Pixabay CC0 Public Domain. ODDO BHF y Landolt & Cie culminan su proceso de fusión
ODDO BHF y Landolt & Cie concluyen su fusión. Según indica la firma, la adquisición de Landolt & Cie por parte de ODDO BHF ha sido respaldada por la aprobación de la agencia suiza de supervisión de mercados financieros (FINMA).
La fusión entre Landolt & Cie, el banco más antiguo de la Suiza francófona, con sede en Lausana y Ginebra, y ODDO BHF, activo principalmente en Zúrich, convertirá Suiza en el tercer mercado estratégico de ODDO BHF después de Francia y Alemania.
Según explican desde la entidad, esta fusión permitirá a los clientes de Landolt & Cie beneficiarse de una amplia oferta de servicios de family office e ingeniería financiera, además de los actuales servicios de gestión de carteras, junto con la experiencia en gestión de activos del grupo ODDO BHF, en la que el enfoque ESG desempeña un papel fundamental, y una oferta de gestión de inversiones alternativas (private equity, deuda privada, venture capital).
Además, indican que la operación beneficiará también a los clientes del grupo ODDO BHF, ya que podrán acceder a las oportunidades de inversión que ofrece Suiza, que, al igual que Alemania, cuenta con un gran número de empresas familiares y un denso tejido industrial (en particular en los ámbitos de la salud, la alimentación, la relojería y los servicios en general) y atraer talento de las principales escuelas y universidades.
El grupo tiene previsto fusionar el banco de ODDO BHF en Zurich con el banco Landolt & Cie a finales de año con el objetivo de convertirlo en la plataforma de desarrollo de toda la gama de servicios del grupo en Suiza.
Por último, la firma señala que Pierre Landolt y Thierry Lombard se convierten en accionistas de ODDO BHF y Thierry Lombard se une al consejo de supervisión del Grupo.
Joe Biden se convirtió este miércoles en el presidente número 46 de Estados Unidos en una ceremonia con medidas extremas de seguridad luego de que el pasado 6 de enero un grupo de manifestantes atacaran al Capitolio alegando un supuesto fraude en las elecciones.
En este contexto, Biden prometió gobernar para solucionar las brechas ideológicas que han dejado heridas abiertas en el país. Por otro lado, el mismo día de su investidura firmó decretos con el fin de atacar el avance de casos positivos de coronavirus en el país.
Por otro lado, el nuevo presidente tendrá que articular su gobierno con un parlamento parcialmente dividido. Si bien el Partido Demócrata tiene mayoría en ambas cámaras, Biden deberá buscar un equilibrio a la hora de legislar para que los políticos más conservadores de su fuerza voten a favor de sus iniciativas, dice un análisis de Randeep Somel, Fund Manager del equipo de Equity de M&G.
“Su margen en ambas cámaras es muy pequeño y puede ser descarrilado por un solo demócrata conservador en el Senado. Por lo tanto, no debemos esperar cambios radicales en ninguna dirección. Cualquier nueva legislación será cuidadosamente pensada y equilibrada”, asegura el experto.
Por otra parte, Somel explicó que Biden entiende que la gestión del virus será muy importante para el éxito de su mandato y, por esa razón, ha anunciado que tiene como objetivo proporcionar 100 millones de vacunas en sus primeros 100 días.
Además, la segunda parte de la respuesta serán las continuas medidas económicas que el gobierno federal tome para apoyar la economía hasta que la pandemia haya pasado. La administración entrante ha propuesto un paquete económico adicional de 1.9 billones de dólares para ayudar al despliegue de vacunas, apoyo del gobierno local y un cheque de 1.400 dólares como apoyo personal a los individuos.
Para el técnico de M&G, “solo cuando se hayan tomado estas medidas inmediatas, el nuevo gobierno podrá buscar promulgar partes de su agenda más amplia, que incluyen la reducción de la desigualdad y la lucha contra el cambio climático”.
Por otro lado, Matthew Benkendorf, CIO de Quality Growth, Boutique de Vontobel Asset Management, aseguró que el cambio de administración en EE.UU. suele tener poco impacto en el mercado a largo plazo.
“El mercado anhela estabilidad y transparencia. Como un mecanismo de subasta eficiente que es, se basa en la visibilidad de los precios de las acciones y la actividad económica. Por lo general, al mercado -y a la gente- no le gustan los movimientos, pero esta vez, al hallarnos en el umbral de un tremendo cambio, lo que estamos viendo es en realidad un posible retorno a la estabilidad, la normalidad y la transparencia reales”, dijo Benkendorf.
Según el experto, los modelos de políticas que se pueden esperar no son radicalmente diferentes de los vistos históricamente. Sin embargo, es probable que el crecimiento de los beneficios de las empresas, el factor que ayuda a impulsar la rentabilidad de la renta variable, se vea reforzado a corto plazo si se aprueba un nuevo estímulo fiscal.
