Gilles Lequeux, gestor de Petercam Equities Europe Small Caps. Foto cedida. Degroof Petercam: “Habrá una recuperación de las ganancias en Europa y las small caps crecerán más que las grandes compañías”
Las small caps son vistas como los patitos feos del mercado pero su pequeño tamaño es precisamente uno de sus mayores atractivos. Aunque no acaparan los focos de atención del mercado y en muchas ocasiones son prácticamente desconocidas, estas compañías ofrecen un gran potencial para los inversores y para las gestoras de fondos -por no mencionar las cualidades diversificadoras-, como demuestra su superior retorno en la última década sobre los grandes valores.
Así lo asegura Gilles Lequeux, que junto con Bart Geukens gestiona el fondo Petercam Equities Europe Small Caps de Degroof Petercam AM. Según ha explicado Lequeux durante un desayuno celebrado recientemente en Madrid, el principal interés en las compañías de pequeña capitalización se encuentra en su capacidad para conseguir mejores rendimientos que las grandes compañías. “Al ser más pequeñas, crecen más rápido”, explica este gestor.
“Se trata de compañías que a menudo no están tan bien cubiertas por el mercado”, indica Lequeux, en referencia a la menor importancia y recursos que se suele asignar a este activo. Según explica, estas cotizadas son las grandes olvidadas por las gestoras, al contar con un menor nivel y profundización de estudio a la hora de incorporarlas a las carteras. En muchos casos, señala, se trata de compañías incluso desconocidas, cuyo análisis se encarga a los miembros junior de los equipos.
Para este gestor, podemos distinguir entre dos universos de small caps, pero el que interesa es el que está formado por las compañías de calidad, con buenos resultados, sostenibilidad y fuertes balances. No en vano, Lequeux insiste en la calidad de las compañías en las que se desee invertir: “Tienen que ser muy buenas, de otra manera te puedes llevar una mala sorpresa”, advierte el experto, que considera que “en este universo se encuentran los mejores resultados”.
A la hora de elegir las empresas, además de los aspectos cualitativos, Lequeux insiste en que se deben cuenta las valoracionesrelativas (y no las más baratas si no todo lo contrario), buscando empresas con un justificado potencial para duplicar su valor en un periodo de cinco años, es decir una TIR del 15% pa. Asimismo, descarta el posicionamiento por regiones: “La exposición geográfica es consecuencia de nuestro stock-picking”, en el que prima el análisis de sectores y tendencias en los que considera que puede haber oportunidades. No obstante, reconoce estar expuesto al sector petrolero, a través de empresas no dependientes del capex ni el precio del crudo.
En cuanto al futuro de las compañías europeas, el gestor de Degroof Petercam AM es optimista con los resultados que presentarán las small caps. Así, asegura que “habrá una recuperación de las ganancias en Europa y las small caps recuperarán más que las grandes compañías”, pero “hay que estar comprometido” en el plazo de inversión para obtener todo su potencial de revalorización.
Foto: Realduluoz, Flickr, Creative Commons. Amundi ETF registra en España un fondo cotizado que sigue a un índice de crédito con grado de inversión y rating BBB
Amundi ha registrado en España el Amundi ETF BBB Euro Corporate Investment Grade UCITS ETF, con el que completa su gama de ETFs de renta fija, con el primer ETF europeo que suministra exposición al índice Markit iBoxx EUR Liquid Corporates BBB Top 60. Este innovador ETF, listado Euronext Paris, está siendo distribuido en diferentes países europeos, explica la gestora en un comunicado.
“Esta nueva exposición, ofrecida con un TER del 0,20%, constituye una herramienta complementaria en la asignación de activos para aquellos inversores que buscan capturar el rendimiento del mercado de crédito euro en un momento en el que los emisores europeos aún se benefician de unos sólidos fundamentales y de un entorno favorable gracias a la política acomodaticia del Banco Central Europeo”, explica la entidad.
