Foto: MaxPixel CC0. Ir en contra del momentum es un juego difícil pero puede ser muy rentable
Ir en contra del momentum o impulso es un juego difícil, pero cuando se hace bien, puede ser muy rentable o al menos eso creen los estrategas de renta variable estadounidense de Morgan Stanley. En su opinión, ahora es cuando las preferencias deben pasar de un enfoque de crecimiento a valor.
Su análisis señala que el mercado mostró signos de agotamiento tras la publicación de un crecimiento del PIB estadounidense muy fuerte en el segundo trimestre de este año y creen que podría producirse una corrección mayor que la de febrero, que sería más profunda en el caso de carteras centradas en valores tecnológicos, discrecionales y small caps.
«Nuestros infraponderados son una mezcla de crecimiento y costosas estrategias de defensa: tecnología, consumo discrecional y REITs. La buena noticia es que el valor comenzó a superar significativamente al crecimiento después de uno de los peores períodos registrados. Creemos que no es demasiado tarde para sesgar las carteras en esta dirección. Por lo tanto, tal vez la mejor manera de expresar nuestra visión del mercado bajista sea simplemente sobreponderar el valor frente al crecimiento, como actualmente recomendamos en nuestro sector de ponderaciones. Apreciamos el hecho de que luchar en el momento puede ser un juego perdedor, pero cuando las cosas llegan a este extremo y hay evidencia de un giro, tenemos que ir por el otro lado», comentan.
En su lugar sobreponderan a las empresas de servicios públicos así como el energético, industrial y financiero, lo que les da una importante inclinación de valor, con un toque defensivo.
«Sobre la base de este ensanchamiento en el último año, creemos que es hora de una reversión. Las acciones de Large Cap Value subirán más o las acciones de Large Cap Growth simplemente bajarán y se pondrán al día con el resto del mercado en cuanto a P/E. Pensamos que será lo último pero no importaría si es lo primero. De cualquier manera, el factor valor supera al de crecimiento y creemos que el diferencial puede reducirse en un 10-15% en los próximos meses», concluyen.
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. La pérdida de popularidad de Shinzo Abe se convierte en el principal riesgo para la economía japonesa
Durante el primer trimestre de este año, el PIB de Japón se contrajo por primera vez desde 2015. El país nipón no ha sido ajeno a la ralentización del crecimiento de las economías desarrollas y también se ha visto afectado por este frenazo. ¿Qué podemos esperar de Japón de cara al segundo semestre del año?
Pese a que el crecimiento ha sido menor de lo esperado, desde Candriam son moderadamente positivos porque la factura salaria continúa subiendo y aumenta más rápido que la inflación. “La tasa de paro se situó en el 2,2 % en mayo. Además, las empresas siguen apostando por seguir invirtiendo, como se observa en la última edición de la encuesta Tankan, publicada el 2 de julio. La política monetaria no debería cambiar, ya que dos años consecutivos de crecimiento positivo no han conseguido tirar mucho más al alza de la inflación”, explican desde la gestora.
Su posición “moderada” se debe a que Japón no está libre de riesgos, en concreto la gestora observa dos: la guerra comercial con Estados Unidos y la popularidad del primer ministro Shinzo Abe. Respecto a la guerra comercial, Candriam señala que si las empresa retrasan sus planes de inversión ante el conflicto, Japón sería arrastrada por la consiguiente desaceleración mundial.
Riesgo a perder las Abenomics
En segundo lugar, “el porcentaje de aprobación del primer ministro Shinzo Abe, que ha caído debido, en parte, al escándalo Moritomo. Este hecho ha reducido sus posibilidades de salir reelegido como líder de su partido, el LDP, el próximo mes de septiembre. Si Shinzo Abe no sale reelegido, el nuevo líder del partido (que sería, de facto, el nuevo primer ministro) podría dar un nuevo rumbo a la política económica y fiscal de Japón”, explica la gestora.
En este sentido, lo más importante es cómo afectaría un cambio en la política japonesa a la renta variable del país. “Después de mantener el optimismo en torno a la renta variable japonesa desde el pasado verano, Candriam ha adoptado una postura de mayor cautela en junio. Como se acaba de señalar, la votación para elegir al presidente del LDP en septiembre supone un riesgo para el primer ministro Abe y amenaza su Abenomics, una combinación de políticas de estímulo en el ámbito monetario, económico y fiscal. Este conjunto de políticas expansivas sigue siendo vital para la economía japonesa. Además, los riesgos de guerra comercial supondrían un duro golpe para una bolsa donde las exportaciones pesan mucho”, argumentan desde Candriam.