En este sentido, existe una importante dicotomía en Estados Unidos; parece que muchas grandes empresas que cotizan en bolsa están funcionando bien y, en cierto modo, muy bien, mientras que las pequeñas y medianas que generan el grueso del empleo del país, han de luchar día a día.
Otra visión es cómo la nueva situación política de EE.UU. generó expectativa en los inversores, analizó el equipo de Portcolom AV. “Una transición de poderes que se ha visto envuelta en una realidad que poco o nada tienen que ver con lo que se espera de la primera potencia mundial y que cuenta con un sistema democrático tan arraigado. No hay duda que la agenda política se ha convertido en el gran protagonista de las últimas semanas, desplazando de la escena de los mercados financieros al papel desarrollado por el nuevo repunte de los contagios de Covid 19 en el hemisferio norte”, dice el comunicado divulgado por la compañía.
La Administración Trump en sus últimos días dejó su huella con nuevos obstáculos en la relación con China, aumentando las prohibiciones para la relación comercial con determinadas empresas. Mientras tanto, el principal competidor de EE.UU. por la hegemonía mundial hace alarde de su recuperación tanto sanitaria como económica.
“Aunque las cifras procedentes de China siempre hay que tomarlas con precaución, lo cierto es que su economía se ha convertido en la única economía de referencia con tasas positivas de crecimiento en 2020, y según las cifras oficiales con unas tasas de crecimiento en el cuarto trimestre del 2020 superiores a las que registraba su economía antes del estallido de la crisis del Covid 19”, comenta Portcolom.
HSBC Global Asset Management ha listado en el SIC y por medio de la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) a su ETF HSBC MSCI China UCITS, conclave “HMCDN MM”.
Con este instrumento, ya disponible en el mercado, HSBC ofrece a los inversionistas mexicanos «un acceso fácil y rápido a empresas de mediana y gran capitalización en China, abriendo así un excelente bloque de construcción para las carteras de los inversionistas nacionales».
El ETF, con un TER de 0,30%, replica el rendimiento del índice MSCI China, al tiempo que busca minimizar la diferencia entre el desempeño del índice y del fondo.
“La relevancia de China en la economía mundial continua creciendo y hemos reducido a la mitad la comisión de gestión de nuestro HSBC MSCI China UCITS ETF para facilitar aún más la participación de los inversionistas en esta historia de crecimiento económico tan importante”, aseguró Olga de Tapia, directora de Ventas de ETFs de HSBC Global Asset Management.
Para María Ariza, directora general de BIVA, el listado de este ETF de HSBC representa un paso más en su objetivo de fortalecer la oferta de productos y servicios de alto impacto para el público inversionista mexicano. “El listado de este ETF es una muestra clara del esfuerzo constante de BIVA por seguir innovando en el sector bursátil, mediante la atracción de opciones nuevas con la finalidad de que los inversionistas puedan cumplir sus objetivos. Estamos muy contentos porque este ETF, comandado por HSBC, amplía la oferta de ETFs de BIVA, ahora hacia China, uno de los mayores mercados del mundo”.
Pixabay CC0 Public Domain. Regreso a un nuevo futuro: los escenarios de NN IP de cara a 2021
Las condiciones cambiaron irrevocablemente en 2020. Los gobiernos y las empresas acumularon deuda, los tipos de interés cayeron y los bancos centrales se volvieron más indulgentes con respecto a la inflación. Además, un nuevo presidente puede poner fin a un capítulo populista en la historia de Estados Unidos. Según NN Investment Partners, la economía mundial, el panorama político y los mercados regresarán a un futuro diferente.
En su informe de perspectivas para 2021 «Back to a new future», la gestora presenta tres escenarios potenciales. El primero es su caso base, llamado «control de crucero», en el cual los gobiernos y los bancos centrales ponen a la economía mundial en una senda de recuperación, que se ve impulsada a su vez por los efectos positivos de la vacuna contra el coronavirus, sobre todo en la segunda mitad del año. Además, las empresas con dificultades logran gestionar el cambio de rumbo de una corta pero profunda recesión.
También plantea dos escenarios alternativos: «a toda máquina», que contempla una recuperación mundial espectacular gracias al gran impulso proporcionado por la vacuna y las políticas; y el más negativo: «motor en ralentí», en el que la persistente pandemia del COVID-19 causa un daño económico duradero y las expectativas puestas en la vacuna y la recuperación de las empresas no se materializan.
Economía global: hacia la luz al final del túnel
«2021 se dividirá en dos partes. El combate económico contra el COVID-19 dominará la primera; luego será el momento de decidir las mejores nuevas ideas para un mundo post-coronavirus», señala NN IP. En su escenario de «control de crucero», pronostica una fuerte recuperación del crecimiento global este año, en línea con las previsiones de consenso de que la economía mundial se habrá contraído un 3,8% en 2020 y se recuperará en 2021 con un crecimiento del 5,2%.
Renta fija: más que un ciclo económico
En su opinión, los mercados de renta fija podrían registrar una tendencia más pronunciada y ascendente de una inflación que se encuentra en punto muerto. «La oferta neta de bonos en los países más grandes de la zona euro, ajustada por las compras del BCE, será claramente negativa; las necesidades de préstamo de Estados Unidos dependerán del grado de estímulo fiscal», apunta.
