Pixabay CC0 Public Domain. Almagro Capital duplica su cartera de inmuebles en el primer semestre de 2019
Almagro Capitalha duplicado el tamaño de su cartera, pasando de 14 a 30 inmuebles, al cierre del primer semestre de 2019. Almagro Capital, que salió a bolsa en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) el pasado enero, ultima el cierre de una ronda de ampliación de capital que le situará en 25 millones de euros de capital.
Hasta la fecha, el 88% de la inversión de Almagro Capital se ha invertido en zonas prime y el resto en zonas oportunistas de la capital. Todos los activos adquiridos se encuentran dentro de la M-30. Están localizados en las calles de Doctor Esquerdo, Platerías, Vallehermoso, Jorge Juan, Pintor Rosales, Lagasca, Alejandro Sainz Aubin, Mesón de Paredes y Ayala, entre otros. Estos inmuebles suman más de 4.700 metros cuadrados de superficie, con un precio medio del metro cuadrado de 3.164 euros.
“Estamos satisfechos con la calidad y diversificación de los inmuebles adquiridos, y pensamos que se está asentando entre la población una nueva forma de monetizar la vivienda con un componente social, como es la que ofrecemos –y que, además, para el tipo de vendedor al que estamos enfocados, resulta más eficiente que la hipoteca inversa y la nuda propiedad-”, explica Luis de Ulíbarri, presidente de Almagro Capital.
Adicionalmente, la fórmula está teniendo gran acogida entre los inversores, ya que la compra a volumen de este tipo inmuebles hace que se minimice el riesgo. “El balance rentabilidad/riesgo es especialmente bueno. Pocas o ninguna alternativa de mercado ofrece nuestro rendimiento con tan poco riesgo. Tenemos un subyacente muy resistente (inmuebles en zona centro de Madrid) y a nivel de negocio no asumimos ninguno de los riesgos habituales del mercado -no hay riesgo de impagos, ni de rotación, ya que tenemos el mejor inquilino que se puede desear, que permanece en la vivienda y la siente como suya-”, explica Ulíbarri.
De izquierda a derecha, Alejandro Estebaranz y José Luis Benito. Foto: True Value. truevalue
Una nueva gestora ha sido registrada en España: se trata de True Value Investments, según se recoge en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Gestionará el fondo True Value, un fondo de inversión cuyo objetivo es obtener rentabilidades satisfactorias en cualquier entorno de mercado, para lo cual siguen la filosofía y los principios del value investing. “Nuestra estrategia reside en comprar negocios fáciles de entender, sin riesgos estructurales, dirigidos por personas hábiles en la colocación y retorno del capital, y que coticen a unos niveles razonables”, dicen en la web de la entidad.
A su vez, destinan una parte de la cartera a inversión en situaciones especiales ya que pueden proporcionar un rendimiento desligado del comportamiento general del mercado.
El porcentaje de situaciones especiales y value investing puede variar entre el 25% y el 75% sobre el total de la inversión.
Por otro lado, True Value mantendrá una posición holgada de liquidez para aprovechar las oportunidades de compra que pueda ofrecer el mercado.
Desde la entidad explican a Funds Society que, más allá del fondo True Value, la idea es ir trabajando en una gama de productos complementarios, con el objetivo de ampliar su oferta.
“Nuestro compromiso con el cliente es ofrecer la máxima calidad, transparencia y rigor. Los intereses de los clientes y de True Value están perfectamente alineados ya que el equipo gestor mantiene invertido en el fondo la mayor parte de su patrimonio”, destacan en la web sus asesores, José Luis Benito y Alejandro Estebaranz.
Pixabay CC0 Public Domain. ¿Continúan los problemas para la banca europea?
En opinión de Jacob Vijverberg, cogestor del Kames Global Diversified Income Fund, parte de Aegon Asset Management, los bancos europeos han unas escasas rentabilidades de inversión desde la crisis financiera y no parece que la situación vaya a cambiar a corto plazo. En este sentido, el cogestor se plantea hasta qué punto continúan los problemas para la banca europea.
Como explica Vijverberg, si en 2009 hubiésemos invertido 100 euros en bancos europeos, ahora mismo contaríamos con unos 120 euros, lo que equivale a una exigua rentabilidad del 1,5% al año; por comparar, incluso los bunds alemanes han generado rentabilidades más altas, de aproximadamente el 3,5% al año, en el mismo periodo. Y, desafortunadamente para los inversores, el gestor cree que las rentabilidades seguirán siendo pobres en el futuro próximo, ya que el sector bancario se enfrenta a diversos problemas.