A consecuencia de ello, el estatus del yen pone de relieve su atractivo como refugio y contrarresta la brecha de tipos de interés. En este sentido, las empresas ya no pueden depender de la debilidad de la moneda para impulsar sus ingresos en el extranjero. Las acciones japonesas están experimentando una ralentización en sus beneficios y apenas crecen en estos momentos, mientras que se prevé que otras regiones registren tasas de crecimiento más elevadas.
Pixabay CC0 Public DomainSkitterphoto. Los inversores de fondos pasivos buscan ahora algo más que tarifas bajas
La nueva regulación europea MiFID II y la competencia de los fondos de gestión pasiva siguen ejerciendo una gran presión sobre los honorarios de los gestores activos, que se esfuerzan por atraer más flujos de inversión hacía sus fondos.
Según el informe del sector europeo de la gestión de fondos elaborado por Cerulli Associates, cada vez existe mayor competencia entre las gestoras europeas. Los cambios regulatorios, la fortaleza de la gestión pasivo, la búsqueda de eficiencias y la guerra de honorarios entre firmas está detrás de esta mayor competitividad.
El recorte desenfrenado de los precios en los fondos indexados y en los fondos negociados en bolsa ha conducido a entradas masivas en estrategias pasivas, señala Cerulli Associates. «Pero el vínculo entre las tarifas bajas y los flujos positivos puede estar llegando a su fin porque el inversor busca algo más. En cambio, el foco está volviendo a la gestión activa”, advierte Angelos Gousios, director de investigación europea de Cerulli.
Según Cerulli, las tarifad de la gestión pasiva ya no pueden caer mucho más de los precios actuales. “Funcionar y comercializar fondos de inversión cuesta dinero, incluso un fondo de seguimiento barato tiene costos de negociación”, afirma Gousios.
En su opinión, las tarifas atractivas ya no logran convencer a los inversores y, poco a poco, va reduciendo su importancia: “Los inversores saben que lo más barato no es necesariamente lo mejor. Se está prestando mayor atención a cómo se gestionan los fondos».
Cerulli dice que el número de fondos activos que han lanzado tarifas inferiores está aumentado y como ejemplo señala a las grandes gestoras, quienes han hecho lanzamientos con tarifas más bajas y vinculadas al desempeño del producto. Esta tendencia podría ser, según Gousios, “el comienzo de una lucha por los flujos entre los gerentes activos”.
La competencia también se está aumentando en otras áreas. En reconocimiento del riesgo potencial, los gestores de activos están reduciendo las tarifas para los inversores que respaldan un producto anticipadamente. Del mismo modo, se ofrecen descuentos en los precios de las acciones a los agestores de patrimonio y distribuidores. Las tarifas de los gestores activos también se ven presionadas por las estrategias smart beta más baratas.
Pixabay CC0 Public Domain. azValor tiene una partícipe con ocho meses y otra con 100 años
El value investing se basa en la inversión a largo plazo, y eso lo entiende muy bien Agustina, la partícipe más longeva de azValor, que acaba de cumplir 100 años. También comparten esta filosofía los padres de Ana (nombre figurado), una bebé que antes de cumplir sus primeros ocho meses de vida ya forma parte de la familia de coinversores de la gestora que fundaron, en 2015, Álvaro Guzmán de Lázaro, Fernando Bernad, Beltrán Parages y Sergio Fernández-Pacheco.
Una de las ventajas de la inversión en valor reside en el comportamiento del interés compuesto que permite aumentar significativamente el volumen de efectivo en función de la capitalización de la rentabilidad obtenida.
Un ejemplo: si Ana mantuviera su inversión hasta alcanzar la edad de Agustina (es decir, 99 años de inversión), y consiguiera la rentabilidad media del índice Standard and Poor’s 500, un 7% anual, el beneficio que obtendría seria tal que cada 1.000 euros se convertirían en 810.000.
Si la rentabilidad obtenida alcanzara el 14%, cada 1.000 euros de Ana se convertirían en 430.110.735.
Si Ana quisiera utilizar su inversión para jubilarse a los 65 años (64 años de inversión), los ejemplos anteriores se convertirían en 75.955 euros por cada 1.000 euros, en el caso de rentabilidades medias del 7%, y en 4.384.403 euros por cada 1.000 en el caso de rentabilidades del 14%.