En cuanto al crédito, considera que las oportunidades más atractivas para 2021 se encuentran en los emisores cuyos diferenciales se ampliaron significativamente en 2020, pero que aún tienen suficiente liquidez para financiar las operaciones. Asimismo, el crédito alternativo podría ofrecer a los inversores una vía adicional para mejorar los rendimientos y reforzar su compromiso con la ESG.
Renta variable: «V» de vacuna y de la forma de la recuperación
La gestora subraya que el despliegue de la vacuna y la política económica serán los principales impulsores de la renta variable en 2021. En ese sentido, espera retornos positivos, pero sus preferencias dependerán del escenario que se presente. «La orientación de la política de los bancos centrales es un buen augurio para los rendimientos esperados, y los de dos dígitos son una posibilidad real», señala.
En los escenarios de «control de crucero» y «aceleración total», las perspectivas son mejores para los mercados no estadounidenses y para los sectores cíclicos. Mientras, el de «motor al ralentí» podría implicar un regreso parcial al sector relativo de 2020 y a los rendimientos regionales.
Mercados emergentes: preparados para la recuperación
Para 2021, la previsión de NN IP es que continúe la recuperación en las economías emergentes que comenzó en el tercer trimestre, llevando el crecimiento promedio al 7%. Este será diferente entre los distintos países, dependiendo de su estructura económica y de la eficacia de sus programas de vacunación, pero, en general, las perspectivas deberían ser favorables para la renta variable emergente.
«A medida que el comercio mundial y los precios de las materias primas aumentan, las acciones de los mercados emergentes tienen incluso una buena oportunidad de superar a las de los desarrollados. Los inversores en deuda emergente deberían buscar oportunidades a nivel de país, y también pueden explotar las diferencias entre las diversas clases de subactivos en el espacio emergente«, afirma.
Materias primas: aumentar la exposición cíclica
Por otro lado, la gestora se muestra constructiva sobre las materias primas. En su opinión, es probable que la demanda se recupere en 2021, principalmente en la segunda mitad del año. Las políticas fiscales expansivas apuntalarán esta recuperación y, al mismo tiempo, su sesgo «verde» limitará la oferta, al disminuir el capex del petróleo y restringir actividades como el fracking y la producción de aluminio.
La inversión responsable en el centro
Los factores medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG) desempeñarán un papel más definido en las decisiones de asignación de activos este año. «Los principales inversores en ESG comenzarán a diferenciarse utilizando análisis propios para lograr mejores resultados para sus clientes», subraya.
Con todo, NN IP cree que Europa será líder mundial en finanzas sostenibles en 2021 y los efectos indirectos se sentirán en todo el mundo desarrollado. Asimismo, la renta fija comenzará a ponerse al nivel de la renta variable a medida que la emisión de bonos verdes se incremente.
Pixabay CC0 Public Domain. España necesita el impulso de las reformas para salir de una crisis sin precedentes
La subida del precio de la vivienda en toda Europa ha regresado a su tendencia a largo plazo, incluso en los países que experimentaron desaceleraciones o rebajas al principio de la pandemia, como Reino Unido o Suecia. El aumento en algunos países es más fuerte que nunca, a pesar de los confinamientos y el aumento del desempleo.
La pandemia podría acelerar aún más la subida, o posponer una corrección, ya que para los consumidores de altos ingresos en el tramo de edad de 25 a 65 años, la adquisición de vivienda sigue siendo asequible. La gravedad y la duración de la pandemia, en particular su impacto en las quiebras empresariales y el desempleo, determinarán la evolución de los precios de la vivienda en Europa en 2021.
En el tercer trimestre de 2020, la subida de los precios de la vivienda en Europa fue, en promedio, del 1,75%. Esto se compara con el crecimiento del 0,63% del segundo trimestre. En cómputo global, la subida promedio del 1,4% para los nueve primeros meses de 2020 es el doble del incremento promedio de la última década.
Mapa del calentamiento del precio de la vivienda en Europa (crecimiento trimestral frente a la media de 10 años)
«Los precios de la vivienda parecen ser inmunes a la pandemia a pesar de la extrema tensión económica a la que se enfrenta la economía europea», indica Mathias Pleissner, director del equipo de bonos cubiertos de Scope. «La demanda de viviendas está impulsada principalmente por los extremadamente bajos tipos de interés, pero la pandemia puede haberla intensificado. No sólo porque la gente considera más interesante poseer una propiedad en estos momentos en los que el teletrabajo se ha hecho necesario, sino también porque la vivienda puede haberse vuelto más asequible, dado que los ahorros se han disparado».
Una vez que las tasas de vacunación y la inmunidad de rebaño permitan una nueva normalidad, es probable que veamos un prolongado aumento del gasto en la última parte del año. Esto probablemente se centrará de forma inicial en las áreas más afectadas por la pandemia, como los bienes de consumo y los viajes.
