Foto: Technologies, Flickr, Creative Commons. Gobernanza de productos e incentivos: los detalles que concreta la Directiva Delegada que complementa MiFID II publicada el pasado viernes
El Diario Oficial de la UE publicó el pasado viernes la Directiva Delegada 2017/593, de 7 de abril de 2016, que complementa MiFID II. Esta Directiva Delegada resuelve muchas de las dudas que aún sobrevolaban en la aplicación de la directiva de instrumentos financieros e incluye novedades importantes en materia de gobernanza de productos e incentivos.
En materia de gobernanza de productos, la Comisión considera que se deben aplicar estas normas tanto para productores como para distribuidores cuando una empresa de servicios de inversión cree, desarrolle, emita o diseñe instrumentos financieros e intervenga también en la distribución de tales productos.
Asimismo, y a la luz de los requisitos dispuestos en MiFID II y en aras de la protección de los inversores, las normas en materia de gobernanza de productos deben aplicarse a todos los productos vendidos en mercados primarios y secundarios, con independencia del tipo de producto o servicio prestado y de los requisitos aplicables en el lugar de la venta. Sin embargo, tales normas pueden aplicarse de manera proporcionada, dependiendo de la complejidad del producto y del grado en que pueda obtenerse información públicamente disponible, teniendo en cuenta la naturaleza del instrumento, el servicio de inversión y el mercado destinatario. Por proporcionalidad debe entenderse que estas normas pueden ser relativamente simples para determinados productos sencillos distribuidos en régimen de mera ejecución, cuando tales productos sean compatibles con las necesidades y las características del mercado minorista general.
Para el funcionamiento eficiente de las obligaciones en materia de gobernanza de los productos, los distribuidores deben informar periódicamente a los productores de su experiencia con los productos. Aunque los distribuidores no deben estar obligados a informar de cada venta a los productores, sí deben proporcionarles los datos necesarios para que puedan revisar los productos y comprobar que siguen siendo conformes con las necesidades, características y objetivos del mercado destinatario que hayan definido. La información pertinente puede incluir datos relativos al importe de las ventas fuera del mercado destinatario del productor, un resumen de los tipos de clientes, una síntesis de las reclamaciones recibidas o las respuestas obtenidas tras plantear las preguntas propuestas por el productor a una muestra de clientes.
Finalmente, en materia de gobernanza de producto, la Directiva Delegada impone a las empresas de servicios de inversión la obligación de identificación y evaluación debida de las circunstancias y las necesidades de los clientes en los que se pretendan centrar a la hora de ofrecer o recomendar productos. Asimismo, les obliga a revisar periódicamente los productos de inversión que ofrecen o recomiendan y los servicios que prestan, teniendo en cuenta todo evento que pueda afectar sustancialmente al riesgo potencial asociado al mercado destinatario identificado.
Incentivos
En materia de incentivos, MiFID II ya restringió la posibilidad de que las empresas perciban o paguen incentivos. No obstante, la Comisión señala que solo deben abonarse o cobrarse honorarios, comisiones o beneficios no monetarios cuando lo justifique la prestación de un servicio adicional o de nivel superior al cliente pertinente. Puede tratarse de proporcionar al cliente asesoramiento en materia de inversión sobre una amplia gama de instrumentos financieros que le convengan, incluido un número apropiado de instrumentos de proveedores terceros de productos, y el acceso a tales productos, o de proporcionarle asesoramiento no independiente combinado bien con una oferta para evaluar, con una periodicidad mínima anual, si los instrumentos financieros en los que haya invertido siguen conviniéndole, o bien con otro servicio continuo que probablemente le resulte de valor.
También puede tratarse, en el área de los servicios distintos del asesoramiento, de proporcionar al cliente acceso, a un precio competitivo, a una amplia gama de instrumentos financieros que probablemente satisfagan sus necesidades, incluido un número apropiado de instrumentos de proveedores terceros sin vínculos estrechos con la empresa de servicios de inversión, junto con, por ejemplo, la provisión de herramientas de valor añadido, como instrumentos de información objetiva, que ayuden al cliente de que se trate a adoptar decisiones de inversión o le faculten para el seguimiento, la modelación y el ajuste de la gama de instrumentos financieros en los que haya invertido. El valor de las mejoras de la calidad antes referidas que la empresa de inversión proporcione a los clientes receptores del servicio pertinente ha de ser proporcional a los incentivos percibidos por dicha empresa.
En este sentido, la Comisión también señala que para que las empresas de servicios de inversión establecidas en la Unión Europea puedan cumplir el requisito de no aceptar ni retener honorarios, comisiones u otros beneficios monetarios o no monetarios abonados o proporcionados por un tercero o por una persona que actúe por cuenta de un tercero en relación con la prestación del servicio a los clientes, según lo dispuesto en el artículo 24, apartados 7 y 8, de MiFID II, conviene que las empresas de servicios de inversión que presten a la vez servicios de ejecución y de investigación fijen su precio y lleven a cabo su prestación por separado.
Tribuna de Ana García Rodríguez, socia responsable del departamento de servicios financieros y regulatorio bancario de Baker McKenzie.