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. El petróleo sigue siendo atractivo como cobertura frente a riesgos geopolíticos y de inflación
Si queríamos algo con lo que medir el nivel de salud de la economía global en la última década, el consumo de petróleo es un buen candidato. El consumo aumentó en más de un 14% desde 2009 hasta los 97,2 millones de barriles diarios el año pasado, en línea con el crecimiento económico global. Y de cara al próximo año, la Agencia Internacional de la Energía prevé que la demanda alcance los 100 millones de barriles por día en 2019.
En opinión de Stéphane Monier, jefe de inversiones de Lombard Odier, esta tendencia remarca la solidez de la recuperación desde la crisis financiera, y sugiere que el desafío para el petróleo es la oferta. “Comparando las cifras de almacenamiento de petróleo con los niveles más bajos de demanda desde enero de 2015 y por debajo del promedio a cinco años, Estados Unidos, China e India han pedido un aumento del suministro para evitar una escasez peligrosa desde el punto de vista económico”, destaca Monier. ¿Podríamos en un escenario de desequilibrios entre oferta y demanda de petróleo?
Según el jefe de inversión de Lombard Odier, las decisiones políticas de la OPEP sí podrían conducirnos hacia un desequilibrio de este mercado. Según explica, a principios de julio, “la OPEP y Rusia llegaron a un acuerdo hace para aumentar el suministro por un millón de barriles por día como máximo a partir del 1 de julio. El acuerdo superó la resistencia de Irán, el tercer productor más grande de la OPEP, que se enfrenta a una caída de la producción a medida que se avecina la reimposición de sanciones por parte de Estados Unidos”.
Esta decisión llegó después de que desde enero de 2017 el precio del petróleo haya ido subiendo, en parte por falta de oferta. De hecho, la fuerte demanda, los recortes de producción durante el año pasado y las tensiones geopolíticas han contribuido a impulsar los precios a unos niveles cercanos a los máximos de tres años y medio.
En cambio, de cara a 2019, la gestora espera un equilibrio entre oferta y demanda , suponiendo que no haya disrupciones. “Las reservas, en términos absolutos, pueden crecer modestamente mientras se mantienen por debajo del promedio a cinco años. En un contexto de capacidad más limitada y una falta de inversión apreciada en el sector estos últimos años, el petróleo podría volverse más sensible a ciertas alteraciones y cuestiones geopolíticas”, apunta en sus previsiones.
Según Monier, esta perspectiva sobre el mercado del petróleo y el alza de su precio no desincentiva su interés por el mercado de materias primas. “Nos siguen gustando como un activo que puede ofrecer a los inversores una cobertura frente a riesgos geopolíticos y de inflación dentro de una cartera multiactivos. Nuestra
perspectiva sobre el petróleo se mantiene neutral, con un precio objetivo de 70 dólares. La OPEP se mantiene claramente comprometida con este nivel de precios, lo que transmite tranquilidad tanto a productores como a consumidores.
También creemos que los fuertes retrocesos de la curva de rentabilidad de los futuros, donde los precios de los futuros son más bajos que los precios esperados al contado, ofrece una oportunidad interesante para los inversores en el mercado del petróleo”, sostiene Monier.
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. ¿Cómo pueden las primas de riesgo mejorar las rentabilidades?
Tras la tendencia positiva de los dos últimos años, las expectativas de rentabilidades a largo plazo parecen algo más moderadas. La era de los bajos tipos de interés conlleva una menor rentabilidad en la deuda pública y corporativa. ¿Qué implicaciones tiene esta situación para los inversores?
En primer lugar, los inversores, en su búsqueda de nuevas fuentes de rentabilidad, se han planteado el uso de inversiones alternativas, lo que puede ofrecer oportunidades interesantes según la opinión de Petri Niininen, analista cuantitativo de carteras en Nordea Asset Management. “Se espera que las materias primas, tras un periodo de rentabilidades negativas, registren un mejor comportamiento en la próxima década, si bien en cotas aún moderadas y con una elevada volatilidad. Los activos inmobiliarios presentan una menor volatilidad, pero las rentabilidades previstas para los REIT globales en los próximos diez años se sitúan en un nivel inferior al de la última década. Además, los productos alternativos también suelen ser menos líquidos”, explica Niininen.
Otra tendencia que se ha producido en este contesto es que muchos inversores se han replanteado su enfoque. Para opción, este experto de Nordea propone desglosar las rentabilidades de los activos por la prima de riesgo subyacente de forma sistemática. “De este modo, los inversores pueden obtener rentabilidad exponiéndose a los factores que no estén correlacionados con sus carteras actuales o con los mercados en general”, puntualiza.