«Una vez que se hayan satisfecho esas necesidades, creemos que les seguirá la inversión inmobiliaria, en particular entre las personas de 25 a 65 años con ingresos superiores a la media, que hayan podido aumentar sus ahorros y estén menos expuestas a la pérdida de ingresos relacionada con la pandemia», dijo Karlo Fuchs, responsable de bonos cubiertos de Scope. «Para estas personas, lo más probable es que los ahorros adicionales se utilicen para la adquisición de bienes».
Tasa de ahorro e inversión de la UE
En última instancia, los precios de las viviendas se verán impulsados por las condiciones económicas subyacentes. Si bien es posible que los efectos directos de la pandemia sólo tengan impacto a corto plazo en los precios de la vivienda, los efectos indirectos pueden alterar los precios a más largo plazo. «Si la economía mundial sufre más y durante más tiempo de lo esperado, esto se reflejarán en los mercados nacionales de vivienda», avisa Pleissner. «A diferencia de los efectos a corto plazo, esto también repercutirá en el segmento de edad de altos ingresos de entre 25 y 65 años, que tal vez no pueda acumular activos durante una recesión duradera».
Los precios de la vivienda se verán fuertemente influenciados por el aumento del desempleo, probablemente impulsado por el aumento de las quiebras en el segmento de las PYMES. En nuestro escenario base, esperamos que el desempleo aumente en un 0,9% en 2020 hasta el 8,5% y hasta el 9,4% en 2021. «El aumento de las insolvencias puede convertir las moratorias actuales en provisiones para los bancos y provocar una contracción del crédito, lo que en última instancia también afectará a los compradores de viviendas y, por lo tanto, influirá en la evolución futura de los precios de la vivienda», advierte Fuchs.
De izquierda a derecha y arriba a abajo, Tania Salvat, Gabriela Guerrero y Alejandro Santelices. Fotos: LinkedIn. blakrock
Cambios en los cargos de algunos profesionales de BlackRock, una de las mayores gestoras del mundo, en España. En las últimas semanas, Tania Salvat ha asumido el cargo de Directora, Gabriela Guerrero Maldonado el de Vice President y Alejandro Santelices Vitoria el de Associate.
Así, Tania Salvat, que lleva más de cinco años y medio en la gestora, ha cambiado su cargo al de Director. Anteriormente, tenía el cargo de Vice President en la entidad. Salvat trabajó anteriormente en Banco Alcalá, donde fue gestora de sicavs y carteras durante más de dos años, y también trabajó en Bankia Banca Privada Gestión, también como gestora de carteras, durante más de seis años, según su perfil de LinkedIn.
Gabriela Guerrero Maldonado, MFIA es ahora Vice President en BlackRock, donde lleva trabajando casi ocho años. Anteriormente fue asociada de Ventas, y antes, analista en la gestora. Antes de entrar en BlackRock, cursó una beca en Banco Espirito Santo New York.
Según su perfil de LinkedIn, es licenciada en Negocio Internacional por EBS-European Business School Madrid, cuenta con el Master en mercados financieros y gestión alternativa MFIA por BME y tiene otras titulaciones en finanzas y negocios internacionales y Business Management por centros como el Berkeley College NY o el EBS-European Business School de París y Madrid.
Alejandro Santelices Vitoria es ahora Associate en BlackRock, donde lleva trabajando más de dos años, antes con el cargo de Wealth Sales Analyst para Iberia. Según su perfil de LinkedIn, anteriormente trabajó en la empresa de asesoramiento financiero Aspain 11 Asesores Financieros, en el departamento de análisis e inversiones -como responsable de la selección de activos del catálogo de productos de la EAF orientados a la confección de carteras modelo (selección y análisis de fondos, ETFs, acciones, bonos y planes de pensiones), además del asesoramiento de una sicav y dos fondos de inversión asesorados Aspain 11- y en el departamento de Grandes Patrimonios, elaborando propuestas de inversión, reporting de carteras, seguimiento de posiciones y mantenimiento de clientes, entre otras labores.
Tiene un Máster en Gestión de Carteras por Afi Escuela de Finanzas, un máster en Banca y Finanzas por el IEB y un grado en Economía por la Universidad de Cantabria.
Pixabay CC0 Public Domain. JP Morgan se enfrenta a 2021 apostando por activos de riesgo
Si el año 2020 fue el año de la crisis, 2021 será el de la recuperación. Así lo ha defendido Lucía Gutiérrez Mellado, directora de estrategia para España y Portugal de JP Morgan AM. “En este escenario, nuestra visión es moderadamente constructiva, no descartamos curvas, pero habrá crecimiento económico, no vemos presiones inflacionistas y apostamos por activos de riesgo”, ha señalado en un encuentro con la prensa.
En renta variable consideran que este año sí se materializará el crecimiento de los beneficios, lo que ayudará a las valoraciones. Ahora mismo, la firma tiene exposición en renta variable a Estados Unidos, Europa y mercados emergentes, apostando por la diversificación.