Foto: Max Pixel / Creative Commons Zero - CC0. Todo tiempo pasado fue mejor, o no
Actualmente reina un pesimismo generalizado en cuanto a la situación del mundo. Solo una minoría piensa que nuestra sociedad globalizada progresa, hecho totalmente comprensible si tenemos en cuenta las consecuencias de la Gran Recesión, la situación geopolítica inestable, el cambio climático, las desigualdades sociales y el terrorismo. Pero la realidad es que la actualidad tan cambiante desvía nuestra atención de las noticias más lentas, subexpuestas, pero a menudo más fundamentales. El estadista y médico sueco Hans Rosling, desaparecido recientemente, utilizaba datos visuales para describirnos las numerosas evoluciones positivas por las que atraviesa el mundo. Probablemente seguirán su obra Steven Pinker, Max Roser y Johan Norberg, optimistas convencidos de los beneficios del progreso, que basan su punto de vista en series de datos que se remontan mucho más tiempo atrás.
Los números en perspectiva
Tomemos como ejemplo la pobreza extrema. Hace doscientos años, alrededor del 90% de la humanidad vivía en unas condiciones de vida que actualmente calificaríamos de extrema pobreza. El aumento de productividad generado por la industrialización ha ido dejando atrás estas condiciones de vida. Sin embargo, en el año 1950 tres cuartas partes de la población mundial se encontraban en esta situación. A principio de los años 80, este porcentaje aún se situaba en el 44%. En cambio, el 2015 era del 10%, un resultado excepcional, especialmente si tenemos en cuenta que la población mundial se ha multiplicado por siete en los dos siglos transcurridos.
El estado de salud de la población en general también ha experimentado una mejora espectacular. El 1800 aproximadamente el 40% de los niños fallecía antes de cumplir los cinco años. El 2015 esta cifra había disminuido al 4%. La esperanza de vida media era de 30 años a principios del siglo XX, respecto a los más de 70 años actuales. El 1947 la mitad de la población mundial sufría malnutrición crónica, mientras que en 2017 esta cifra se situaba en el 10%.
Además, la mejora de la salud ha ido acompañada de un progreso en educación y un retroceso del analfabetismo. Las cifras de la OCDE indican que hace dos siglos el 12% de la población mundial sabía leer y escribir. Esta cifra fue aumentando a lo largo del siglo XIX hasta alcanzar el 20%, en 1950 llegó al 40% y actualmente se situa en el 86%. El 1950 un niño pasaba una media de 3,2 años en los pupitres de la escuela, respecto a los casi ocho años actuales.
El atractivo de la edad de oro
Hay más evoluciones positivas que se deben mencionar: la democracia se extiende, la intensidad del CO2 de la economía baja… De hecho, no somos muy conscientes de los grandes pasos que ha dado la humanidad. Los sucesos negativos suelen causar más impresión que los sucesos positivos; una tendencia imputable a la evolución humana, porque el miedo y la prudencia aumentan considerablemente las oportunidades de vivir mejor y más tiempo. Steven Pinker nos aporta otra explicación, que invoca la psicología de la moral. Quejarse de los problemas demuestra, por ejemplo, que les damos importancia. El atractivo de la edad de oro no es de extrañar, aunque esta edad de oro no haya existido nunca; la idealización de la infancia despreocupada es un buen ejemplo de ello.
Sin embargo, algunas evoluciones despiertan inquietud. Podemos citar, entre otros, el calentamiento del planeta; los ecosistemas amenazados pueden trastornar la vida de millones de personas. En muchos lugares, las condiciones de vida solo pueden cualificarse de lamentables y la opresión sigue siendo un fenómeno ampliamente extendido. Las desigualdades de los salarios y de la riqueza aumentan en numerosas partes del mundo. La globalización y los avances tecnológicos engendran, sin lugar a dudas, más prosperidad, pero también surgen ganadores y perdedores. Tampoco podemos olvidar que el progreso no siempre sigue una trayectoria lineal. No hace falta mucha imaginación para prever un nuevo conflicto militar a gran escala. Hay muchas razones para seguir atentos, vigilantes, e indignados, sobre todo a la vista de las últimas derivas políticas. Yo tampoco suelo ser el economista más optimista, pero detenerse de tanto en tanto para “rascar” la superficie no puede hacer daño a nadie.
Foto: Roland Lubiger. América Latina debe adaptarse al nuevo paradigma de negocios
2017 ha sido un año complejo; por un lado, vemos un panorama global de negocios más disruptivo que nunca, cargado de una altísima competitividad, que pone a prueba la palabra “certidumbre” y que opera bajo nuevas condiciones geopolíticas. Por el otro, vemos cada vez más segmentos de la población, a nivel global y local, rezagados, inconformes con su desarrollo social y su propio crecimiento económico. Las brechas son más amplias entre el mundo globalizado y los rezagados.
Ante la incertidumbre, surge la pregunta ¿cómo actuar ante una realidad tan marcadamente desbalanceada? ¿Cuál es el rol de la comunidad empresarial global y local en torno a estos temas? Sin duda, las empresas ejercen un relevante rol en las sociedades. No son únicamente generadoras de empleos, movilizadoras de las economías; también son promotoras del progreso de sus colaboradores y comunidades en donde operan, que serán el detonador del crecimiento de la región.
Este ha sido un tema de gran relevancia para el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), que durante esta semana en la versión regional en América Latina, cobra el objetivo de llamar la atención sobre el papel que todos los líderes, desde los gobiernos, iniciativa privada hasta las organizaciones sin fines de lucro, tienen en sus círculos de acción ante la discusión sobre el fomento del desarrollo y emprendimiento en la Cuarta Revolución Industrial en la región.