Para empezar, Vijverberg menciona la avalancha de regulación financiera puesta en marcha desde la crisis, que ha elevado las exigencias de capital, erosionando la rentabilidad del capital de las entidades bancarias. “El aumento de las ratios de capital, que refuerza la resistencia de los bancos en momentos de crisis, resulta positivo para los depositantes y los contribuyentes pero se traduce en menores rentabilidades de capital para los inversores. Aunque los bancos obtienen aproximadamente la misma rentabilidad por sus activos que antes de la crisis, ahora esas rentabilidades deben repartirse entre un capital reglamentario más elevado”, explica.
El experto señala, además, que los bancos se enfrentan a una dura competencia. “Europa está demasiado bancarizada. Independientemente del dato que usemos, ya sea el número de oficinas, de empleados o los préstamos como porcentaje del PIB, hay demasiados bancos en Europa compitiendo por los mismos clientes, lo que presiona a la baja las comisiones y los ingresos por intereses. Las entidades también se ven amenazadas por las empresas de tecnología financiera o fintech que, aunque de momento no les han afectado mucho, probablemente ganarán terreno gracias, entre otras cosas, a la nueva regulación europea”, asegura.
Por otra parte, los márgenes financieros de los bancos se están reduciendo porque la diferencia entre los intereses que pagan por sus pasivos (principalmente, depósitos) y los que reciben por sus activos (préstamos e hipotecas) es cada vez menor. “Muchos bancos son conscientes de la precaria situación en la que se encuentran y están buscando fuentes de rentas adicionales, lo que está llevando a muchas entidades a ofrecer servicios de pago que no requieren capital, como el asesoramiento financiero o la gestión de activos. Sin embargo, en esos segmentos los beneficios también son limitados o se están reduciendo a consecuencia de la tecnología, la regulación o la presión sobre los costes”, sostiene Vijverberg.
En su opinión, resulta obvio que los mercados financieros son conscientes de que la banca se enfrenta a estos problemas y por eso el sector cotiza a múltiplos bajos. “Aun así, y pese a las bajas valoraciones, creemos que las acciones de bancos generarán rentabilidades decepcionantes en general. Por eso estamos siendo muy selectivos en nuestra exposición al sector ya que, pese a todos estos factores, hay algunas entidades que están logrando obtener rentabilidades más altas sobre los recursos propios gracias a unas ratios de costes más bajas y a una oferta digital más potente”, concluye el cogestor.
Foto cedida. Refinitiv, Iberian Property y uDA lanzan una app con noticias y análisis del mercado inmobiliario en España y Portugal
Refinitiv, anteriormente la unidad financiera y de riesgos de Thomson Reuters, junto con Iberian Property, UrbanData Analytics (uDA) y Confindencial Imobiliario, han lanzado una app para el mercado inmobiliario de España y Portugal que ofrece las últimas noticias y análisis detallados por ciudad y municipio.
La herramienta une a Eikon, la plataforma de análisis y datos del mercado financiero de Refinitiv, los conocimientos de la compañía de big data inmobiliaria uDA, en el mercado de España, e información del banco de datos portugués Confidencial Imobiliário.
Esta app proporciona noticias relacionadas con inversión inmobiliaria en España y Portugal, junto con los principales indicadores para la toma de decisiones en este mercado. Gestiona cuatro millones de datos semanales de más de 40 fuentes públicas y privadas. Al combinar estas fuentes de datos, los inversores, administradores de activos y analistas pueden ver el precio ofrecido, registrado, tasado y pagado por cada propiedad, además de otra información.
La app permite obtener análisis del mercado inmobiliario de ambos países con una visión local de la liquidez, volatilidad y dinámica de precios. También facilita a los usuarios información sobre el resultado de los gestores inmobiliarios líderes en España y Portugal, con información y noticias específicas del mercado financiero.
La aplicación está destinada a inversores inmobiliarios, inversores de capital privado, gestores de activos, inversores en NPL/REO, analistas de mercado, inversores en renta variable REIT y las socimis establecidas en España.
Foto cedidaCarlos Andrés, director de gestión y asesoramiento de Banca March, durante un encuentro informativo. Banca March apuesta por las megatendencias y la iliquidez como principales fuentes de rentabilidad
El mercado se ha recuperado rápidamente en 2019 de las correcciones registradas el año pasado, pero como recuerda una frase que se le atribuye a Albert Einstein, «Locura es hacer siempre lo mismo y esperar resultados diferentes». Bajo esta premisa, Carlos Andrés, director de gestión y asesoramiento de Banca March, insiste en que el agotamiento del ciclo económico actual obliga a invertir de forma distinta. «Las bolsas están reaccionando de manera opuesta a lo que sucede en la economía y con los beneficios empresariales debido al cambio radical del mensaje de los bancos centrales», ha afirmado durante un encuentro informativo.