El índice Markit iBoxx EUR Liquid Corporates BBB Top 60 tiene como objetivo representar la rentabilidad de la deuda emitida en euros por las compañías privadas con calificación BBB, concentrándose en las obligaciones de las compañías más liquidas emitidas en euro. La metodología del índice permite seleccionar un máximo de 60 obligaciones de empresas líquidas, en euros, de calificación BBB- de Standard & Poors, BBB- de Fitch y Baa3 de Moody’s.
Según Fannie Wurtz, directora general de Amundi ETF, Indexing & Smart Beta: “Unas entradas de casi 5.000 millones de euros en ETFs de deuda corporativa desde el inicio del añomuestran que los inversores mantienen un fuerte interés por la búsqueda de rendimiento en renta fija. En Amundi ETF estamos orgullosos de poder ofrecer esta nueva exposición que permite capturar el rendimiento del universo de grado de inversión con un menor riesgo que el segmento high yield”.
A&G ha incorporado a un nuevo asesor para el área de banca privada. Se trata de Jaime Figueroa, desde 2008 director de Banca Privada en Catalunya Caixa.
En esa entidad, era responsable del desarrollo del negocio de Banca Privada en el Centro-Norte, Andalucía y Levante, además de tener responsabilidad directa en la selección y formación de los equipos, captación de clientes y definición de productos, con un equipo de más de 60 personas y un patrimonio por encima de los 1.000 millones de euros, según la información proporcionada por A&G.
Anteriormente, de marzo de 1998 a 2008, trabajó en Credit Suisse Gestión, SGIIC, primero como responsable de Renta Fija, luego como director de Inversiones, más tarde como director de Inversiones de Renta Fija y Divisas y desde 2005 como subdirector general de la gestora. Los seis años anteriores trabajó en Banesto Bolsa S.V.B., en el Departamento de Renta Fija y Productos Derivados. Y antes, en Benito & Monjardin S.V.B., en el Departamento de Gestión de Patrimonios e Inversiones Institucionales.
Figueroa es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales, rama Empresa especialidad “Financiación” en el Colegio Universitario San Pablo CEU y en la Universidad Complutense de Madrid (segundo ciclo). Tiene un Master en Economía Financiera por el Instituto Universitario de Administración y Dirección de Empresas de la Universidad Pontificia de Comillas (ICADE) y ha cursado varios estudios en el extranjero.
Foto cedida.. Fernando Oteo, nuevo banquero privado de Andbank en Logroño
Andbank, entidad especializada en banca privada, ha incorporado recientemente a Fernando Oteo como nuevo banquero privado para su oficina de Logroño, situada en la Avenida de Portugal. Oteo cuenta con 18 años de experiencia en banca privada y gestión de patrimonios, tanto en el ámbito de particulares como de empresas.
Antes de incorporarse a Andbank, Fernando Oteo ocupaba el cargo de director de Banco Espíritu Santo en La Rioja. Anteriormente, desarrolló su carrera profesional en entidades como Banesto y Caja de Ahorros de Navarra-Banca Cívica.
Fernando Oteo es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Zaragoza, en la especialidad de Financiación, y Diplomado en Empresariales por la Escuela Universitaria de Estudios Empresariales de Bilbao.
Paul de Graaff, director de Andbank en La Rioja, destaca que “esta nueva incorporación refuerza el actual equipo de la entidad en Logroño, que nos permitirá continuar con nuestra estrategia de crecimiento. Tanto su experiencia como su talento nos ayudarán a seguir trabajando para ofrecer a nuestros clientes una gestión integral del patrimonio”.
Andbank es una de las entidades de banca privada independientes más importantes de la comunidad riojana. Su oficina de Logroño, que cuenta con cuatro empleados, gestiona en la actualidad 57 millones de euros, lo que supone un incremento del 7% con respecto al ejercicio anterior. En la actualidad, la entidad cuenta con más de 300 clientes en la comunidad.