Ante esto, los líderes de todos los sectores deben estar preparados para reaccionar de manera creíble, accionando de una manera proactiva hacia las preocupaciones sociales, de sus propios colaboradores, de sus entornos, sin descuidar la estrategia para alcanzar sus objetivos de negocio, sobrellevando los cambios que se den en sus industrias y adaptándose a nuevos modelos que les permita continuar incursionando en nuevos mercados.
Visión empresarial
Debido a un escenario internacional marcado por la constante incertidumbre, en el que los caminos se irán trazando sobre la marcha, en la región y, también en México, las expectativas de crecimiento estarán regidas por un optimismo cauteloso.
Particularmente en México, de acuerdo con el estudio Perspectivas de la Alta Dirección en México 2017, las organizaciones esperan crecer al menos un dígito ante la situación actual. Más de tres cuartas partes de los encuestados (75%) señalan la innovación como una de sus tres prioridades, cualidad que permitirá sean auténticamente ágiles y puedan sortear con mayor facilidad este entorno, en el que se refleja de manera clara un cambio de paradigma en los negocios.
Aunque, de acuerdo con la misma encuesta, Estados Unidos es el principal foco de interés de las inversiones de los empresarios mexicanos, también muestran una clara intención por adentrarse en nuevas economías de países como Colombia (24%), Perú (14%) y Chile (13%); donde seguramente tendrán enormes oportunidades, que podrán usar en beneficio de sus empresas si cuentan con una capacidad óptima de adaptación. Esa habilidad debe ir encaminada al fortalecimiento del mercado interno, que sigue ofreciendo grandes alternativas de crecimiento.
En términos de negocio, los principales retos son:
Adoptar enfoques innovadores que permitan gestionar las transformaciones
Asimilar con rapidez las nuevas tecnologías
Administrar riesgos
Fortalecer el mercado en su conjunto.
Es momento de considerar el nuevo entorno y este cambio de paradigmas como una oportunidad de diversificación y de mayor competitividad para la economía de la región.
Tiempo de tomar acciones
En términos sociales, el desafío para los empresarios será echar mano de sus conocimientos y destrezas para conducir sus negocios por nuevos caminos, en ocasiones desconocidos.
En un mundo en el que la globalización avanza, dejando a gente atrás, y en el que la disrupción ha cambiado tanto modelos de negocios, como conceptos que alguna vez pensamos inamovibles; los directores empresariales deben buscar formas de impulsar a la región y por ende la rentabilidad de sus negocios. Ahora más que nunca, es necesario que los líderes respondan con acciones reales para mejorar el estado del mundo en el que vivimos.
Pixabay CC0 Public DomainTPS-Dave. Gobiernos, empresas e individuos deben reescribir el libro de seguridad en la era de Internet
La muralla de Adriano en Inglaterra protegía la frontera norte del Imperio Romano en el siglo II. Se extendía de este a oeste en cien kilómetros repletos de castillos, torres de observación y fortalezas para mantener a la población de Roma a salvo de los enemigos. Actualmente las defensas físicas son todavía parte de la seguridad nacional, pero en el siglo XXI hay que luchar contra los invasores digitales. Tanto es así que el auge del Internet de las cosas –dispositivos conectados basadas en sensores y datos en la nube– implica que piratear un dispositivo vulnerable, como un monitor de bebé, una Wi-Barbie o una nevera inteligente, puede facilitar la entrada no deseada una red de infraestructura. Hay que tener en cuenta que los muros resultan inútiles una vez que la defensa ha sido violada. Así que los principios deben evolucionar y los gobiernos, empresas e individuos reescribir el libro de seguridad con nuevas formas para mantenerse a salvo en la era de Internet.
De hecho, la vulnerabilidad se puso de manifiesto una vez más el 26 de octubre de 2016 cuando la aplicación informática maliciosa Mirai, en uno de los más audaces ataques cibernéticos, entró en los sitios de Amazon, la BBC, el gobierno sueco y muchos otros. Esta nueva raza de virus toma el control de dispositivos en el internet de las cosas mal asegurados explorando logins y passwords para crear un ejército de botnet, ordenadores controlados de forma remota, con los que lanzar ataques a gran escala en la red. Un mes más tarde este virus se introdujo en el operador alemán de telecomunicaciones Deutsche Telekom dejando sin internet a un millón de sus usuarios. No es difícil ver por qué virus como Mirai prosperan en un sistema de seguridad basado en contraseñas: dos de cada tres personas no las cambian con frecuencia y contraseña y «123456» son las más comúnmente utilizadas. Nuestros asesores llaman a este fenómeno PICNIC (Problem In Chair Not In Computer) pues la culpa reside en el usuario.
El caso es que ignorar la seguridad cibernética es costoso. Las aplicaciones maliciosas generaron 24 millones de dólares en ingresos a delincuentes cibernéticos en 2015 y produjeron 325 millones de daños indirectos, incluyendo desinfección y restauración de datos, según Price WaterhouseCoopers. Según algunas estimaciones la industria de seguridad global puede ser de 500.000 millones de dólares para 2050. Gartner espera que el coste de abordar los defectos de seguridad en el Internet de las cosas aumenten hasta el 20% de los presupuesto anuales en tecnologías de la información para finales de esta década, desde menos del 1% que suponían en 2015. Muchas empresas de seguridad de tecnologías de la información y desarrollo de sistemas de seguridad tecnológica pueden beneficiarse del aumento del gasto contra el delito cibernético y experimentar un notable crecimiento, generando para los inversores abundantes oportunidades en esta industria de rápida evolución.