En renta fija, debido a subida de la TIR a 10 años en Estados Unidos, han comprado algo más de duración, ya que, según ha señalado Mellado, “nos paga algo más y nos parece que, en este escenario, nos ofrece un colchón en caso de volatilidad y corrección en los mercados”. Asimismo, continúan apostando por deuda corporativa, tanto en la parte de investment grade como de high yield.
Una recuperación desigual
Sin embargo, aunque sus predicciones para el año sean optimistas, la experta recuerda que la primera parte de 2021 se parecerá bastante a la última de 2020 y las recuperaciones tendrán distintas velocidades. “La pandemia y los rebrotes siguen aumentando con medidas de distanciamiento social y esto tendrá un impacto en el crecimiento, viendo datos muy discretos o incluso negativos para este trimestre”, ha señalado.
Para la segunda mitad de 2021 espera que, a medida que avance la vacunación, se relajen las medidas de distanciamiento y se recupere la actividad. “Estimamos que en la última parte del año veremos un repunte del crecimiento muy fuerte, en torno al 5%, si se cumple seria el más fuerte de las dos últimas décadas, pero no llegaríamos a niveles previos a la pandemia”, advierte.
Según resume la experta, «la visión es moderadamente constructiva con una primera parte del año más débil y luego una recuperación, que se caracterizará por las diferencias a nivel sectorial y geográficas”. Estas diferencias se hacen visibles si comparamos la rápida recuperación de China en forma de “V”, con una recuperación más lenta en Estados Unidos y Europa.
Respecto al gigante asiático, la experta cree que este año seguirá haciéndolo bien, pero espera cambios en cuanto a quién liderará el crecimiento. “El año pasado fue el gobierno y ahora esperamos que lidere el sector privado”, señala.
En cuanto a Europa, Mellado advierte de las diferencias que habrá entre las regiones y lo desigual que será el ritmo de recuperación de cada país. “Hasta que la vacuna no sea una realidad a las regiones más afectadas les costará ir cogiendo el ritmo de crecimiento de otras que no están tan expuestas”.
Por último, la directora de estrategia ha valorado la evolución de Estados Unidos y considera que su recuperación es más sólida que la de Europa. “Nunca han tenido controlada la pandemia y han permitido la movilidad, pero han sido muy contundentes con las medidas de estímulo. La buena noticia es que el que el consumidor está dispuesto a consumir y el repunte está siendo fuerte”.
Un entorno relajado en la política fiscal y monetaria
Respecto a la política fiscal y monetaria, la experta cree que es probable quese anuncie alguna medida fiscal adicional, pero considera que todas ya se han anunciado y espera un entorno relajado. “No esperamos paquetes de medidas como los que vimos en 2020”, señala. Sin embargo, en este caso, las medidas también serán desiguales según las regiones.
En el caso de China, Mellado cree que es probable que de forma gradual retiren medidas de estímulo y frenen el acceso al crédito. En cuanto a política monetaria, desde la firma esperan que dejarán los tipos bastante planos.
Por otro lado, en Europa, los expertos de JP Morgan AM creen que el BCE estará mirando de cerca la evolución de la economía y que si hay que extender planes en tamaño y tiempo lo harán. En Estados Unidos “el gran debate gira en torno a política fiscal, que Biden tenga el control del Congreso y Senado va a facilitar que salga un plan de política fiscal”, señala Mellado.
En cuanto a la inflación, la experta ha señalado que en el corto y medio plazo no esperan presiones inflacionistas.
La pandemia, las tensiones comerciales y la retirada de estímulos: los riesgos de 2021
El riesgo que en JP Morgan siguen más de cerca es la evolución de la pandemia, seguido del riesgo de que los bancos centrales retiren estímulos de forma prematura. “Aunque es un riesgo latente, creemos que si los retiran sería de forma gradual para que el mercado lo empiece a descontar”. El último riesgo que contempla la firma es el de las tensiones comerciales, el cual seguirá latente en el nuevo año.
Foto cedidaLa directora global de análisis de Amundi, Monica Defend. Value cíclico de calidad, mercados emergentes y la "S" de la ESG protagonizarán los mercados en 2021, según Amundi
El camino de vuelta hacia una economía a niveles pre-crisis va a ser largo y desigual, pero las noticias de la vacuna hacen esperar que, sobre todo en la segunda mitad del año, el impacto del coronavirus sea desplazado por el esperado crecimiento. Amundi pronostica que este se verá impulsado por la rotación hacia cíclicos value de calidad y la recuperación de los países emergentes, donde ve buenas oportunidades de inversión, especialmente en algunos países de Asia. Además, subraya que el creciente interés de los inversores por la dimensión social de la ESG permitirá luchar contra la desigualdad, que se ha visto exacerbada por la pandemia.