Foto: MRHSfan. En la encrucijada: ¿Una oportunidad para activos relacionados con la inflación?
A lo largo de los últimos cinco años, el consenso general del mercado ha sido que estábamos en un entorno de baja inflación. En este artículo, Steve Kolano, del grupo de estrategia y soluciones de inversión (Investment Strategy and Solutions Group, o ISSG) de BNY Mellon, se pregunta cómo pueden prepararse los inversores para salir de la encrucijada en la que nos encontramos.
Toda buena historia necesita un villano y, para los inversores, parece que ahora mismo el malo de la película es la deflación. Sin duda lo es para el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, que el pasado 10 de marzo anunció un nuevo aumento del programa de expansión cuantitativa (QE) y rebajó la tasa de depósito hasta un histórico -0,4%. La alternativa, explicó, era “no hacer nada”, lo que nos llevaría hacia “una desastrosa deflación”. En Davos volvimos a escuchar la misma historia en boca de hasta tres premios Nobel de Economía, que advirtieron de la amenaza que suponen las caídas de precios para la economía real. En Estados Unidos, dos banqueros centrales también han expresado su preocupación: el gobernador de la Reserva Federal de Saint Louis, James Bullard, ha declarado que la caída de las expectativas de inflación resulta “preocupante”, mientras que Charles Evans, de la Reserva Federal de Chicago, ha definido la situación como “alarmante”.
El impacto de las caídas de precios ha sido considerable. En Reino Unido, por ejemplo, los datos del instituto nacional de estadística británico (ONS, por sus siglas en inglés) reflejan que las ventas navideñas sufrieron en 2015 la mayor caída desde 2010 porque los consumidores esperaron a las rebajas para realizar las compras más importantes. En Estados Unidos, los datos oficiales revelan que los comercios vivieron en 2015 su peor año desde 2009, ya que los estadounidenses prefirieron guardar lo que se ahorraron gracias a los menores precios de la gasolina en vez de gastárselo en artículos de temporada.
En gran medida, las presiones deflacionarias a las que nos enfrentamos responden al brusco desplome del precio del petróleo (que ha caído más de un 70% desde el verano de 2014) y a los débiles precios de metales industriales como el cobre, el mineral de hierro y el aluminio, que han tocado mínimos históricos.
Un giro inesperado
Pero, ¿qué ocurriría en el caso contrario? Es decir, si, en vez de la deflación, el auténtico malo de la película fuese la inflación. ¿Cuál sería el posicionamiento más adecuado para las carteras de los inversores en este caso? Eso es lo que se ha preguntado Steve Kolano, responsable de soluciones multiactivos en el grupo de estrategia y soluciones de inversión (ISSG) de BNY Mellon.
Para Kolano, estas cuestiones resultan relevantes porque, aunque algunos datos apuntan hacia una caída de los precios, otros sugieren claramente que la inflación podría repuntar en cualquier momento.
Por ejemplo, si nos fijamos en los datos más recientes de la OCDE, la inflación de los precios al consumo (IPC) anual para los países del G7 –excluyendo alimentos y energía– alcanzó el 1,53% en 2015. Y si ampliamos el análisis a los 34 países miembros de la OCDE, la cifra asciende hasta el 1,73%. Aunque la inflación aún no es muy alta, se aleja de un escenario de deflación y no es muy inferior a su media histórica. Por ejemplo, el IPC subyacente –que excluye alimentos y energía– del G7 se ha mantenido bastante estable cerca del 1,5% anual medio desde el año 2000. Por comparar, el año pasado la inflación general alcanzó el 5% en los mercados emergentes, su nivel más alto de los últimos cuatro años y por encima de la media registrada desde el cambio de siglo.
Los datos salariales y de inflación de las economías desarrolladas muestran una situación similar. En Estados Unidos, el aumento de los alquileres y de los costes sanitarios provocó que la inflación subyacente registrase en enero el mayor repunte en casi cuatro años y medio. En diciembre, los salarios encadenaron un nuevo mes de subidas, y ya van 63.