La planificación de la cartera que recomiendan en este entorno varía, por tanto, tanto en el peso de cada activo como en la introducción de activos alternativos. Así, la renta variable y la renta fija concentrarían un 25% cada uno y se destinaría otro 50% a activos alternativos y liquidez (25% cada uno). En renta variable, desde Banca March buscan identificar sectores en los que sí tiene sentido invertir a medio y largo plazo como el segmento digital de la distribución o el entretenimiento. Por el lado de los activos alternativos apuestan por la inversión en megatendencias (revolución 4.0, sostenibilidad y demografia) y la coinversión en proyectos de economía real.
Sus propuestas de inversión se concretan en su servicio de gestión discrecional de carteras Next Generation, lanzado hace ahora siete meses y que acumula desde entonces una revalorización del 23%. Se trata de 23 fondos de inversión que capturan la rentabilidad de las tres megatendencias y que , por lo tanto, se exponen fundamentalmente al sector tecnológico, industrial y salud con una baja exposición al sector financiero y energético (petroleras). «El 40% de la rentabilidad alcanzado desde el lanzamiento de este servicio se explica con la tecnología, pero las otras dos tendencias explican el 20%, respectivamente».
La prima de la iliquidez de los proyectos de coinversión
Jugar la carta de la iliquidez es una de las estrategias de Banca March para arañar rentabilidad en un entorno de bajos tipos de interés e incertidumbre en los mercados. Como explica José Cloqueill, director de coinversión, «intentamos aprovecharnos de la prima de iliquidez para obtener rentabilidades por encima del mercado».
El inversor que participa en estos proyectos debe ser consciente y poder permitirse esta iliquidez, ya que el plazo medio para este tipo de inversión es de ocho años. El inversor solo podrá hacer líquida su inversión si existe otro inversor que le reemplaza y esto, como recuerda Cloqueill, «no hay garantía de que suceda». Al tratarse de proyectos de coinversión, Banca March participa en un 40% de ellos y existe una «alineación total con los inversores, pues entramos y salimos en las inversiones al mismo tiempo». Actualmente Banca March tiene 1.400 millones de euros en proyectos de coinversión, habiendo desinvertido ya más de 450 millones de euros con un efecto multiplicador de 2,3 veces por cada euro invertido.
Los proyectos de coinversión van desde la financiación privada, que representa un 15% del total y que constituye todo un nicho de oportunidad. «Los bancos han restringido algunas operaciones de financiación y se ha abierto un nicho para el capital privado», destaca Cloqueill. otro 10% corresponde el sector inmobiliario, aunque también en este caso «tratando de completar lo que las entidades financieras estamos dejando de hacer por la vía hipotecaria debido a una regulación cada vez más exigente», añade. Otros proyectos son el venture capital, la seguridad, la logística, las residencias de la tercera edad y hoteles.
Sobre el riesgo de la iliquidez para los inversores, Andrés considera que, «la liquidez está muy sobrevalorada. Cuando preguntamos a nuetros clientes si necesitan que el 100% de su cartera sea líquida en 24 horas nos dicen que no es necesario, pero sí quieren saber a cambio de qué».
Foto cedida. La CNMV ve necesario mejorar las pruebas de resistencia de los fondos de inversión ante shocks de liquidez
La CNMV considera que, tras la crisis financiera mundial, todavía subsisten retos importantes relacionados con la necesidad de culminar las reformas globales y su implementación a nivel nacional, así como de garantizar su sostenibilidad a largo plazo. Entre tales reformas la CNMV destaca, en el caso de la gestión de activos, la necesidad de continuar desarrollando y mejorando pruebas de resistencia que midan la capacidad de los fondos de inversión a la hora de soportar shocks de liquidez globales.
«La industria de la gestión de activos ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, lo que ha suscitado un gran interés por el análisis de los riesgos que su actividad puede tener para la estabilidad financiera. Su importancia en relación con determinadas clases de activos hace que una crisis en el sector de los fondos pueda amplificar los riesgos para los emisores, los inversores y las entidades financieras, y generar, en último término, un riesgo de tipo sistémico», señala la CNMV en este informe sobre su participación en la política macroprudencial.
El regulador destaca, asimismo, que uno de los focos de atención principales sobre estas instituciones reside en el posible desajuste de liquidez entre activos y pasivos, ya que la mayoría de los fondos de inversión ofrecen a los inversores una liquidez diaria (reembolsos), mientras que, al mismo tiempo, pueden invertir una parte considerable de sus recursos en activos con un grado de liquidez menor. «Si un fondo tuviera que afrontar grandes reembolsos, podría no ser capaz de vender activos con suficiente rapidez y sin experimentar grandes descuentos. Las ventas forzosas por parte de los fondos de inversión podrían afectar a otros agentes y desencadenar espirales de caídas de los precios en el mercado», añade.
¿Qué contempla la regulación?
