona hacia un crecimiento del 2%. Añada una inflación del 1%, el efecto de las adquisiciones del año anterior y la prima de crecimiento general de las empresas más pequeñas nos lleva a un crecimiento de alrededor del 6% de los ingresos. A continuación, sumamos la caída de los costes de producción y algunos beneficios adquisiciones y allí lo tienes. Una clase de activos que, a pesar de todas las turbulencias políticas que hay en torno a ella, produce un crecimiento decente.

Por lo tanto, la próxima vez que se sientan tentados a hablar de política, encuestas de opinión y los caprichos del sistema del Colegio Electoral de los Estados Unidos, intente contenerse, por muy tentador que sea. Nadie sabe qué camino van a seguir los acontecimientos políticos claves, igual que nadie sabe cuál va a ser la reacción de la renta variable a esos acontecimientos. Como inversores, vamos a tratar de mantener el rumbo y a centrarnos en los fundamentales de las empresas.

Ian Ormiston es gestor de Old Mutual Global Investors.

La mejora de los datos fundamentales de la banca europea sitúa la deuda financiera híbrida en el punto de mira

  |   Por  |  0 Comentarios

La mejora de los datos fundamentales de la banca europea sitúa la deuda financiera híbrida en el punto de mira
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Travis Wise. La mejora de los datos fundamentales de la banca europea sitúa la deuda financiera híbrida en el punto de mira

Desde la crisis financiera, y obedeciendo tanto a la nueva normativa (Basilea III y Solvencia II) como a la presión de los inversores y competidores, los emisores del sector financiero vienen reforzando continuamente la calidad de su balance. La cantidad, pero también la calidad de sus fondos propios se ha acrecentado constantemente, con un aumento de más de un billón de euros de los fondos propios duros de los bancos europeos desde el final de 2007, es decir, un incremento del 70% en siete 7 años. Debido a las restricciones impuestas, el volumen de los balances ha dejado de aumentar, e incluso disminuye en el caso de numerosas entidades.

La consecuencia de esta evolución es una disminución de la ratio de apalancamiento, que en el caso de los bancos europeos se sitúa a su nivel más bajo de los últimos 20 años. Por tanto, en la actualidad las instituciones financieras son no solo más sólidas, sino también menos arriesgadas. Esta tendencia es estructural y, a nuestro modo de ver, no está llamada a invertirse en los próximos dos o tres años, gracias a la vigilancia de los organismos de supervisión y de los mercados. Por consiguiente, el sector financiero es uno de los pocos que ofrece visibilidad sobre la continuación de la mejora de sus datos fundamentales, una cualidad infrecuente y apreciable para los inversores institucionales.

En un momento en que escasean las oportunidades en los mercados de renta fija, donde se corre el riesgo de que los rendimientos sigan siendo bajos de forma sostenida debido al contexto económico, la deuda híbrida del sector financiero ofrece, a nuestro parecer, una configuración perfecta:

  • Datos fundamentales sólidos y en clara mejoría, por efecto de la nueva normativa
  • Cotizaciones muy atractivas para un riesgo moderado
  • Una oferta razonable en un mercado que ya tiene peso y está bien desarrollada, con una demanda en sensible crecimiento desde hace varios trimestres, procedente de inversores institucionales que están reconsiderando este atractivo segmento.

En la actualidad, se pueden construir dos carteras: una principal, centrada, aunque no exclusivamente, en los títulos de deuda Tier 2, que ofrecen rentabilidades del 3% al 4% para una cartera con una calificación global con grado de inversión (en torno a BBB), y una segunda cartera centrada en los títulos de deuda “Additional Tier 1”, que ofrecen una rentabilidad del 5% al 6% y tienen una calificación media de tipo ‘crossover’ y en torno a BB.

Consideramos que estas dos carteras son complementarias y se deben integrar en asignaciones que variarán en función de las capacidades de asumir riesgo de cada inversor, pero que podría rondar los dos tercios en títulos de deuda Tier 2 y un tercio en títulos de deuda “Additional Tier 1”.