Incluso las materias primas empiezan a lanzar algunas señales que podrían considerarse tanto inflacionarias como deflacionarias. Los datos de diciembre de la agencia de información energética (EIA) estadounidense, por ejemplo, indican que la producción ha alcanzado su nivel más bajo desde noviembre de 2014 y ha caído con respecto a los niveles del año anterior por primera vez en más de cuatro años. En el resto del mundo, parece que los países productores de la OPEP empiezan a ser conscientes de la necesidad de reducir la oferta y, en febrero, Arabia Saudí y Rusia acordaron congelar la producción a los niveles de enero.
Todo esto se traduce en un conjunto de indicadores mixtos que sitúa a los inversores en una especie de encrucijada. “Nos encontramos en un punto en el que nadie está muy seguro de hacia dónde iremos”, afirma.
Hacia una asignación de activos basada en el régimen económico
Para entender mejor en qué punto se encuentran los mercados en cada momento, el ISSG emplea un amplio conjunto de datos que caracterizan el estado de la economía mundial en base a distintos parámetros de crecimiento e inflación. Las diferentes combinaciones de datos se plasman en cinco regímenes económicos: caliente (warming), perfecto (perfection), frío (cooling), quema (too hot) y helado (too cold). Los tres primeros hacen referencia a entornos macroeconómicos por lo general favorables que registran un crecimiento o una caída marginal del PIB y que suelen resultar positivos para la renta variable. En los otros dos escenarios –too cold y too hot– la economía está cayendo en recesión o registra una inflación tan alta que asfixia el crecimiento (gráfico 1).
Para Kolano, la economía mundial se está alejando de los escenarios de perfection y cooling y se sitúa actualmente entre inflación (a medio camino entre warming y too hot) y deflación (too cold). Por eso, los inversores deben empezar a plantearse el posicionamiento más adecuado para sus carteras. Como puede verse en el gráfico 2, las materias primas tienden a comportarse bien cuando aumentan las expectativas de inflación (warming y too hot), mientras que los bonos gubernamentales con vencimientos a largo plazo suelen hacerlo mejor en entornos recesionarios (too cold). Por este motivo, Kolano cree que lo más óptimo puede ser adoptar una estrategia de tipo barbell que cubra ambos escenarios.
“Los datos muestran que las políticas de los bancos centrales están empezando a funcionar, lo que provocará un aumento de las expectativas de inflación”, explica. “Eso no quiere decir que la inflación vaya a descontrolarse, sino que los inversores volverán a demandar activos sensibles a la inflación como las materias primas. Las valoraciones de estos activos están en mínimos en estos momentos, por lo que son los mejor posicionados para rebotar cuando empiecen a aumentar las expectativas de inflación”.
En el otro lado de la balanza, el experto sitúa el temor a una nueva recesión, es decir, un escenario too cold en el que se debiliten tanto el crecimiento como la inflación. “En el caso de que nos dirigiésemos hacia un entorno de recesión y deflación, me plantearía comprar duración ahora mismo porque, históricamente, los bonos soberanos con vencimientos a largo plazo han sido la clase de activo que mejor se ha comportado en un entorno de este tipo”.
Además, si compran ahora, los inversores podrían beneficiarse de las valoraciones. “Hasta hace poco, el dinero ha estado entrando en el tramo corto de la curva porque los inversores apostaron correctamente por una subida de los tipos de interés de Estados Unidos. Esa estrategia tenía sentido porque el tramo corto de la curva se recupera muy rápidamente pero también implica que el tramo largo podría estar ofreciendo más valor en estos momentos. Si avanzamos hacia una nueva recesión, es esperable que los flujos de capital cambien de tendencia y que el tramo largo vuelva a ser el más atractivo”.