La regulación, recuerda la CNMV, contempla algunas medidas para evitar, en la medida de lo posible, que los fondos experimenten dificultades en momentos de reembolsos significativos. En particular, se exige a la mayoría de los fondos de inversión el mantenimiento de unas ratios mínimas de liquidez y también se dispone de otros mecanismos como, por ejemplo, la suspensión temporal de los reembolsos.
Además, la regulación asigna explícitamente a las gestoras de los fondos funciones de monitorización y seguimiento tanto en lo que respecta a la composición y el riesgo de las carteras como al cumplimiento de los deberes con relación a sus clientes y partícipes. Por otra parte, los gestores de los fondos deben realizar pruebas de estrés relacionadas con el riesgo de mercado y el riesgo de crédito, así como pruebas de estrés de liquidez. Su objetivo es evaluar la capacidad de recuperación de los fondos de inversión, a nivel individual o sectorial, frente a shocks de reembolsos severos.
La CNMV cree que los supervisores pueden usar los resultados de las pruebas de estrés para evaluar la capacidad de recuperación de un fondo en particular. «Desde la perspectiva de la estabilidad financiera, si los fondos en su conjunto no son resilientes, los shocks de reembolsos podrían generar una gran presión de venta que los mercados no tendrían capacidad de absorber sin problemas, lo que provocaría ventas forzosas y espirales de precios a la baja», concluye este informe.
Foto: Jarle Refsnes . Mensajes mixtos e incendios forestales
El mercado está esperando que la política monetaria refuerce el estancamiento del crecimiento y extienda el ciclo, esto está creando una oportunidad de financiación barata para las empresas, algunas de las cuales tienen unas pobres posibilidades de inversión.
A principios de octubre de 2018, después de que el presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos Jerome Powell realizara una referencia infame a que la política monetaria “estaba muy lejos de ser neutral, el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años se incrementó en un 3,25% y los futuros sobre los fondos federales comenzaron a descontar múltiples subidas en los tipos de interés en el siguiente año.
Según apunta William J. Adams, director de inversiones de renta fija global en MFS IM, mucho ha cambiado el mercado en los meses siguientes. Las condiciones económicas en Estados Unidos se han desacelerado en respuesta al efecto compuesto de múltiples subidas por parte de la Fed en 2017 y 2018. El ajuste fiscal y la reforma impositiva proporcionaron un subidón de azúcar temporal, pero no pudieron enmascarar el debilitamiento de las condiciones económicas por mucho tiempo. La producción global respondió pobremente a una variedad de preocupaciones económicas y geopolíticas. La desinflación volvió a mostrar su cara más fea mientras que los aranceles y la retórica comercial hostil redondeó un desafiante primer semestre en 2019.
En ocho meses, el mercado de futuros pasó de predecir un ajuste significativo a anticipar una política acomodaticia agresiva. A mediados de julio, el mercado espera dos o tres recortes en las tasas de interés en este año -algo que comenzó ayer mismo- y por lo menos cinco recortes en total en este nuevo ciclo bajista de la Fed. Las tasas del Tesoro a diez años de Estados Unidos no han vuelto a ver unos rendimientos del 3% desde noviembre de 2018 se encuentran bailando cerca del precipicio del 2%. Los rendimientos mínimos previos a la administración Trump del 1,35% son mencionados con frecuencia en la retórica diaria del mercado. Los rendimientos negativos en las tasas de interés alrededor del mundo vuelven a ser comunes y de nuevo los bancos centrales globales están compitiendo en la parte acomodaticia.
Algunos argumentan que los tipos de interés globales nos están indicando algo: ¿estamos escuchando?
Los índices de renta variable en Estados Unidos se ubican cerca de sus máximos históricos mientras que varias medidas de volatilidad permanecen en niveles históricamente bajos. Los mercados de riesgo han únicamente bostezado. Los diferenciales de la deuda de grado de inversión y high yield, por ejemplo, se han ampliado únicamente un poco con respecto a los niveles más comprimidos de 2019, y este rendimiento va en contra del ritmo constante de tipos de interés al alza. Desde una perspectiva histórica, los mercados de crédito distan mucho de mostrar miedo o riesgo a una recesión en relación con los tipos de interés. Incluso la deuda de los mercados emergentes denominada en dólares, golpeada a diario por los titulares sobre las tensiones comerciales, se encuentra cerca de los niveles de compresión en los diferenciales de 2019.
De hecho, los mercados nos están diciendo algo: ¡los bancos centrales reinan en supremacía!
El mercado nos está diciendo de nuevo que los bancos centrales pueden reactivar el crecimiento estancado en una desaceleración económica, y que puede que incluso en las profundidades de una recesión. Los tipos de interés y los mercados de riesgo pueden estar mostrando señales mixtas, pero claramente están diciendo que los bancos centrales pueden extender con éxito el ciclo económico. De hecho, esto significa que los bancos centrales pueden servir de apoyo para los valores de los activos y de los activos financieros, a menudo, a expensas de la economía real. ¿Es esto algo bueno? ¿Un ciclo económico extendido realmente mejora las condiciones para todos o simplemente retrasa la inevitable desaceleración?