Plantar cara
De hecho prevenir ataques no es la solución a largo plazo. Aunque los individuos han de ser más propensos a cambiar las contraseñas y los gobiernos considerar nuevas normas para proteger la red, lo que puede incluir que las empresas sean legalmente responsable de la pérdida de datos, así como criminalizar la escritura de código malicioso, tal vez es momento de reconocer que es imposible evitar que las aplicaciones maliciosas infecten la red, como lo es evitar que los virus infecten a los seres vivos.
La industria, en lugar de construir muros, puede empezar la lucha desde dentro: mediante sistemas inmunes, eficaces, capaces de prevenir, retrasar o interrumpir la actividad malintencionada. Proporcionar anticuerpos digitales es precisamente lo que está haciendo Darktrace, una empresa de seguridad cibernética de Reino Unido. La firma, fundada por altos funcionarios de organismos de inteligencia MI5, GCHQ y NSA, dotan a las máquinas de minería de datos a gran escala y aprendizaje para luchar contra amenazas sin necesidad de intervención humana. Darktrace también facilita a los organismos policiales analizar y predecir el comportamiento anormal y los delitos.
Además en los próximos años, a medida que más personas están en línea la convergencia de amenazas físicas y cibernéticas puede acelerarse. Hoy en día ya casi la mitad de la población mundial utiliza Internet, 3.600 millones y para 2020 pueden ser 5.000 millones. A ello se añade que no es solo la cantidad de gente sino más cosas conectadas. De hecho el número de objetos interconectados puede llegar a 30.000 millones en 2020 desde 13.000 millones hoy día y el mercado del internet de las Cosas duplicarse hasta los 3,7 billones de dólares para finales de esta década. Mientras los gobiernos pugnan de desarrollar un marco jurídico internacional para hacer frente a este crecimiento las empresas ya está dando los pasos.
En EE.UU. las empresas Fortinet y Symantec proporcionan tecnologías sandboxing para probar programas no confiables de terceros sin verificar. Junto con sistemas biométricos ayudarán a reducir las actividades criminales en línea mediante detección de anomalías y advertencia anticipada. Por su parte la sueca ASSA Abloy, especializada en control de acceso, produce llaves bluetoothcon diferentes derechos de desbloqueo basados en el tiempo, con registro del uso real mediante una aplicación instalable en los smartphones de los empleados.
Tribuna de Yves Kramer, gestor de Pictet Security.
Foto: Thelmadatter. Banxico subirá 25 puntos base, al tipo de cambio todavía le falta un peso para llegar a su nivel pre-Trump
El jueves se reúne la Junta de Gobierno del Banco de México y anticipamos un alza de 25 puntos base en la tasa de referencia. A nuestro juicio, la reciente apreciación del tipo de cambio en parte, apoyada por la determinación de la Comisión de Cambios de llevar el nivel del tipo de cambio más en línea con los fundamentales económicos del país y el desencanto del mercado con la capacidad de la administración Trump de avanzar su agenda, permite a la Junta de Gobierno reducir la magnitud de alzas previas de +50 puntos base a +25 puntos base. Por su parte, dados los efectos de segundo orden que hemos identificado en nuestros reportes de inflación y el hecho de que todavía al nivel del tipo de cambio le falta para llegar a los niveles acordes con los fundamentales (asumiendo que dicho nivel corresponde con el que prevalecía previo a la victoria de Trump y su retórica fue lo que separó al nivel del tipo de cambio de aquél consistente con los fundamentales económicos) hacen incongruente que Banxico no suba la tasa de referencia este jueves.
El Gobernador del Banxico de México recientemente afirmó que el tipo de cambio está subvaluado y debería de regresar a los niveles de antes de la victoria de Trump. Por su parte, el Secretario de Hacienda también se refirió recientemente a que el tipo de cambio debería estar más en línea con los fundamentales económicos del país. Finalmente, el Secretario de Relaciones Exteriores dijo que se está considerando dentro de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte un mecanismo de estabilización del peso (sin dar más detalles), lo que sugiere que el mecanismo evitaría depreciaciones (o apreciaciones de la moneda) alejadas de los fundamentales económicos. Posiblemente cada uno de los funcionarios con justificaciones diferentes, pero todos con el mismo objetivo de lograr que el peso mexicano se aprecie hacia el nivel que marcan los fundamentales económicos. Pero esto asumiría que no habrá efecto Trump, lo que ahora parece aventurado.