Hasta que las vacunas no empiecen a surtir efecto, los confinamientos se mantendrán en todo el mundo, prolongando la coyuntura actual de bajo crecimiento y mínima inflación, así como las políticas monetarias y fiscales dirigidas a apoyar la economía y los mercados. En el evento de perspectivas de Amundi para 2021, la directora global de análisis, Monica Defend, apuntó que existen oportunidades en las rotaciones del mercado generadas por lo que va a ser una recuperación «a diferentes velocidades», por lo que habrá que ser muy selectivos.
«Los países asiáticos van a ser los protagonistas, convirtiéndose en un importante motor del crecimiento global. Además, sus divisas deberían ganar momentum frente al dólar estadounidense», afirmó. Esto se debe también al impacto de la pandemia, que ha provocado que estas regiones hayan reducido su dependencia del comercio global y apostado por la demanda interna. Por ello, recomendó incrementar la diversificación en las carteras para aprovechar las oportunidades.
Mientras, reveló que uno de los riesgos que más les preocupan es la vulnerabilidad del sector corporativo, especialmente de aquellas empresas que se han visto muy impactadas por la pandemia y cuyos fundamentales seguirán deteriorándose en 2021. A esto se une el encarecimiento de algunos sectores, que ha generado el comienzo de una burbuja tecnológica que es importante vigilar de cerca. «Por eso, lo mejor es mantener el equilibrio y centrarse en los balances de las empresas en cartera», recomendó.
Asimismo, hizo hincapié en la necesidad de que los inversores mantengan la liquidez en sus carteras para poder hacer frente a posibles disrupciones; y advirtió del riesgo que pueden suponer los tipos de interés y la inflación -ambos a niveles muy bajos- a más largo plazo.
Teniendo esto en cuenta, el CIO de Amundi, Pascal Blanqué, apuntó que hay ciertas tendencias marcando ese camino hacia la recuperación. Una de ellas es la rotación hacia el value cíclico de calidad. Dentro de la renta variable, la gestora apuesta por aquellas temáticas que se benefician de un entorno post-COVID-19, como la salud, la telemedicina, el comercio electrónico o la ciberseguridad. En su opinión, lo ideal es centrarse en la calidad y en retomar la diversificación geográfica, teniendo también en cuenta que aquellos valores caros no van a hacer otra cosa que encarecerse más.
«En renta fija, la clave es gestionar la rentabilidad versus la calidad versus la liquidez. La liquidez es tu amiga y no un impedimento para obtener rendimientos», afirmó. Asimismo, a nivel de composición de cartera, destacó los bonos emergentes o los activos reales para la generación de rentas a largo plazo.
La «S» toma la ESG
Desde que la ESG empezó a tener un impacto financiero real, hacia 2014, el componente social ha tendido a quedarse por detrás del medioambiental y el de gobernanza. Sin embargo, desde 2018, ha ido ganando terreno y, con el impacto de la pandemia y el consiguiente aumento de la desigualdad el pasado año, la conciencia de los inversores hacia esta dimensión social ha repuntado de forma evidente.
Según la directora de inversión responsable de Amundi, Elodie Laugel, el vínculo entre las problemáticas sociales y el mundo económico-financiero es directo: «Reducen la resistencia de los países, generan políticas proteccionistas, suponen un obstáculo para el crecimiento y amenazan la estabilidad del sistema financiero, por lo que sus implicaciones macroeconómicas están bastante claras». Además, a nivel corporativo, los aspectos sociales influyen en las valoraciones de los activos y la productividad de determinadas empresas, aseguró.
Por ello, en su opinión, lo primero que deben hacer los gestores de activos es priorizar esa dimensión social en sus políticas de «engagement» con las empresas en las que invierten e integrarla de forma clara en su proceso de inversión. «Así pueden analizar cómo están distribuyendo valor las compañías, qué políticas de diversidad implementan y cómo contribuyen a las finanzas públicas de los países en los que operan», subrayó.
Además, para los inversores más enfocados a la ESG, destacó la existencia de los bonos sociales, con los que directamente se financian empresas que contribuyen a proyectos que fomentan el empleo, la salud o la educación, entre otros. «Incluso pueden contribuir a la resolución de la crisis provocada por la pandemia con estas inversiones», dijo antes de señalar que, por ello, en 2020, hubo un incremento de 140.000 millones de dólares en emisiones de bonos sociales.
Todo ello refleja que se trata de un mercado pequeño, «pero en auge» y, que, a juicio de Laugel, permite también mitigar el impacto de las problemáticas sociales en la cartera e implementar una nueva forma de construir «resiliencia» para el crecimiento económico.
Pixabay CC0 Public Domain. Allianz Europe Equity Growth: la calidad como clave para lograr la cartera de renta variable más apropiada para 2021
En opinión de los gestores de Allianz GI Thorsten Winkelmann, CIO Global Growth y Co-Lead PM, y Robert Hofmann, CFA, Co-Lead PM, ha llegado el momento de abordar las oportunidades que ofrecen las empresas con un crecimiento de los beneficios y un flujo de caja estructuralmente superiores a la media. Para lograrlo, ¿qué hay que tener en cuenta?