Un informe reciente elaborado por McKinsey Global Institute muestra que el 10% de las empresas que se sitúan en la cola de la economía destruyen tanto beneficio económico como el generado por el 10% que se encuentra entre los primeros puestos (1). En ese caso, el 10% de las empresas que se sitúan a la cola perdieron recientemente 1,5 veces más beneficio económico, de media, que la misma cohorte hace dos décadas. El estudio de McKinsey incluía 5.750 empresas cotizadas y se enfocaba en el beneficio económico como un modo de reflejar el valor económico creado por las actividades operativas y las inversiones de las empresas. Las empresas que participaban en el estudio representaron el 65% de las ganancias corporativas globales antes de impuestos en un periodo de 22 años. Claramente, el ciclo económico se ha extendido con éxito en comparación con los anteriores ciclos, pero es notablemente menos eficiente en ciertos aspectos.
MFS IM observa dinámicas similares en el mercado de deuda high yield de Estados Unidos. Muchos celebran las características sumisas que por defecto tiene el entorno posterior a la crisis financiera. Las estadísticas de impago suelen ser utilizadas como una aproximación a la calidad del crédito y de la salud del mercado y es percibida como una razón o excusa para perseguir el rendimiento en las partes más arriesgadas del mercado. Sin embargo, los impagos pueden ser menores simplemente por la abundancia de liquidez, no necesariamente por su eficiencia operativa. Muchos comentaristas se refieren a esta cohorte de crédito con un apodo mucho más cariñoso: zombis. Éstas son entidades emisoras de deuda high yield que están quemando más efectivo y beneficios económicos de los que obtienen y subsisten únicamente en la naturaleza menos exigente de la liquidez del banco central y de los flujos de fondos que persiguen un rendimiento insostenible.
¿Es realmente sorprendente que los bancos centrales a nivel global estén luchando por cumplir los objetivos de inflación? Quizás una política monetaria acomodaticia sin precedentes en aras de generar un ciclo económico históricamente largo está comenzando a funcionar en contra de sí misma.
En la opinión de MFS IM, los bancos centrales están creando una financiación barata para las empresas que buscan capital, algunas de las cuales representan unas pobres oportunidades de inversión. Otros permanecen a flote durante periodos prolongados de tiempo, ya que los mercados financieros soportan modelos de negocio no rentables. Es cierto que muchas entidades no se encuentran en estas circunstancias extremas, pero continúan disfrutando de una financiación barata que permite una amplia ingeniería financiera en forma de recompra de acciones, dividendos o una considerable actividad de fusiones y adquisiciones.
Esto está sucediendo en un contexto económico que es cada vez menos sensible a los movimientos en los tipos de interés, en especial en lo que concierne las condiciones de empleo, una opinión que sostiene el Banco de la Reserva Federal de Kansas City (2), entre otros. Dicho de otro modo, la eficacia de la política monetaria esta de nuevo en cuestión. Mientras que los activos claramente se benefician, el flujo a través de los empleados y la economía real es a menudo limitado.
Para concluir, William Adams hace una referencia a los incendios forestales del titular de esta nota y la analogía que implica para los ciclos económicos. Los incendios forestales son peligrosos, feos y destructivos. Sin embargo, si son contenidos y manejados adecuadamente, también realizan una importante función en la salud del bosque. Los árboles muertos y en descomposición se convierten en cenizas y los nutrientes regresan al suelo. La maleza espesa y los desechos se queman, permitiendo que llegue más luz solar a las plantas saludables. Lo que es más importante aún, los árboles robustos y establecidos en el bosque ya no necesitan competir con los árboles más débiles por recursos. En otras palabras, no hay efecto de desplazamiento (crowding out).
Las recesiones son igualmente peligrosas y desagradables, pero pueden jugar un papel análogo en la economía. Cierta destrucción económica puede resultar saludable, especialmente si las inversiones más débiles ya no están desplazando los recursos limitados y los balances de deuda son capaces de encontrar niveles más saludables y sostenibles. En este contexto, los gestores activos de inversión pueden desempeñar un papel valioso: gestionar proactivamente el riesgo y asignar el capital de una forma eficiente.
Anotaciones:
(1) McKinsey Global Institute, “Lo que todo CEO necesita saber de las empresas “superstar” abril 2019
(2) Jonathan Willis y Guangye Cao, “¿Se ha vuelto la economía estadounidense menos sensible a las tasas de interés?”, Banco de la Reserva Federal de Kansas City. Perspectivas económicas, segundo trimestre de 2015. Disponible en KansasCityFed.org.