François Lavier es gestor del fondo Objectif Credit Fi y de estrategia en deuda financiera de Lazard Frères Gestion

Nuevo año, ¿nuevas inversiones?

  |   Por  |  0 Comentarios

Nuevo año, ¿nuevas inversiones?
Pixabay CC0 Public DomainFoto: FraukeFeind. Nuevo año, ¿nuevas inversiones?

Siempre al finalizar un año y prepararnos para empezar un año nuevo nos planteamos nuevos retos y nuevas ilusiones para el próximo año, pero antes debemos mirar atrás y revisar cómo nos ha ido. Este razonamiento también se aplica a nuestras inversiones, ¿cómo han evolucionado? ¿hemos ganado o perdido? ¿qué hemos hecho bien o que podemos mejorar?

Vamos a plantearnos una serie de consejos para mejorar nuestras inversiones en este año nuevo que empieza. Primero como hemos comentado, empezaremos por revisar nuestra trayectoria en este año que se acaba. Aunque hay algunos brókeres chilenos que nos dan esta información, no es fácil encontrar un bróker que nos proporcione todas estas herramientas para revisar la evolución de nuestra cartera.

¿En qué instrumentos hemos invertido a lo largo del año?

Nuestra primera pregunta para revisar nuestra inversión es esta, hemos invertido en renta fija o en renta variable, más específicamente en fondos, acciones, ETFs; o si solo inviertes en fondos en acciones, esta pregunta será fácil y rápida de contestar, pero si tienes más inversiones es recomendable hacerse un pequeño esquema donde tengamos presente que cantidad y el porcentaje de nuestra cartera que está invertida en cada uno de los instrumentos. De esta forma conseguimos ver la estructura de nuestras inversiones con un solo vistazo y saber que, cantidad de dinero tenemos invertida en acciones o fondos. A continuación, les presentamos un ejemplo:

¿En qué empresas hemos invertido?

Esta pregunta es interesante para saber el listado de todas las empresas en las que hemos invertido a lo largo del año y que montó hemos invertido en cada empresa. Para después poder ver qué empresas nos han hecho ganar dinero y las empresas por las que nuestra cartera ha tenido pérdidas o no ha conseguido la rentabilidad esperada. También podemos incluir si estas empresas han terminado el año con datos positivos o han tenido pérdidas.

A continuación, les presentamos un ejemplo:

¿En qué sectores hemos invertido?

Muchas personas se centran en un determinado sector que conocen e invierten todo su dinero en acciones de este sector. Por ejemplo, hemos invertido solo en el sector bancario: Banco de Chile, Banco Santander, Itau Corpbanca, A continuación, vamos a ver la evolución de estos bancos.

Evolución Banco de Chile (CHILE)

Al revisar el gráfico del año de Banco de Chile, observamos cómo ha tenido una proyección positiva, con una tendencia alcista desde julio. A pasado de cotizar en 71,12 pesos al empezar el año, a cotizar 78,6200 pesos a finales de diciembre.

Evolución Banco Santander (BSantander)

Al revisar el gráfico anual de Banco Santander, observamos que ha seguido una tendencia alcista durante el año, pasando de cotizar a 31,66 pesos a cotizar a 37,15 pesos.

Evolución Itaú Corpbanca (ITAUCORP)

Al revisar el gráfico del Banco Itau Corpbanca, observamos que, aunque empezó el año con una tendencia alcista hasta alcanzar los 6,201 pesos ahora se encuentra en los mismos valores que a principios de año 5,504 pesos.

Una vez hemos visto la evolución algunos de los bancos de Chile, debemos determinar que la mayoría de los bancos analizados han seguido una trayectoria positiva a lo largo del año, excepto Itau Coprbanca que ha vuelto a valores de principios del año. También podemos observar que, aunque han reportado buenos resultados, tampoco han sido unas ganancias excepcionales, por los que nos podría ayudar diversificar en otros sectores con buenas perspectivas.

¿En qué países hemos invertido?