Hemos empezado el año escuchando a las gestoras reflexionar y debatir sobre si 2021 supondrá la vuelta del value o seguirá dominando en growth. Los gestores de Allianz GI, basándose en su experiencia al frente del conjunto de fondos Allianz Europe Equity Growth, defienden que las compañías growth pueden proporcionar altos rendimientos de inversión de forma continuada. El equipo especializado en crecimiento se esfuerza por seleccionar empresas con ventajas competitivas y grandes barreras de entrada, que están en condiciones de generar a largo plazo sus excelentes rentabilidades.
“El tema central del rendimiento de 2020 fue la pandemia, que aceleró las compañías de nuestros casos de inversión. Con nuestro foco puesto en el stock picking de acciones con crecimiento altamente visible, mirando siempre a un horizonte de 3 a 5 años, como forma de identificar la senda del crecimiento estructural, creemos que llevará a las compañías de nuestra cartera a estar muy por delante del mercado. El aumento de la digitalización durante 2020, el consumo online y otros cambios estructurales han cumplido muchas de nuestras expectativas a medio plazo antes de tiempo”, explican Winkelmann y Hofmann.
Según explican, para invertir en crecimiento estructural, el conjunto de fondos Allianz Europe Equity Growth aplica un enfoque disciplinado y a largo plazo, buscando, más allá de factores macroeconómicos y de la volatilidad de mercado, empresas que crezcan con independencia de su entorno. La estrategia posee un historial estable de outperformance en muchos de los fondos incluidos en el conjunto. Mantener una baja rotación de cartera significa que la selección de acciones es clave, poniéndose especial atención en el crecimiento, la calidad y la valoración. En este sentido, su cartera está formada por entre 30 y 40 acciones en total, entre las que encontramos nombres como Zalando, Ambu, DSV, Adidas (de reciente incorporación), Infineon, L’Oreal y ASML Holding, entre otras.
Los gestores reconocen que, gracias a su proceso de inversión, que sigue el modelo bottom up, casi no han realizado cambios en su cartera desde marzo de 2020, logrando un fuerte rendimiento del 15,1% el último año y superando el resultado negativo del índice MSCI Europa. “El fuerte rendimiento obtenido en comparación con nuestro estilo de referencia ayuda a explicar lo que queremos decir con aplicar un enfoque growth más puro: hacer más hincapié en las empresas de alta calidad (fuertes equipos de gestión, balances y una lista de factores más suaves que aíslan su crecimiento), así como en los motores estructurales, lo que generará una mayor resistencia”, explican los gestores de Allianz GI.
De cara a este año, Winkelmann y Hofmann reconocen que hay diversos aspectos a vigilar (el arranque de la presidencia Biden, el acuerdo del Brexit, la falta de demanda por parte de los consumidores y un horizonte de tipos bajos, entre otros aspectos), pero su principal preocupación es que, a medida que avanza la recuperación, los precios de las acciones se desconecten de los fundamentales de sus compañías. “Somos conscientes de que los precios de las acciones alimentados por la esperanza pueden desconectarse de los fundamentos de los negocios a corto plazo, pero en general sentimos que los ganadores sólo se han vuelto más fuertes y más competitivos para su camino por delante”, concluyen.
Pixabay CC0 Public Domain. La pandemia, el Brexit, la inflación, el euro y las medidas de apoyo: la larga lista de temas que le esperan al BCE
El año ha arrancado y con ello la agenda de reuniones de los bancos centrales, empezando con la del Banco Central Europeo (BCE) este jueves. Según las principales valoraciones de las gestoras, la reunión de su Consejo de Gobierno traerá pocas novedades. En principio, la entidad monetaria mantendrá los tipos al mismo nivel y no hará cambios significativos en sus programas de compras, tras lo anunciado en diciembre de 2020.
Está será una reunión muy diferente a la última de 2020, pero igualmente interesante dado el reto que tiene Europa frente al coronavirus y a su potencial recuperación económica. En opinión de Paul Diggle, economista senior de Aberdeen Standard Investments, lo interesante puede estar en la posterior rueda de prensa. “Esperamos que la rueda de prensa se centre en el impacto económico de la reanudación de los confinamientos en toda Europa, el despliegue de vacunas, el acuerdo Brexit, y cómo el estímulo fiscal adicional en EE.UU. afecta a las perspectivas europeas. Los inversores querrán escuchar lo que el BCE podría hacer si las condiciones económicas siguen deteriorándose, y se mostrarán temerosos si el BCE habla de la eventual retirada del apoyo”, explica Diggle.
El economista senior de la gestora considera que la economía de la Eurozona se dirige hacia una doble recesión, y a largo plazo, la inflación va a permanecer muy moderada. “Así que no deberíamos descartar completamente que el BCE suavice aún más la política monetaria. Su primera línea de defensa sería acelerar el ritmo de las compras de QE, y luego expandir el programa y aumentar la cantidad de préstamos bancarios baratos que ofrece. Es poco probable que esto se produzca tan pronto como esta semana”, advierte.