Pixabay CC0 Public Domain. Cómo gestionar los tres riesgos que afronta la renta variable global
La renta variable global mejoró en el segundo trimestre del año, pero el camino fue accidentado. Para AllianceBernstein, los informes de los ingresos futuros aportarán las claves de cómo las empresas están afrontando los crecientes desafíos –desde la guerra comercial hasta el crecimiento global- y cómo deberían posicionarse los inversores.
Los activos estadounidenses y europeos registraron un rendimiento por encima del índice de referencia, mientras que los de Japón y China descendieron. Los sectores financieros y cíclicos lideraron las ganancias y las acciones ‘value’ quedaron por detrás de las ‘growth’. El MSCI World Index cerró el trimestre con un incremento del 3,6% y ha subido un 16,7% en la primera mitad del año en términos de divisa local.
¿Por qué los mercados son tan volátiles?
En un reciente análisis, AllianceBernstein apunta que, pese a las sólidas ganancias de la primera mitad del 2019, los patrones de rendimiento han sido inestables. Los primeros cuatro meses de beneficios fueron interrumpidos por las fuertes caídas de mayo, cuando los miedos a una guerra comercial regresaron para volver a marcar el sentimiento del mercado.
Para la gestora, la reciente volatilidad se debe a la creciente preocupación de que la economía global se encuentra en las etapas finales del ciclo después de una década de crecimiento estable. Mientras, los mercados financieros están lanzando mensajes contradictorios a los inversores y, al tiempo que las acciones alcanzan nuevos máximos, la baja rentabilidad de los bonos refleja el pesimismo de las perspectivas.
Tres riesgos de inversión
En este contexto, AllianceBernstein ha identificado tres riesgos que pueden afectar a las inversiones y que es fundamental tener en cuenta:
1. La política: la disputa comercial EE.UU.-China se lo está poniendo muy difícil a las empresas a la hora de invertir para el futuro. Por ello, AllianceBernstein busca compañías que demuestren un buen equilibrio entre la gestión de la incertidumbre y las necesidades de inversión a largo plazo.
“Las preocupaciones comerciales van más allá de las víctimas obvias de los aranceles: las cadenas de distribución en el sector automovilístico y de la tecnología merecen una especial atención”, afirma, ya que aquellas empresas que se encuentran en enlaces clave de los procesos de fabricación podrían mostrar las primeras repercusiones de la guerra comercial.
Más allá de las disputas comerciales, el riesgo político también ha aumentado en otros sectores. Por ejemplo, la gestora sigue de cerca el Brexit por el shock que puede suponer para algunas empresas, así como la reforma sanitaria estadounidense, ya que los cambios normativos podrían impactar en los precios de los medicamentos y en la rentabilidad de las aseguradoras.
2. La macroeconomía: lo más probable es que el crecimiento global se mantenga lento. Determinados sectores cíclicos, como el automovilístico o el financiero, pueden dar pistas tempranas de las tendencias macroeconómicas, por eso AllianceBernstein sigue de cerca los informes bancarios en busca de muestras de deterioro del crédito.
En las industrias orientadas al cliente minorista, las tendencias de ventas pueden ayudar a identificar áreas de debilidad. “Por otro lado, aquellas empresas que registran sólidas ventas en un entorno económico más complicado pueden contar con poder de fijación de precios, una prueba de su resistencia ante una crisis cíclica”, señala la gestora.
3. Los tipos de interés: mientras que los mercados buscan en los tipos de interés señales de la economía y del atractivo de las acciones, los bancos sienten más directamente el impacto de los movimientos en los tipos. Ahora, con los tipos cayendo de nuevo, los bancos podrían tener que luchar para cobrar más por los préstamos, lo que perjudicaría a sus ingresos por intereses. Según la gestora, aquellos que logren seguir generando crecimiento en sus préstamos podrán soportar esta presión en los márgenes.
A corto plazo, los tipos bajos por más tiempo podría dar un respiro a las empresas que se han endeudado considerablemente en los últimos años. “Pero no pierdas de vista el balance: los tipos bajos no pueden ser una excusa para que una empresa se endeude en exceso, especialmente en un entorno de crecimiento débil”, advierte AllianceBernstein.
Cómo mantenerse invertido
Pese a estos riesgos, la gestora ve buenos motivos para mantener las inversiones en acciones. “Los beneficios corporativos son fuertes y las valoraciones de la renta variable, aunque no son baratas, tampoco están demasiado estiradas. Los estímulos y los tipos de interés suprimidos deberían respaldar las ganancias de la renta variable, incluso si se modera su crecimiento”, señala.
Asimismo, tampoco ha visto que se repita lo ocurrido en los ciclos anteriores, cuando los excesos en la tecnología y los préstamos subprime crearon burbujas insostenibles que, al estallar, desataron el caos. “Por eso no anticipamos un shock del mercado y pensamos que las acciones pueden generar ganancias moderadas”, asegura.