También hay primas de riesgo que parecen mantenerse en los distintos mercados. Por ejemplo, algunos estudios e informes han identificado que los títulos de valor arrojan una rentabilidad superior a la de los valores de crecimiento, que los recientes ganadores superan a los perdedores, y que los activos de alto rendimiento suelen registrar un mejor comportamiento que aquellos de rendimiento reducido. Estos enfoques se conocen como valor, momentum y carry.
Por último, Niininen señala que los inversores también pueden optar por combinar las primas de riesgo con su cartera actual con el fin de mejorar las rentabilidades y reducir el riesgo de la cartera. “No se trata solo de introducir un sesgo hacia los títulos de valor, por ejemplo, sino también de eliminar la exposición a los riesgos no deseados, centrándose en las primas que actualmente hacen gala de solidez y ajustar la cartera en función del actual régimen económico. El enfoque centrado en las primas de riesgo abarca todas las clases de activos que ofrecen una serie de catalizadores de rentabilidad diferentes para los inversores. Con las primas de riesgo, los inversores pueden lograr una mayor diversificación en sus carteras”, concluye.
Foto: Johnny Magnusson CC0. El 2018 presenta un entorno favorecedor para las fusiones entre RIAs
Aunque el número de transacciones relacionadas con la actividad de fusiones y adquisiciones entre RIAs ha disminuido recientemente, el tamaño de la oferta promedio ha aumentado sustancialmente, de acuerdo con un estudio de DeVoe patrocinado por Nuveen.
Durante los primeros seis meses de 2018, se firmaron 81 acuerdos, frente a 87 en el mismo período del año pasado. Esta caída del 7% en las transacciones está siendo compensada en algunos aspectos por un aumento del 20% en el tamaño de la transacción.
El promedio de activos bajo administración de los RIAs adquiridos aumentó un 21% en todos los ámbitos durante los primeros seis meses de 2018 versus el año completo de 2017. DeVoe atribuye este cambio a una caída significativa en las firmas de asesores con entre 100 y 250 millones de dólares en activos administrados, que se vio agravada por una aumento en las transacciones que involucran activos de entre 750 y 1.000 millones.
Es un mercado de vendedores y es un mercado de compradores.
La encuesta realizada por DeVoe indica que el 45% de los directores de RIAs están abiertos a «discusiones de venta» y más de la mitad esperan adquirir una empresa. El estudio también señaló que, «para los vendedores, las valoraciones son altas, el número de posibles compradores es amplio y existen claros beneficios de escala. Para los compradores, los datos demográficos son atractivos, la falta de planificación para la sucesión es beneficiosa, y la apertura genuina para hablar con los compradores es alta». Entonces, a pesar de una desaceleración reciente en la actividad de fusiones y adquisiciones de RIA, el estudio concluye que la actividad de fusiones y adquisiciones entre RIAs probablemente continuará fuerte en el futuro.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: Alexas. Renta fija de corta duración y alta calidad: ¿hace cuánto que no ve una oportunidad tan convincente?
En los últimos 10 años, no se ha visto una oportunidad de inversión tan atractiva como la que muestra la renta fija estadounidense de alta calidad y corto vencimiento. Según apunta Alex Mackey, gestor de renta fija de MFS Investment Management, la forma de la curva de rendimientos de los bonos corporativos con grado de inversión ha cambiado drásticamente desde el comienzo de la normalización monetaria.
“Hemos visto una aceleración del aplanamiento de la curva de rendimiento de los bonos corporativos después de que la Fed se comprometió e inició su ciclo de subida de tipos, que comenzó en diciembre de 2015. Hoy en día, la compensación que se recibe al invertir en los bonos con vencimiento a dos años de grado de inversión es significativamente superior a la compensación de invertir en los bonos de 10 años. El inversor que esté considerando salir de ese espectro de vencimientos está recibiendo un rendimiento substancialmente menor al que recibía hace una década. Con el aplanamiento de la curva de rendimientos, la parte corta se ha elevado más que la parte larga de la curva”, explica el gestor.
Por su parte, Phil Burgener, también gestor de renta fija en MFS Investment Management, argumenta que existen un par de dinámicas que están afectando a la curva. “Por un lado, la Reserva Federal comenzó a subir los tipos a corto plazo a finales de 2015, y esto ha impactado la parte corta de la curva de rendimientos de los bonos del Tesoro. Por lo tanto, hemos visto un giro en las tasas de interés del Tesoro, con la tasa de fondos federales alcanzando niveles de entre 150 y 175 puntos, esto ha afectado a la parte de la curva con vencimiento a dos años y se ha desplazado hacia arriba. Pero, además de esta dinámica, también hemos visto que los diferenciales de la deuda corporativa también se han aplanado. Por lo que el ingreso incremental que se gana al invertir en bonos corporativos a 10 años frente a los bonos a 2 años ha bajado significativamente también”.