Aborde o no este tema durante la reunión del jueves, como recuerda Gilles Moëc, economista jefe de AXA Investment Managers, los inversores están esperando que la institución monetaria europea haga lo necesario para mantener las condiciones financieras sin cambios, incluso ante una mejora en las perspectivas de inflación. Él en cambio, sí lo ve probable: “Esperamos que Christine Lagarde comente esas líneas después de la reunión del BCE de esta semana, en la que no se espera una decisión ni un mensaje contundente. La estrategia para el 2021 se configuró el mes pasado. La verdadera prueba de fuego llegará más tarde, una vez que la economía se haya estado normalizando durante varios meses, cuando el BCE tendrá que decidir cómo amortiguar el impacto en el mercado de la eliminación del PEPP”, afirma Moëc.
Para Peter Allen Goves, analista de renta fija de MFS Investment Management, las áreas de interés para el “Q&A” seguramente incluyan la revisión de la estrategia, la necesidad de mantener “condiciones de financiación favorables” y cómo el BCE sigue controlando el tipo de cambio del euro. Justamente sobre la divisa europea, François Rimeu, estratega senior de La Française AM, explica que «la reciente caída del euro frente al dólar estadounidense disminuye la presión sobre el BCE para que comente los movimientos de los tipos de cambio. Aun así, después de la apreciación del euro del año pasado, pueden reiterar que continuarán vigilando la evolución del tipo de cambio».
Como se puede observar, la lista de temas sobre la que los inversores y el mercado esperan escuchar la visión del BCE en este inicio de año es larga. A ella, Franck Dixmier, director de inversiones global de renta fija de Allianz Global Investors, añade un par más: un mensaje de confianza y un mensaje sobre las políticas fiscales. “El BCE debería reiterar su capacidad de ajustar todas sus herramientas para lograr su objetivo: garantizar unas condiciones de financiación favorables en la zona euro. Pero en esta etapa, nada justifica el anuncio de nuevas medidas. Por otro lado, Christine Lagarde debería reiterar el papel fundamental de las políticas fiscales en el apoyo a la recuperación. Los inversores entendieron bien la muy clara hoja de ruta presentada en diciembre, como lo demuestra el bajo nivel de tensión del mercado ante las dificultades políticas en Italia. El BCE no aceptará la fragmentación financiera en la zona euro y ofrece una gran visibilidad al anclar los tipos a corto plazo en niveles muy bajos para influir en toda la curva”, argumenta Dixmier.
No se esperan más estímulos
Según las consideraciones de Konstantin Veit, Portfolio Manager European Rates en Pimco, el BCE está en estado de “hibernación” y con el “piloto automático puesto”. Por ello, según Veit, podríamos esperar una evaluación de cómo se desarrollan las condiciones macroeconómicas en los próximos meses y cómo responderá a cualquier endurecimiento material de las condiciones de financiación con el programa de compras de emergencia para pandemias (PEPP), en línea con su marco de control laxo de la curva de rendimiento (LYCC).
“A medio plazo, el BCE probablemente espera que la primera mitad del año no requiera decisiones importantes de política monetaria y que las condiciones permitan un enfoque intenso en la revisión de la estrategia en curso. Una vez que se hayan neutralizado suficientemente los efectos relacionados con la pandemia en la senda de la inflación mediante medidas de política temporales como el PEPP y las agresivas TLTRO, creemos que volverán a cobrar importancia los instrumentos de compra de activos más habituales para afinar la postura de la política monetaria posterior a la pandemia a partir de 2022, mientras que los recortes de los tipos de interés quedarán en un segundo plano. El BCE tendrá que seguir siendo muy complaciente en los próximos años y, en todo caso, las conclusiones de su revisión estratégica probablemente se inclinen hacia la política acomodaticia por más tiempo”, añade Veit.
Para Ulrike Kastens, economista DWS, la pregunta es más bien si el BCE tendrá que dar más estímulo monetario en caso de que la ya cautelosa proyección de crecimiento del PIB del 3,9% para 2021 tenga que ser revisada a la baja como resultado de los prolongados cierres. No creemos que sea así. Aunque es probable que la recuperación económica sufra un revés durante el invierno, con múltiples proveedores que proporcionen la vacuna, las probabilidades de una recuperación significativa a partir del verano de 2021 han aumentado.
“El BCE continuará asegurando condiciones de financiación favorables con sus compras mensuales. El volumen del PEPP es suficiente, sobre la base del promedio de las compras mensuales de los últimos meses. Incluso incluye una especie de «margen de seguridad» en caso de que fuera necesario un mayor volumen de compras si hubiera posibles distorsiones del mercado. Con este telón de fondo, es probable que el BCE permanezca en suspenso en los próximos meses. La decisión sobre cómo proceder debería tomarse entonces en la segunda mitad de 2021, cuando también se complete la revisión de la estrategia. Pero sería una ilusión esperar que algo cambie en la orientación fundamentalmente expansiva de la política monetaria”, concluye Kastens.