El nivel acorde con los fundamentales económicos podría estar ligeramente por debajo de los 18 pesos por dólar, lo que significa que todavía hay un efecto Trump y el trabajo de Banxico no ha terminado. Sin pretender que es un cálculo científico, previo a las elecciones de Trump, cuando el mercado anticipaba una victoria de Hillary Clinton, el peso mexicano se encontraba alrededor de 18,5 por dólar. En dicho momento, nosotros argumentábamos que el tipo de cambio se había depreciado por encima de sus pares emergentes, reflejando los riesgos internos del país, en particular los de finanzas públicas y Pemex, además que las calificadoras de crédito nos amenazaban con una baja en la calificación de riesgo. Dicha depreciación demandaba, decíamos en su momento, un nivel para la tasa de referencia más alto y alzas por encima de la Fed que ya se dieron en noviembre, diciembre y febrero (las últimas también se justificaron por el deterioro de la inflación al consumidor). Así, el nivel acorde con los fundamentales debería ser menor a 18,5 por dichas alzas, tomando en cuenta también la del próximo jueves. Por su parte, de las elecciones presidenciales en EUA a la fecha, un índice de monedas emergentes indica que éstas en promedio se han apreciado, lo que a su vez baja el nivel del tipo de cambio nacional acorde con fundamentales, debido a que un determinante importante del nivel del peso mexicano es su posición relativa a las demás monedas emergentes. Tomando en cuenta lo anterior, al día de hoy el tipo de cambio sin efecto Trump podría pensarse entre 17,8-18 pesos por dólar y está sujeto a las fluctuaciones de las monedas emergentes. Así, el peso mexicano sigue operando con un riesgo Trump, de casi un peso, lo que señala que el trabajo de Banco de México no ha terminado.
La derrota legislativa del viernes pasado de la agenda Trump fue positiva para el peso mexicano, ya que debilitó la retórica de Trump contra México, pero todavía es muy temprano para cantar victoria. No podemos todavía descartar la posibilidad de un plan fiscal que baje los impuestos a las empresas en EUA y haga más atractiva la inversión en ese país, aunado a la aplicación de un impuesto fronterizo que sigue cobrando fuerza, y todavía no se conocen los detalles de los principios con los que van a negociar el TLCAN. Dichos sucesos serían negativos para el peso mexicano como argumentamos previamente en “La apreciación sostenida del tipo de cambio contingente al Plan B”, del pasado 2 de marzo, y, sin duda, de aplicarse, provocarían un nuevo nivel de fundamentales económicos para el peso mexicano más depreciado.
El porcentaje de ponderadores de los genéricos del INPC con inflación anual arriba de 4% preocupa al alcanzar 61%. De acuerdo con el último reporte de precios de la primera quincena de marzo, si ordenamos los 283 genéricos de mayor a menor por su inflación individual de los últimos 12 meses, y luego sumamos los ponderadores de aquellos con inflación mayor a 4%, encontramos que dichos ponderadores representan el 61% del total y cada vez hay más genéricos de servicios. Dicho número ha crecido de manera importante en los últimos meses: hace un año era tan sólo el 30,25%, a la segunda quincena de junio el 30,79%, pero para fin del año pasado, antes del incremento a los precios de la gasolina y gas LP, ya había alcanzado 44,30%.
Así, no sólo es el alza de precios de las gasolinas de enero pasado que estaría presionando a la inflación este año, sino que ya se venía observando un traspaso de la inflación al productor al consumidor principalmente por la depreciación acumulada del tipo de cambio y el alza de precios internacionales de las materias primas, incluyendo energéticos.
Photo: Max Pixel / Creative Commons Zero - CC0. 12 Foreign Currency Funds in Mexico Doubled Their AUM
El alza de tasas y dólar, entre septiembre de 2016 y enero de 2017 (bonos a 10 años: 135 puntos base; cetes de 28 días: 103 puntos base; tasa objetivo: 150 puntos base; dólar: 6,30%), provocó reacomodos, minusvalías y salidas de recursos de los fondos de deuda mexicanos. El público hizo retiros precautorios para evitar minusvalías adicionales, ante su perspectiva de agudización de la volatilidad. La tenencia disminuyó en 4,81%, 72.930 millones de pesos (mdp). ¿Se esperarían más salidas?
Salida de Fondos de Moneda Nacional y Aumento en los de Moneda Extranjera
Cinco operadoras concentraron 77,8% de la reducción total: Santander, BBVA Bancomer, Impulsora, Banorte-IXE e Interacciones. En términos porcentuales, las de mayores bajas de activos fueron Monex, Interacciones, Multiva, CI Fondos y Santander. Pese a la adversidad, hubo operadoras con incremento de recursos, principalmente Franklin, Compass, Value y Sura. Se excluyen a Finamex y BNP, cuyos aumentos se explican por su origen reciente.
De 275 fondos, 177 reflejaron mermas y 98 presentaron alzas.
Los fondos de corto, mediano y largo plazos de títulos en moneda nacional redujeron sus activos en 109.460 mdp, 7,22% del valor absoluto del sector a septiembre.
Un total de 29 fondos redujo sus activos en más de 30%. En contraste, 26 fondos los aumentaron en más de 30%.
Ocho fondos disminuyeron su tenencia en más de 60%.
El reacomodo significó aumentos inusuales para una larga lista de fondos, que excluye a los nuevos y a los que cambiaron de régimen. Los activos de 12 fondos de moneda extranjera crecieron más de 100%, mientras que un solo fondo de moneda nacional aumentó en esa proporción.
Fondos de Mediano y Largo Plazos, con la Mayor Merma
Los fondos de mediano y largo plazos, en todas sus modalidades (discrecional, gubernamental, indizado, etcétera), fueron los más afectados. Sus entradas sumaron 18.070 mdp y sus salidas, 60.160 mdp, para una variación neta negativa de 42.090 mdp, 57,7% de la reducción total. Los fondos de corto plazo, por naturaleza menos vulnerables, reflejaron entradas de 46.900 mdp y salidas de 77.800 mdp, para un flujo neto negativo en 30.800 mdp, 42% de la baja total.
En algunos casos se aprecia que los recursos se trasladaron parcialmente a otros fondos de la misma operadora, independientemente de su perfil.