Según Mackey, lo que sucedió realmente fue un aplanamiento de la curva del Tesoro, que derivó en un aplanamiento en la curva corporativa. “Si se tiene en cuenta el entorno de diferenciales, de forma agregada, la deuda corporativa de grado de inversión se encuentra en niveles históricamente comprimidos. Por lo que la curva de interés se ha aplanado considerablemente y el diferencial de la curva en sí mismo se encuentra en niveles relativamente bajos”.
En la opinión de Burgener, es muy probable que la Fed continúe subiendo tasas para seguir con la línea de política monetaria y sus normas históricas. “No es una cuestión de saber si seguirá subiendo tipos, es una cuestión de cuantas más subidas de tasas vamos a ver”, detalla.
“En un entorno como este, un inversor debería tener en cuenta que si invierte en bonos de menor vencimiento estos van a ser, por lo general, una menor sensibilidad a los movimientos en las tasas de interés que las inversiones a largo plazo en renta fija. Si se examina el punto de equilibrio o el colchón de margen que tienen los rendimientos de los bonos para resistir unas mayores tasas de interés, la parte de la curva de los bonos con vencimiento a dos años muestra los mayores puntos de equilibrio que se han visto en los últimos cinco años. Un caso de inversión que se ve muy convincente. Mientras que, si se examina el espectro de deuda con mayor vencimiento, a cinco o diez años, se puede ver que los puntos de equilibrio son mucho menores. Por lo que la parte a dos años de la curva es capaz de soportar nuevas subidas de tipos de interés por parte de la Fed”, añade Burgener.
El cambio en los puntos de equilibrio ha sido más dramático en los bonos con vencimiento a dos años, siendo éstos los puntos a los que los rendimientos tendrían que subir antes de que hipotéticamente un inversor comience a perder dinero. “Ese tipo de rendimiento se está viendo más en la parte corta de la curva, con mayores puntos de equilibrio. La gestión activa es por lo tanto crítica en el mercado actual de crédito, conforme los inversores deberían considerar optimizar el rendimiento en un entorno con condiciones monetarias más restrictivas, cambiando el crédito y la curva de rendimiento por un aumento en el conjunto de la volatilidad”, concluye Brad Rutan, especialista de producto en MFS Investment Management.
Foto cedidaOsvaldo Macías, Superintendente de Pensiones en Chile. Superintendente de pensiones de Chile: “Nos gustaría ver a las AFPs invertir en el mercado inmobiliario ”
Tras la aprobación de la norma que permite a las AFPs chilenas invertir en activos alternativos el pasado mes de octubre de 2017, tres de las principales AFP de pensiones chilenas Provida, Capital y Habitat ya están preparadas para invertir en activos alternativos y se espera que empiecen a hacerlo durante este trimestre.
Según declaraciones del superintendente de pensiones chileno Osvaldo Macías, con motivo del seminario “Llegó la hora: inversión en activos alternativos” organizado por AFP Capital y la AIPEF Chilena (Asociación Panamericana de Periodistas de economía y finanzas), Cuprum se encuentra en fase de preparación mientras que las más pequeñas, PlanVital y Modelo, aún no han presentado ningún proyecto a la superintendencia.
Al ser preguntado sobre si la SP se encuentra preocupado por este aspecto, Osvaldo Macías afirmó que, si bien las tres ya aprobadas representan la mayor parte del mercado, manifestó su inquietud por los dos restantes puesto que se encontrarían en desventaja competitiva y reconoció el esfuerzo que las administradoras deben de hacer en la adaptación de sus politicas de inversión y adecuación de sus equipos con profesionales especializados difíciles de encontrar en el mercado.
Si bien el superintendente de pensiones reconoció que Chile ha llegado tarde a la hora de permitir a las AFPs la inversión en activos alternativos, destacó la importancia de este tipo de activos para aumentar la rentabilidad de los fondos y consecuentemente de las pensiones. En este sentido declaró que cada punto de tasa menos en renta vitalicia es un 11% menos de pensión.