Para Kolano, es imposible saber hacia dónde se moverá el mercado en los próximos meses, pero, en su opinión, lo importante es que tanto las materias primas como los bonos soberanos a largo plazo ofrecen valoraciones atractivas.
“Aunque en los mercados no hay finales felices, si los inversores descuentan tanto el riesgo de inflación como el de deflación, al menos estarán potencialmente protegidos en ambos casos”, concluye.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Al Jazeera English
. Arabia Saudí creará el mayor fondo soberano del mundo
Con el fin de acabar con la dependencia del petróleo y transformar a Arabia Saudí en una de las grandes potencias inversoras del mundo, su joven príncipe, Mohamed bin Salmán, sacará a bolsa una pequeña participación -menos de un 5%- de la petrolera estatal Saudi Aramco y creará el mayor fondo soberano del mundo.
La ambición de este joven monarca es que el país pueda sobrevivir sin los ingresos que produce el oro negro en 2020, sólo dentro de 4 años, informa BBC News. El fondo, que ahora dispone de 160.000 millones de dólares, establecería un récord al alcanzar los 2 billones de dólares, más que duplicando el mayor fondo que existe ahora –el de Noruega–. La propia operación de salida a bolsa de Saudi Aramco también sería de récord, ya que según las cuentas del Consejo de asuntos económicos y desarrollo del país, sólo la oferta de un 1% superaría la OPV más alta de la historia. El resto de acciones de la petrolera, que no serían ofrecidas en la operación, pasarían al fondo soberano que controla el gobierno, publicó Bloomberg.
El príncipe Mohamed bin Salmán, presidente del citado consejo, anunció las reformas económicas incluidas en el programa Visión 2030. «En Arabia Saudí hemos desarrollado una adicción al petróleo«, declaró Salmán a la televisión estatal Al Arabiya, antes de su intervención ante la prensa extranjera el pasado lunes.
Más del 70% de los ingresos del país provienen de la venta de crudo, cuyo precio cayó desde los 115 dólares el barril -en junio de 2014- a poco más de 40 la semana pasada. El déficit fiscal del país es del 15% del PIB, unos 98.000 millones de dólares.
El portavoz declaró que el plan de reformas no guarda relación con el descenso del precio del crudo -explica BBC News-, pues fue elaborado con un precio estimado de 30 dólares por barril. Con las reformas inlcuidas en este plan, el país aspira a multiplicar sus ingresos no ligados al petróleo, 43.600 millones en 2015, hasta 160.000 millones en 2020 y 267.000 en 2030. «Técnicamente, esto hará de las inversiones y no del petróleo la fuente de ingresos del nuestro gobierno. Así dentro de 20 años seremos un Estado que no dependerá principalmente del crudo», explicó en una entrevista a Bloomberg.
Foto cedida. Banchile AGF, Bci Asset Management y Bice Inversiones fueron los grandes ganadores de los XVII Premios Salmón
Un año más LVA Índices y Diario Financiero se unieron para reconocer los mejores fondos mutuos de la industria nacional chilena. Dicho reconocimiento fue entregado el jueves 21 de abril en un evento realizado en el hotel Doubletree by Hilton de Santiago de Chile. Al evento asistieron los principales ejecutivos de los fondos mutuos distinguidos en esta XVII versión de los premios
Año a año los mercados parecen demandar mayores cuotas de transparencia en la información disponible respecto de instrumentos financieros de diversa índole. Los fondos mutuos no son la excepción. Inversores institucionales y privados, agentes financieros o reguladores, todos requieren de metodologías e indicadores accesibles, conocidos y confiables que puedan determinar no sólo el desempeño relativo de un instrumento, sino comparar su relación riesgo-retorno y avanzar en la reducción de las asimetrías de información existentes.