En BBVA, salieron 22.510mdp de BMERGOB y de BMERPZO, mientras que se recibieron 7.730 mdp para BBVADOLL y BMRGOBP.
En Santander, se redujeron 9.380 mdp de STERGOB y ST&ER-7, a la par que se obtuvieron 6.020 mdp para ST&ER-5.
En Banamex, se fueron 9.850 mdp de BNMDIN y BNMPZO e ingresaron 8.050 mdp a BNMCOB+ y BNMREAL.
En Banorte-Ixe, salieron 6.760 mdp de NTEGUB y IXEMPM+, que se compensaron con entradas de 6.850 mdp a IXEUSD, NTERTD y IXEDINT.
El único grupo de fondos con crecimiento neto (36.540 mdp, 120% sobre su valor a septiembre) fue el de instrumentos en moneda extranjera, en todas sus variantes, con predominio de la de corto plazo. El aumento subyace en el temor de que la devaluación del peso mexicano se intensifique y en la preferencia por liquidez para cambiar de mecanismo si las condiciones lo ameritan.
A decir de los mismos operadores, el flujo negativo generalizado revela que el público prefirió refugiarse en productos de sucursales bancarias, billetes y monedas extranjeras en efectivo, metales, bienes raíces, por ejemplo.
Si bien las tasas de los bonos a 10 y más años no evolucionaron en enero de 2017 como en los meses previos, los operadores advierten inquietud y calculan que los inversionistas seguirán expectantes al menos dos meses más. Por eso, algunos auguran salidas adicionales marginales y estiman que, si la volatilidad no se agudizara, los activos se estabilizarían en abril.
Foto: Casa Blanca. Del otro lado del muro: Obamacare y por qué le importa a México
El viernes, la administración de Trump no aprobó una legislación que revocaría a Obamacare. Aunque este evento en sí mismo parecería no importar directamente a México, la realidad es que podría ser un momento increíblemente importante para el año de México. ¿Bueno o malo? Déjenme explicarlo paso a paso.
La reacción inmediata a esta noticia es que el crecimiento en los EE.UU. podría ser más lento de lo que se pensaba. La revocación de Obamacare en sí misma no es el principal motor del crecimiento, pero reducir el gasto público era crucial para tener espacio fiscal para otros proyectos, incluyendo más gastos en infraestructura y, crucialmente, más espacio para reducir impuestos corporativos.
Dada la sorpresa de que esta legislación falló a pesar de haber sido trabajado por el Partido Republicano durante más de siete años, además de que el partido tiene mayoría en el Congreso, la decepción en los mercados estadounidenses de la semana pasada fue evidente.
Reacción del mercado internacional
Las bolsas en Estados Unidos cayeron casi un 1,5% en la semana, el dólar estadounidense perdió un 0,6%, mientras que los bonos estadounidenses a 5 y 10 años cayeron 7 y 9 puntos básicos, respectivamente, por una expectativa de apretamiento monetario menos agresivo. El riesgo, medido por el índice VIX, aumentó 172 puntos básicos.
Los mercados internacionales también reaccionaron con el cobre perdiendo 2% y los precios del petróleo cayendo en 1,4% en la misma semana. Dada la incertidumbre que podría prevalecer, el precio del oro también aumentó 1,2%.
Reacción del mercado mexicano
A pesar de todas estas reacciones «normales», la semana pasada el peso se apreció 1,7% mientras que el riesgo mexicano, medido por el VIMEX, cayó 41 puntos básicos. La bolsa se recuperó en 1% en la misma semana.
¿Por qué los mercados piensan que a México le va a ir mejor si Trump no puede aprobar legislación? Creo que hay dos razones. La primera es que Trump también prometió en su campaña que se implementarían otras medidas contra México. Los mercados piensan que esto ya no es tan claro. La segunda razón es que una reducción de los impuestos corporativos en los Estados Unidos habría obligado al gobierno mexicano a reaccionar de la misma manera. Dado que las finanzas públicas en México no están en su mejor forma, aunque mejorando, esto vendría como una señal de alivio.
¿Qué sigue para Trump?
Trump estará ansioso por conseguir una victoria rápida para que los mercados no tengan la impresión de que no es un «finalizador». De regreso al salón de planeación, podemos recordar que Trump había prometido tres tipos de medidas en su campaña:
Mejoras fiscales. Estas medidas dependían de la revocación de Obamacare para poder reducir impuestos. Claramente esto no sucederá en el corto plazo y, aunque algo se mueva, sería una nueva propuesta diluida.
Crear más restricciones para los visitantes musulmanes. Una prohibición temporal para los visitantes de algunos países ya está en acción, pero la Suprema Corte probablemente todavía tendrá qué decir en los próximos días. Otras medidas como un ataque frontal a ISIS o la renegociación del acuerdo iraní serían cualquier cosa menos una victoria rápida.
Medidas en las que México será el tema principal. Trump había prometido construir un muro fronterizo y que lo pagará México. También prometió devolver los trabajos de manufactura, imponer tarifas de importación a México y China, y renegociar el TLCAN.
¿Qué sigue para México?