Los límites de inversión establecidos en la norma para activos alternativos oscilan en un rango entre el 10% para el fondo Tipo A hasta un 5% para el tipo E. Actualmente las AFP’s tienen una inversión en activos alternativos cercana al 2,7%, indirecta a través de feeder funds que implican duplicidad de comisiones, y aunque los nuevos límites suponen un incremento frente a la situación actual, aún queda lejos de la media de los países de la OCDE que se sitúa cercana 17%. Sin embargo, el Superintendente de pensiones se encuentra cómodo con la velocidad establecida por la norma.
Con respecto a su preferencia por algún tipo de activo alternativos para que las AFPs se inicien en esta categoría, Macías declaró que por la naturaleza de los fondos sería deseable que las AFP invirtieran en proyectos a largo plazo. En concreto se mostró muy a favor de la inversión en el mercado inmobiliario a través de los distintos instrumentos que permite la ley ( leasing, créditos sindicados etc.. ) puesto que se financian proyectos de toda índole, requieren grandes sumas de capital y ofrecen atractivas rentabilidades de las cuales ya se han beneficiado bancos, aseguradoras y fondos de inversión. En concretó declaró : “nos gustaría ver a los fondos de pensiones invertir en el mercado inmobiliario a través de los distintos instrumentos que hemos visto han sido muy satisfactorios para los otros inversionistas que lo han hecho ya desde hace años”
Finalmente, en cuanto a los riesgos de este tipo de activos, Osvaldo Macías destacó el de valorización de los activos necesaria para facilitar los traspasos entre multifondos y administradora.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: PunkToad. La actividad de fusiones y adquisiciones seguirá proporcionando oportunidades al mercado
La disponibilidad de crédito barato ha proporcionado durante meses un papel clave en la actividad de fusiones y adquisiciones y los analistas de UBS recuerdan que, aunque los diferenciales han subido en los últimos meses, las tasas generales de endeudamiento de las empresas siguen siendo bajas en un contexto histórico.
No obstante, el aumento de los rendimientos de los bonos en Estados Unidos y, en menor medida, en otras de las principales economías, también puede servir como un aviso a los CFOs de las empresas de que la era del dinero barato no durará para siempre.
En ese sentido, puede haber un elemento de «ahora o nunca» para aquellos que deseen aprovechar la financiación barata. “Nuestra propia opinión es que los rendimientos nominales en el mundo desarrollado aumentarán solo muy gradualmente durante un período prolongado dadas las fuerzas deflacionistas estructurales. Aunque los bancos centrales han comenzado una normalización de las políticas monetarias a largo plazo, es probable que el dinero barato siga respaldando la actividad de M&A a medio plazo”, explica la gestora.
Posibles obstáculos
UBS recuerda que no hay que descartar el hecho de que también habrá obstáculos para la actividad de fusiones y adquisiciones. La incertidumbre económica y la volatilidad del mercado de capitales son actualmente bajas, pero pueden cambiar rápidamente.
“Las valoraciones de fusiones y adquisiciones no parecen excesivamente estresadas en un contexto histórico pero si aumentan representarán un obstáculo significativo para la creación de valor. Además, una mayor regulación sigue siendo tanto un riesgo como un catalizador para aumentar las fusiones y adquisiciones”, dicen.
Actualmente el mayor riesgo para esta actividad es para los analistas de la firma el aumento de los riesgos geopolíticos y del proteccionismo. La actual disputa sobre el comercio entre Estados Unidos y China probablemente reducirá las fusiones y adquisiciones entre los dos países ante la incertidumbre regulatoria y los temores sobre las perspectivas de las futuras relaciones entre ambos países.
Por eso, el argumento es que si la guerra comercial escala, aumentaría aún más la incertidumbre corporativa en un grado que podría perjudicar el flujo de fusiones y adquisiciones. Los inversores solo necesitan fijarse en el retraso de un año que acumula el regulador chino para pronunciarse sobre el intento de Quallcomm, que cotiza en los Estados Unidos, de adquirir el fabricante holandés de semiconductores NXP para ver cómo la política puede afectar potenciales fusiones y adquisiciones.
“En general, creemos que el argumento para las fusiones y adquisiciones globales durante el próximo año o más es convincente. En general, vemos la posibilidad de que aumenten las fusiones y adquisiciones como un factor negativo menor para el crédito investment grade, incluso aceptando que esto se verá parcialmente compensado por el impulso a los fundamentales crediticios de Estados Unidos de la repatriación del efectivo en el extranjero. Los diferenciales aquí ya son ajustados. Pero hay oportunidades”, concluyen.