Parte fundamental de la metodología aplicada a la evaluación de los diversos fondos consiste en la incorporación del factor riesgo. Ésta se aplica tomando la información histórica de los fondos como muestra estadística y aplicando una función que convierte dichas rentabilidades en un puntaje de “utilidad esperada”. La función está construida de modo que las pérdidas tengan mayor peso que las ganancias de similar magnitud, lo que refleja el comportamiento real de los inversionistas. Al hacer esto, el puntaje de un fondo que alcanza un 10% de rentabilidad en forma estable es mayor que el de uno que llega al mismo 10% pero con ganancias y pérdidas dramáticas cada mes. Del mismo modo, entre dos fondos con comportamientos históricos (volatilidades) similares, ganará el que tiene mayor rentabilidad.
En esta ocasión, participaron 280 fondos y fueron 17 las categorías medidas y 33 los fondos galardonados. Todos ellos forman parte del portafolio de las 18 principales administradoras de fondos mutuos. Entre ellas, destacaron Banchile AGF, con ocho distinciones, Bci Asset Management con 5 distinciones y Bice Inversiones, con cuatro.
Por su parte, la gestora Santander Asset Management Chile obtuvo el Premio Salmón en la categoría “Deuda > 365 días nacional en pesos” por el rendimiento en 2015 del Fondo Mutuo Santander Renta Largo Plazo Pesos, serie Ejecutiva, gestionado por el portafolio manager Alberto Silva.
Además, es importante destacar que la premiación contó con el auspicio de: Tanner Corredores de Bolsa, Instituto Guillermo Subercaseaux de banca y finanzas y Kibernum.
CC-BY-SA-2.0, FlickrPhoto: T-Mizo. Negative Rates Have Overstayed Their Welcome
Los bajos tipos de interés son un problema. Un artículo publicado en The Wall Street Journal estos días señalaba que ya hay más de 8 billones de dólares de deuda soberana cotizando en tasas negativas. Los tipos de interés han dejado de ser bienvenidos, y las autoridades deben tener en cuenta las consecuencias no deseadas, advierten Kathleen Gaffney, co-responsable de las estrategias diversificadas de renta fija en Eaton Vance, y su compañero en la firma Henry Peabody, portfolio manager.
Ambos creen que la Reserva Federal ya es consciente de este problema, aunque no tienen claro si el resto de bancos centrales lo son tanto y que hubo un tiempo para poner en marcha medidas de emergencia. “Aunque la economía global todavía no tiene un horizonte despejado y un ajuste al alza de los tipos de interés sería doloroso para algunos sectores, de forma marginal esto tendría probablemente efectos positivos ahora mismo. Sin embargo, requeriría que los bancos centrales admitan que la política monetaria tiene límites”, explican en el blog de Eaton Vance.
Gaffney y Peabody recuerdan en su texto que cuando los bancos centrales empezaron su recorte de los tipos hacia cero, esto era una medida bien intencionada. Las razones más obvias eran entonces que unos tipos de interés más bajos estimulan la inversión y aumentan la oferta de dinero haciendo que las presiones inflacionistas y los costes de capital se reduzcan. Pero ambos opinan que ahora algo ha cambiado. No está claro lo que ha sido, pero los incentivos y los riesgos han cambiado y esto ha traído consigo consecuencias no deseadas que superan ya a los beneficios de tener tipos de interés en el 0%.
El coste de capital es artificialmente bajo y distorsiona los mercados de capitales. Las corporaciones, al menos parcialmente a instancias de la naturaleza cortoplacista de muchos accionistas, comenzaron a recibir con los brazos abiertos las bajas rentabilidades ajustadas a riesgo mediante la recompra de sus propias acciones. Así que sí, el largo período de esta política monetaria de emergencia ha beneficiado a algunos.
Sin embargo, dicen ambos gestores, esto está siendo a expensas de los ahorradores. Los ahorradores se han visto obligados a salir de la renta fija y entrar en la renta variable para poder recuperarse de las pérdidas. Ahora, la volatilidad en las bolsas va a tener un enorme impacto en la psicología y, tal vez, en el gasto. El impacto en los ahorradores ha sido tan grave que muchos destacan el irónico y triste cremimiento de las ‘deudas’ asociadas con bajas rentabilidades. Conseguir sus objetivos es mucho más difícil.