Donald Trump buscará una victoria rápida. Sin embargo, tanto las mejorías fiscales como acciones adicionales en contra de países musulmanes no parecen ejecutables. Por ello, medidas proteccionistas contra México podrían ser su estrategia favorita y hasta única. Naturalmente, podría también ser que Trump necesitará ser más cauteloso y promover un acuerdo comercial en el que tanto México como Estados Unidos ganen, dado que el Congreso ha demostrado que pueda actuar independientemente de Trump. Sin embargo, veo riesgos asimétricos con un buen lado positivo pero un peor lado negativo.
Dado que el peso se ha apreciado considerablemente en el año, y que la bolsa se encuentra en niveles históricamente elevados, parecería una buena oportunidad para comprar seguro y acumular liquidez. Un tweet de Trump podría cambiar la perspectiva de México, mientras que mucho debe ocurrir para que el optimismo en los mercados se materialice en actividad económica.
Columna de Actinver por Enrique Covarrubias Jaramillo
Foto: Ingberrio, Flickr, Creative Commons. La CNMV adopta medidas en relación con la comercialización de CFD y otros productos especulativos entre clientes minoristas
La Comisión Nacional del Mercado de Valores hizo público el pasado 21 de marzo un documento con medidas que buscan proteger y advertir a los clientes minoristas de los riesgos y la complejidad que comporta la contratación de contratos por diferencias («CFD») y otros productos especulativos como los rolling spot foreign exchange («productos forex») y las opciones binarias.
Estas medidas son fruto de actuaciones llevadas a cabo previamente por el regulador español. En octubre de 2014, la CNMV divulgó una advertencia sobre los riesgos y la elevada probabilidad de que los clientes sufran pérdidas cuando invierten en CFD. Y, en julio de 2016, con motivo de un comunicado de ESMA sobre la operativa con CFD, opciones binarias y otros productos especulativos, la CNMV difundió una nueva advertencia sobre los riesgos que comporta la operativa con estos productos.
En este contexto, la CNMV sigue la línea trazada por algunos países de la Unión Europea que ya han desarrollado diversas iniciativas y ha puesto en marcha algunas medidas para reforzar la protección de los inversores minoristas en España cuando inviertan en CFD, productos forex u opciones binarias:
1. En cuanto a las medidas requeridas a los intermediarios que comercializan CFD o productos forex con un apalancamiento superior a diez veces o que comercialicen opciones binarias entre clientes minoristas establecidos en España, y que lo hagan fuera del ámbito del asesoramiento en materia de inversión:
a) Que adviertan expresamente a los clientes que la CNMV considera que la adquisición de estos productos no es adecuada para clientes minoristas.
b) Que los clientes sean informados sobre el coste que asumirían si decidiesen cerrar su posición nada más realizar la contratación y, en el caso de CFD y Productos forex, que sean advertidos de que debido al apalancamiento las pérdidas pueden llegar a ser superiores al importe desembolsado inicialmente.
c) Que recaben del cliente un texto manuscrito o grabación verbal que acredite que es consciente de que el producto que va a adquirir es especialmente complejo y de que la CNMV considera que no es adecuado para inversores minoristas.
d) Que los elementos publicitarios utilizados contengan siempre una advertencia sobre la dificultad para entender estos productos y sobre el hecho de que la CNMV considera que no son adecuados debido a su complejidad y riesgo.
En consecuencia, la CNMV advierte que estas entidades deberán adaptar sus procedimientos y sistemas a la mayor brevedad y en todo caso antes de un mes desde la fecha de recepción del mismo.
2. Asimismo, la CNMV se dirigirá a los supervisores de valores de otros países para que exijan la realización de las mismas advertencias y actuaciones a los intermediarios registrados en su territorio que comercializan este tipo de productos entre clientes españoles en régimen de libre prestación de servicios.
Columna de Ana García Rodríguez, socia responsable del Departamento bancario y financiero en la oficina de Madrid de Baker McKenzie.
Foto: PeterRosbjerg, Flickr, Creative Commons. La inversión pasiva gana terreno en las carteras
Durante los últimos años hemos presenciado un cambio dramático en la forma en que los inversores y ahorradores asignan su dinero en las carteras. El principal cambio radica en el paso de la inversión activa hacia la pasiva. Con una mayor eficiencia en términos de coste, la inversión pasiva proporciona la posibilidad de replicar un mercado más amplio mediante el seguimiento de índices como el S&P500 o el MSCI World.
Por ejemplo, un estudio de Morningstar ha señalado que el ratio de gastos medio de los fondos gestionados activamente en Estados Unidos se sitúa alrededor del 0,80% frente al 0,20% de los vehículos pasivos[1]. Además, la limitada rotación de las carteras, especialmente en los índices de mercados estándar ponderados por capitalización, también contribuye a que los costes de la inversión pasiva se mantengan en niveles limitados.
Más importante aún, la inversión pasiva está avanzando cada vez más hacia soluciones innovadoras basadas en índices. Los ejemplos más destacados incluyen Smart Beta, renta fija con el riesgo de tipos de interés cubierto, índices de materias primas diversificados o inversión socialmente responsable. Esta evolución implica que la construcción de carteras con una mayor diversificación, con un alcance global y con bajos costes es hoy en día más fácil que nunca. Más recientemente, los productos pasivos están siendo cada vez más utilizados como estrategias líquidas y con una estructura de costes efectiva dentro de las carteras de gestión activa, donde las características de los ETFs como productos cotizados aportan beneficios claves por su flexibilidad y diversificación.