Hemos invertido en acciones de Chile o nuestra cartera está compuesta por acciones americanas. Si hemos invertido en fondos: ¿hemos invertido en fondos de América Latina o hemos invertido en fondos de Asia, Brasil o Estados Unidos? Es importante conocer donde hemos invertido nuestro dinero, para estar atentos de los eventos que nos pueden afectar.

¿Cuál ha sido el plazo de la inversión? ¿Somos inversores a corto plazo o a largo plazo?

 Es el momento de determinar si nuestras inversiones están funcionando o debemos de centrarnos en inversiones más riesgosas o más conservadoras. Aunque lo mejor siempre es diversificar nuestras inversiones, debemos tener en cuenta las ventajas y desventajas de invertir a corto y largo plazo:

  • Los inversionistas que invierten a largo plazo experimentan menor presión al invertir.
  • Al invertir a largo plazo tenemos menores comisiones.
  • Al invertir a largo plazo no hace falta vigilar las inversiones todos los días.
  • Al invertir a corto plazo las probabilidades de perder nuestro dinero se multiplican.
  • Al invertir en largo plazo debemos tener paciencia y no podremos recuperar nuestro dinero en el corto plazo.

¿Los resultados han sido positivos? ¿Por qué?

Aunque hayamos reportado resultados positivos en nuestras inversiones, es importante revisar cuales han sido las razones de nuestra ganancia para poder mantener estas ganancias en el largo plazo. A continuación, vamos a poner algunos ejemplos:

  • Una correcta diversificación.
  • He recibido dividendos que me han ayudado a mejorar mis inversiones.

¿Los resultados han sido negativos? ¿Cuáles han sido los motivos?

Si han sido negativos, con más motivo debemos de revisar nuestras inversiones y tomar decisiones. ¿Estamos invirtiendo en las empresas equivocadas? ¿O en sectores en decadencia? ¿Nuestro plazo de inversión es el correcto? Debemos de tener en cuenta todas estas cuestiones y tomar decisiones que nos ayuden a mejorar nuestras inversiones en el nuevo año.

  • He perdido dinero con las inversiones a corto plazo.
  • He invertido en el sector inmobiliario y estas empresas han reportado malos resultados durante el año.
  • No he diversificado lo suficiente.

Ahora que ya hemos visto algunos consejos para controlar nuestras inversiones y prepararnos para el año nuevo, ten en cuenta que también debemos tener en cuenta que debemos de declarar nuestras inversiones en el momento de la Operación Renta 2017.

Opinión de Andrea Broseta, responsable de desarrollo de negocio en Rankia Chile.

El equilibrio “perfecto”

  |   Por  |  0 Comentarios

El equilibrio “perfecto”
Pixabay CC0 Public DomainFoto: Alex_Koch. El equilibrio “perfecto”

Se acaba un año muy duro y sin rendimiento en la mayoría de activos. Empezamos con fuertes bajadas entre enero y febrero. Recuperamos el camino perdido durante casi cuatro meses para vivir un día de locos con el Brexit. Finalmente, llegó Trump para acabar de romper todas las previsiones.

Los bancos centrales tienen como objetivo mantener el precio de los activos y van a seguir presentes en los mercados, no los subestimemos. Esto hará que se mantenga el equilibro “perfecto”. El problema es que todos los activos (renta fija, variable, inmobiliario,…) nos siguen pareciendo caros y además distan de sus precios fundamentales.

Todo lo que se nos viene encima en el 2017 es más que sabido por todos (subida tipos, inflación, estallido de la deuda…). Creemos que en muchos activos seguirán respetando sus rangos, vender en tops y comprar en dips. Focalizarse en empresas y gestores de calidad, nada de experimentos.

En DiverInvest seguimos pensando que ser cautos y tener una cartera cada vez más diversificada y muy bien construida va a ser fundamental para abordar 2017. El crecimiento del mundo (aproximadamente un 3,2% de media en los últimos cinco años) parece que va a seguir así, bajo y lento. Los problemas reales persisten. Además, Trump está moviendo todos los mercados especialmente la inflación en EE.UU., los bonos, el dólar y la bolsa. Trump va a ser un líder muy errático pero no hay más líderes. Tendremos mercados aún más volátiles.