“Creemos que la Fed (y otros bancos centrales) harían bien en aumentar los tipos de interés y generar un coste del capital más alto, así como mejorar los ingresos para los ahorradores. Unos tipos más altos probablemente alivien la presión sobre los consumidores, permitiéndoles volver a gastar. Esto, junto con un mayor gasto en infraestructuras que sean necesarias y la expansión fiscal podría aumentar la demanda de crédito. La subida de los tipos de interés estarían respadadas por los fundamentos y serían una afirmación de crecimiento. Es probable que además, trejera un nuevo enfoque a los proyectos a largo plazo y a los gastos de capital”, explican.
Esta forma de pensar, junto con el valor relativo, está detrás del posicionamiento de Eaton Vance en las materias primas vinculadas a crédito, así como a las divisas que se beneficiarán de una combinación de políticas de apoyo, entrada de capital privado, y lejos del riesgo de tipos de interés.
“El ajuste que conlleva tener tipos de interés más altos posiblemente será doloroso para algunos, sobre todo para los que esperan que siga habiendo un mundo de baja volatilidad. El capital fluirá hacia los sectores del mercado que ofrecen protección contra unos tipos de interés más altos, y el crédito con la mejora de los fundamentales”, concluyen.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Thomas Hobbs. Alejandro Schiuma deja Itaú Asset Management
En febrero de este año, Alejandro Schiuma, especialista en deuda corporativa latinoamericana, dejó Itaú Asset Management después de casi cuatro años y medio en la firma. Hasta entonces, Shiuma había sido responsable de inversiones en crédito latinoamericano y mercados locales.
Antes de unirse a Itaú, Alejandro Shiuma trabajó en MC Capital Group en Nueva York, como trader de mercados emergentes, especializándose en deuda corporativa y soberana emergente, operaciones de tipo de cambio y derivados. Previo a su paso por Estados Unidos, trabajó para Itaú BBA en la mesa de trading de tipo de cambio y en Banif Investment Bank, como especialista de crédito de Agro-negocios, según la información publicada en su perfil de LinkedIn.
Alejandro Shiuma gestionaba hasta hace unos meses el fondo Itaú Latam Corporate Bond, fondo lanzado en 2012 que tiene por objetivo superar los retornos del índice CEMBI Broad Latin America, invirtiendo en deuda corporativa latinoamericana emitida en los mercados internacionales.
Por el momento, no ha transcendido la nueva posición de Schiuma después de su salida.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Latin America for less. José Larrabure es nombrado gerente de la división de inversiones de Prima AFP
A partir del próximo 1 de mayo, José Larrabure será el nuevo gerente de la división de inversiones de la Administradora de Fondos Pensiones peruana Prima AFP. Reemplazará a José Antonio Roca, quien se desempeñó como representante máximo del área por 8 años.
José Larrabure cuenta con más de 19 años de experiencia en Credicorp, donde fue vicepresidente de inversiones propias, banca corporativa y tesorería del BCP Miami. Fue gerente de inversiones institucionales del Atlantic Security Bank, gerente de área de gestión de inversiones, gerente de banca corporativa internacional y gerente de proyectos del BCP Perú. José Larrabure ostenta un MBA de la Universidad de Texas (Austin) y es graduado de la facultad de Administración de la Universidad de Lima.
Por su parte, José Antonio Roca, deja la firma para emprender nuevos retos profesionales en el Grupo Wiese, donde ejercerá como gerente general. Antes de trabajar para Prima AFP, trabajó en JP Morgan Chase, Goldman Sachs y el Grupo Santander en Perú. Tiene un MBA de la escuela de negocios Ross de la Universidad de Michigan y es licenciado en Economía por la Universidad de Lima.