Con todo, antes que tratar de predecir los resultados políticos y macroeconómicos, AllianceBernstein cree que los inversores deberían centrarse en neutralizar los riesgos impredecibles a través de análisis cuantitativos y de los fundamentales para retirar de sus carteras valores demasiado expuestos a amenazas arbitrarias.
“La investigación también debería dirigirse a identificar empresas que controlan sus propios destinos, se benefician de fuentes resistentes de crecimiento no cíclico y se apoyan en equipos de gestión con experiencia”, sentencia.
. Costa Rica: ¿el próximo laboratorio fintech de América Latina?
Según un reciente estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) , en los últimos dos años el sector fintech en Costa Rica creció cerca de 400%, aunque todavía se encuentra muy atrás de ecosistemas más maduros en otros países de la región. Hay condiciones favorables para su expansión, pero el financiamiento y la regulación son algunos de los elementos a potenciar. ¿Qué hace falta para que el país se convierta en próximo laboratorio fintech de la región, en el que los emprendimientos prueben y ajusten sus soluciones?
La tecnología ha sido clave para el desarrollo del sector financiero en América Latina y el Caribe (ALC) y en los últimos años está provocando una verdadera revolución, gracias al surgimiento de startups que están creando soluciones financieras digitales innovadoras y centradas alrededor de las necesidades de los ciudadanos. Estas compañías son mejor conocidas como fintechs.
En Costa Rica, el ecosistema Fintech está todavía en un estado inicial de desarrollo con un número reducido de startups y limitada penetración en los mercados financieros. Sin embargo, esa realidad está pronta a cambiar pues en los últimos 2 años la cantidad de empresasde este sector en el país creció 400% y la tasa de supervivencia fue del 100%. Es previsible que esta tendencia siga acentuándose en los años venideros debido a que Costa Rica cuenta con varias condiciones favorables para su expansión.
Para empezar, los emprendedores costarricenses han mostrado ser creativos y resilientes, capaces de adaptar sus modelos de negocio ante las oportunidades y las restricciones del mercado. Igualmente, la relevancia de la tecnología en la vida del costarricense está por encima del promedio de ALC y es un factor fundamental para impulsar este sector.
En el último año, 60% de los adultos hizo o recibió pagos a través de un dispositivo móvil cuando en ALC fue 45%. El 18% accedió a una cuenta bancaria a través de un dispositivo móvil, mientras que en la región fue 11%. Además del liderazgo en la penetración móvil, el país se ubica en una posición privilegiada en los rankings de innovación global, y con capacidad para formar, atraer y retener talento humano, convirtiéndolo en terreno fértil para el surgimiento de este tipo de empresas.
Estudio Fintech en Costa Rica
Los datos mencionados se incluyen en un reciente estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Finnovista: Fintech en Costa Rica: Hacia una evolución de los servicios financieros, el cual brinda un panorama del ecosistema fintech e invita a aprovechar las cualidades del país para convertirse en un referente de esta naciente industria en la región y que puede ser un factor fundamental para mejorar la competitividad y la calidad de vida de sus ciudadanos.
La falta de acceso a servicios financieros y el escaso apoyo al emprendimiento constan como los principales obstáculos que afectan a los empresarios costarricenses. Entre los desafíos más importantes destaca el margen de intermediación financiera que es el más alto de ALC y que se traduce en elevados costos para los sujetos de crédito.
Adicionalmente, existen asimetrías de información en el mercado financiero que dificultan el acceso al crédito y retos para generar proyectos bancables. Finalmente, existe una limitada presencia de incubadoras y aceleradoras, y una baja oferta de capital de riesgo. En el propio sector de la fintech, por ejemplo, solamente el 10% de estas empresas acceden a inversionistas ángeles mientras que en ALC, es más del 50%.
La industria fintech puede aportar a cerrar estas brechas de financiamiento, enfrentar algunos de estos retos y contribuir a democratizar el acceso a servicios financieros para los costarricenses. Para ello, deberá contar con un marco legal y regulatorio que contribuya a la innovación y el desarrollo de este sector, a la vez que conserve la solidez y confiabilidad de los mercados financieros.
Regulación fintech
En términos de regulación, los países que han alcanzado el desarrollo de esta industria y hoy se posicionan como líderes a nivel mundial, como Singapur y Reino Unido, y aquellos más cercanos, como México o Colombia, han fortalecido este ecosistema focalizándose en una regulación acorde con la era tecnológica que vivimos.
Es esencial lograr una regulación global que considere a la internacionalización como el estado de madurez de una Fintech, promoviendo conceptos de experimentación regulatoria como los sandbox pero que a su vez no menoscabe ni limite el potencial de esta industria.