Según las hipótesis de los mercados eficientes, los precios de mercado en equilibrio reflejan toda la información disponible y, por tanto, la inversión pasiva se convierte en un componente viable de la asignación de activos. Aunque este concepto teórico no se cumple de forma íntegra en la práctica, lo cierto es que la eficiencia del mercado ha mejorado durante las últimas décadas debido tanto a la información disponible y a los avances en los modelos de precios de los activos como a la tecnología y digitalización.
Además, numerosos estudios demuestran que la proporción de gestores activos que baten de forma consistente a sus índices de referencia está lejos de ser impactante. Por ejemplo, el estudio SPIVA dirigido por S&P a mediados de 2016 apunta a que la mayoría de los fondos activos en Europa han registrado un rendimiento inferior al de los índices de referencia relevantes en horizontes temporales largos sobre una base neta de comisiones[2].
Asimismo, la evidencia académica sugiere que es difícil identificar a los gestores que lo harán mejor de forma consistente en el futuro. Como resultado de todo esto, los inversores están incrementando cada vez más sus asignaciones hacia fondos pasivos, incluyendo los ETFs, que en Europa han alcanzado un tasa de crecimiento anual acumulado del 20% durante los últimos 10 años[3].
Pixabay CC0 Public Domain. El descenso de las rentabilidades en el mercado inmobiliario parece estar cerca de terminarse
Durante varios meses, los economistas han estado esperando un aumento de las rentabilidades a largo plazo y sus previsiones se han basado en esta premisa. Los tipos libre de riesgo europeos se dispararon con la elección de Donald Trump, haciéndose eco de la tendencia en EE.UU. Sin embargo, a pesar de ello, se mantuvieron bajos y deberían estabilizarse ligeramente por encima del 0,5% en el caso del bund y del 1% para el OAT francés a finales de año, aunque el riesgo de que Marine Le Pen sea elegida ha puesto recientemente más presión sobre el bono galo.
Durante décadas, los precios del inmobiliario comercial aumentaron impulsados en gran parte por los incrementos de los alquileres en un contexto de inflación estable. Desde la crisis financiera de 2008, la inflación ha sido débil o incluso inexistente. Pero ha remontado en los últimos meses a medida que han repuntado los precios del petróleo, aunque la inflación subyacente, que refleja el estado de las economías, se mantiene baja.
Las rentabilidades de los bonos soberanos se han estrechado significativamente desde la crisis de 2010, causando un efecto colateral que ha hecho descender los rendimientos de todas las clases de activos. Las rentabilidades del mercado inmobiliario habían tocado mínimos previamente, especialmente en Francia y Alemania. Estos son los dos grandes mercados de Europa Continental y en los últimos meses, después de la votación del Brexit, han atraído capital adicional procedente de Reino Unido. La nueva situación ha provocado un incremento fuerte y rápido de las valoraciones del mercado.
Así, el descenso de las rentabilidades en el mercado inmobiliario parece estar cerca de terminarse, especialmente a medida que los rendimientos de los bonos soberanos a largo plazo comiencen a incrementarse. Los dos catalizadores tradicionales decrecimiento de los activos del mercado inmobiliario están en un buen momento.
En nuestra opinión, el escenario más probable es el siguiente. En primer lugar, el repunte de la inflación, debido al incremento de los precios de la energía, aumentará los ingresos derivados de los alquileres. Además, mejorará el crecimiento económico en algunas zonas, principalmente en países con fundamentales sólidos. Aunque esta actividad dependerá de los resultados de las elecciones en Francia y Alemania.
Asimismo, el progresivo aumento de las rentabilidades de los bonos soberanos a largo plazo, desencadenará un incremento de los retornos en el mercado inmobiliario. Esta recuperación tendrá un decalaje, por ejemplo hasta 2018. De hecho, es probable que los rendimientos del mercado inmobiliario continúen reduciéndose en 2017, ya que todavía hay mucha liquidez en el mercado, pero el ritmo de descenso será más lento que en los últimos años. En este momento, estamos descartando un alza significativa de las rentabilidades debido a la política monetaria expansiva del BCE.
Con este contexto, nuestra política de inversión es muy activa y estamos reposicionando nuestras carteras para adaptarnos a los rápidos cambios del mercado, aunque las rentabilidades se mantienen bajas.
Preferimos productos más líquidos (oficinas y espacios retail de alta calidad) en áreas con potencial de mejora. Además, nos centramos en grandes propiedades con múltiples inquilinos (para asegurar los beneficios a través de la diversificación) y que estén adaptados a los nuevos requerimientos de las compañías. Y también identificamos regiones que cuentan con un gobierno más activo y que pueden tener una evolución más ambiciosa.
También continuamos diversificando los sectores, tratando de anticiparnos a las principales tendencias del mercado para capturar los ingresos procedentes de ciclos largos que están menos expuestos a los cambios del entorno macroeconómico y para asegurar un flujo de caja a largo plazo que reduzca el riesgo.
Por último, apostamos por mercados desarrollados que cuenten con potencial alcista. En Reino Unido, pese a la incertidumbre del Brexit, el mercado debería volver a ser atractivo. En Alemania, las condiciones económicas alcistas deberían continuar impulsando las rentas y las bajas rentabilidades. En Francia, por su parte, también esperamos que repunten las rentas a medio plazo gracias al sólido crecimiento. Por último, también tomamos posiciones en distritos centrales de otros países europeos, como en los Países Bajos.
Columna de Cécile Blanchard, directora de Análisis del Mercado Inmobiliario de La Française.