Por ello, proponemos seguir tomando riesgos asimétricos. Hay que gestionar el riesgo de forma activa. Optamos por gestores muy activos de sesgo conservador, a la vez que usamos productos de gestión pasiva con costes muy bajos para la parte de generación de rentas. Y por último, como siempre, ¡el cash is King!

Somos conscientes que nos encontramos en un entorno atípico jamás visto. Por ello trabajamos a diario por si el equilibrio “perfecto” se pudiera romper en cualquier momento.

Éste es el cuadro resumen de nuestras recomendaciones para el año 2017.

 
Este próximo año celebramos nuestro décimo aniversario.
 
Felices fiestas, felices inversiones

Columna de David Levy, de DiverInvest EAFI

¿Qué veremos en 2017, estancamiento o recuperación?

  |   Por  |  0 Comentarios

¿Qué veremos en 2017, estancamiento o recuperación?
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Clint Mason. ¿Qué veremos en 2017, estancamiento o recuperación?

Al comenzar 2016, hubo claramente preocupaciones legítimas sobre la sostenibilidad de la recuperación. Esto se debió a una contracción en la actividad manufacturera de Estados Unidos, lo que, a su vez, hizo que el crecimiento de Estados Unidos decepcionara en un contexto de continua debilidad en el mundo desarrollado.

Sin embargo, algunos indicios habían comenzado ya a surgir indicando que quizás no todo era fatalidad y pesimismo. En el último trimestre de 2015, los precios de las materias primas industriales comenzaron a recuperarse desde sus niveles mínimos. La debilidad persistente de los precios del petróleo tendió a oscurecer un rebote general de las materias primas, pero este fue un indicador muy rezagado. La demanda de petróleo se mantuvo sólida y los precios finalmente se recuperaron convincentemente.

La agresiva relajación monetaria y fiscal en China comenzó a dar sus frutos, deteniendo la desaceleración del crecimiento en esa economía clave. Los recientes datos en Estados Unidos apuntan a un crecimiento moderado, mientras que podemos calificar las condiciones económicas tanto en Europa como en Japón de resistentes.

Quedan obstáculos

¿Frustrarán de nuevo las fuerzas del estancamiento un repunte significativo en el crecimiento global? Ciertamente, los vientos en contra aún persisten. Los niveles de deuda y capacidad siguen siendo incómodamente altos, la demanda final es anémica y es probable que perduren los factores que causan un crecimiento inusualmente débil de la productividad.

Sin embargo, la relajación de las condiciones financieras en todo el mundo desarrollado, que comenzó a principios de 2016, está comenzando a fomentar un cambio en las tasas de crecimiento. Esto tiene potencial para desencadenar el primer repunte sincronizado en el crecimiento mundial desde la recuperación de 2010. Aunque es extremadamente improbable que cualquier recuperación del crecimiento coincida con el nivel de la que comenzó en 2000, representaría un importante cambio en la dirección.

Desde Investec, hay una probabilidad creciente de que la mejora de las métricas de crédito, las cifras constantes de gasto de los consumidores y una mejora esperada en el gasto de capital (aunque fuera baja), puedan producir un período de alivio del estancamiento económico global a más largo plazo.

Por supuesto, una evolución de este tipo estaría supeditada a la evolución de la economía china y, a pesar de los problemas estructurales a largo plazo, esperamos que el impacto de la política monetaria fiscal y expansionista estabilice el crecimiento por más tiempo de lo que prevé ahora mismo el consenso.

Otros mercados emergentes clave, como Brasil, continúan revertiendo los indicios previos de recesión, mientras que los países orientados a las reformas, como India e Indonesia, también están bien posicionados para mantener sus tasas de crecimiento en el próximo año.

Philip Saunders es co-responsable de Multi Asset Growth de Investec.