Costa Rica puede ser el próximo laboratorio Fintech en ALC en el que emprendimientos de la región prueben y ajusten sus soluciones. Esto requerirá de políticas públicas que articulen los esfuerzos de todos los actores (reguladores, programas de apoyo, inversionistas, sector financiero, etc.) hacia un objetivo común. Por su parte, las Fintech ticas deberán desarrollar soluciones que respondan a desafíos globales para que puedan internacionalizarse en mercados más amplios.
En suma, nuestra vida financiera está cambiando aceleradamente y no parece que pueda dar marcha atrás. La correcta combinación de regulación, apoyo e innovación asegurará que este cambio sea en beneficio de la inclusión financiera no solo en Costa Rica sino en toda la región.
Foto cedida. La desaceleración económica se mantiene en Latinoamérica y el PIB de la región crecerá a 0,5% en 2019
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) espera que durante 2019 el crecimiento económico de la región mantenga una trayectoria descendente, debido a un contexto internacional con mayores incertidumbres y complejidades, y a un débil comportamiento de la inversión, las exportaciones y el consumo. Así lo señala el informe anual Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2019, dado a conocer hoy por la Secretaria Ejecutiva del organismo de las Naciones Unidas, Alicia Bárcena, en una conferencia de prensa realizada en Santiago de Chile.
Según el reporte, la región crecerá este año solo un 0,5%, cifra inferior al 0,9% anotado en 2018. Este desempeño es atribuido a los efectos de un debilitamiento sincronizado de la economía global, lo que ha implicado un escenario internacional desfavorable para la región. Asimismo, en el ámbito interno, el bajo crecimiento se debe al poco dinamismo exhibido por la inversión, las exportaciones y a una caída del gasto público y del consumo privado.
A diferencia de años anteriores, en 2019 la desaceleración será generalizada y afectará a 21 de los 33 países de América Latina y el Caribe. En promedio, se espera que América del Sur crezca 0,2%, América Central 2,9% y el Caribe 2,1%.
“La región enfrenta un contexto externo con mayores incertidumbres y complejidades crecientes: menor dinamismo de la actividad económica mundial y del comercio global; mayor volatilidad y fragilidad financiera; cuestionamientos al sistema multilateral y un aumento en las tensiones geopolíticas”, señaló Alicia Bárcena.
De acuerdo con el Estudio Económico 2019, el espacio fiscal se ha visto restringido por niveles de ingresos insuficientes para cubrir el gasto, lo que deriva en déficits y en un incremento en el endeudamiento en los últimos años. Además, los efectos de la creciente volatilidad cambiaria y de las mayores depreciaciones limitarían la posibilidad de los bancos centrales de la región para profundizar políticas de estímulo a la demanda agregada, a lo que se suma el hecho de que los condicionantes estructurales acentúan la vulnerabilidad externa y no ayudan a dinamizar el crecimiento (estructura exportadora centrada mayormente en bienes primarios y caída tendencial de la productividad).
Según la CEPAL, se requiere expandir el espacio de políticas para hacer frente a la desaceleración y contribuir al crecimiento económico, con medidas tanto en el área fiscal, como en la monetaria y relacionadas con la inversión y la productividad.
En materia fiscal se necesita reducir la evasión tributaria y los flujos financieros ilícitos, impulsar la adopción de impuestos a la economía digital, medioambientales y relacionados a la salud pública, y reevaluar los gastos tributarios para alinearlos hacia la inversión productiva.
En el área monetaria, se necesita promover el crecimiento económico sin comprometer la estabilidad cambiaria y de precios, mientras que en materia de inversión y productividad es imprescindible elevar la participación de los sectores intensivos en conocimientos en la estructura productiva, por medio de un papel más activo de la inversión pública y privada; reorientar las inversiones hacia los sectores de mayor dinamismo; y adoptar políticas de estímulo que tengan impactos en términos de innovación, aprendizaje y empleos de calidad.
La segunda parte del Estudio Económico 2019 analiza los cambios estructurales ocurridos en el sistema financiero internacional en los instrumentos y agentes con posterioridad a la crisis global de 2007-2008, desde la perspectiva de la región.
El informe plantea que el mercado de bonos ha ganado importancia relativa respecto al sistema bancario. También muestra que se han intensificado los niveles de concentración, interconectividad y prociclicidad. Además el nivel de endeudamiento global se generaliza y registra niveles récord (320% del PIB), en un contexto de bajo crecimiento.
Con el fin de hacer frente a estos desafíos se plantea, por una parte, ampliar y estandarizar el espectro de los indicadores de vulnerabilidad. Por otra parte, se trata de avanzar hacia una regulación macroprudencial más amplia y homogénea que abarque no solo al sector bancario formal sino a todos los agentes financieros –incluyendo el sector bancario en la sombra- así como a los distintos instrumentos, indica el documento.