Con miras a ampliar el acceso a su estrategia de renta variable india emblema, la gestora UTI International anunció que incorporaron el fondo UTI India Dynamic Equity Fund (IDEF) a la plataforma de fondos mutuos NSCC Fund/SERV.
Según informaron a través de un comunicado, este se trata de un vehículo UCITS,distribuido a lo largo de América Latina. Ahora, la firma apunta a ampliar el acceso del público inversionista al fondo, apalancando a la que describen como “una de las plataformas de transacción de fondos mutuos más confiables de la industria”.
Así, inversionistas y socios latinoamericanos pueden acceder a este vehículo directamente a través de Pershing.
La estrategia, según describe su factsheet, cerró junio con activos por 991 millones de dólares y se enfoca principalmente en acciones indias orientadas al crecimiento. El fondo invierte en una cartera de 53 compañías, con las principales apuestas sectoriales en servicios financieros (con una ponderación de 24,7% a junio), consumo discrecional (19,4%) y tecnología de la información (15,5%).
Por su parte Fund/SERV es una plataforma operada por la National Securities Clearing Corporation (NSCC), una subsidiaria de la Depository Trust & Clearing Corporation (DTCC). La compañía ofrece un sistema de proceso de órdenes –centralizado y automatizado– entre gestores de fondos y distribuidores, a nivel global.
“Este desarrollo marca un hito clave en aumentar la eficiencia operacional y simplificar el acceso a una de nuestras estrategias de renta variable india más seguida en la región”, indicó UTI en su nota de prensa.
Foto cedidaHumberto García de Alba, CEO de BBVA GWA
BBVA tiene un objetivo agresivo de crecimiento en global wealth, y la unidad de Estados Unidos ocupará un rol muy relevante, aportando la mayor cantidad del crecimiento de activos bajo gestión, le aseguró a Funds Society, en una entrevista exclusiva, Humberto García de Alba, nuevo CEO desde mediados de mayo último de BBVA Global Wealth Advisors (BBVA GWA), con sede central en Miami.
El banco de origen español comenzó un nuevo ciclo estratégico de cinco años, y BBVA GWA tiene como objetivo “multiplicar por varias veces” sus AUMs hacia 2029, indicó. “Estados Unidos va a jugar un papel clave por su importancia en la región y por ser el mercado que es. El objetivo es crecer mucho y rápido”, anticipó el ejecutivo.
Apalancado en sus tres plataformas de global wealth (Suiza, España y Estados Unidos), BBVA ofrece a sus clientes latinoamericanos soluciones complementarias e integrales, a través del trabajo de equipos locales e internacionales de Wealth Planners, Investment Counselors y Financial Advisors.
Con este esquema, BBVA GWA planea ampliar y diversificar “de forma relevante” su base de clientes latinoamericanos de alto patrimonio. Actualmente, el 95% son mexicanos, aunque están sumando clientes de Perú y Colombia; pronto ganarán presencia también en Uruguay, afirmó el CEO en la entrevista.
El CEO anunció que la unidad está lanzando ahora la gestión discrecional, con un equipo de inversiones encabezado por Víctor Piña, CIO de BBVA GWA. Sin embargo, el peso del negocio de advisory es relevante, según aseguró García de Alba, ya que “el cliente latinoamericano quiere mantener esa decisión final sobre su patrimonio en un porcentaje relevante; es un cliente que tiene poca tendencia a ceder la discrecionalidad”, reconoció.
Una oportunidad a la vista
“Hay una oportunidad muy clara para BBVA en el negocio de Wealth, ya que el cliente latinoamericano, por múltiples causas, tiene una parte relevante de su patrimonio financiero fuera de su país de origen. En el contexto actual, las distintas unidades internacionales dirigidas hacia este tipo de cliente tienen una alta prioridad”, explicó el ejecutivo.
“BBVA viene de apostar con fuerza al negocio de Wealth durante el ciclo anterior. El banco está muy posicionado en España, Turquía, Suiza y Portugal en Europa, y en América Latina tiene una presencia local muy relevante, especialmente en México, Perú, Colombia y Uruguay”, señaló.
En Estados Unidos, la presencia de BBVA en el negocio de Wealth Management internacional tiene 30 años de historia, solo que vivió un paréntesis a raíz de la venta en 2021 de BBVA Compass a PNC Financial Services hasta la reapertura de la oficina de BBVA GWA en Miami dos años más tarde. En Suiza, esta unidad lleva ya 50 años; en España, este tipo de servicio es relativamente nuevo para el banco.
Un esquema para crecer
“Nosotros estamos creciendo a velocidades muy rápidas”, describió García de Alba a Funds Society, al tiempo que explicó que por temas tanto regulatorios como prácticos y logísticos, colaboran «estrechamente» con los banqueros locales del Grupo BBVA, «porque consideramos importante la relación de todos los días de confianza con nuestros clientes”.
De nacionalidad mexicano, el nuevo CEO lleva más de dos décadas en el grupo español. “Lo que hemos construido en estos años es que esa relación de confianza sea fácilmente expandible hacia lo internacional», señaló, porque esta relación con el banquero local facilita la comunicación y el acceso del cliente a los especialistas y las soluciones globales que GWA ofrece desde sus plataformas en EE.UU., Suiza y España. «Hemos construido los canales, los medios, las plataformas, para que esa comunicación se dé de forma muy fácil y muy rápida”, detalló.
BBVA GWA ofrece a sus clientes una estrategia única global que es abordada en tres capas, explicó el ejecutivo. “Tenemos el área de Wealth Planning, como una guía para soluciones familiares en situaciones como sucesiones, fideicomisos, trusts, etc. Luego, tenemos la figura del Investment Counselor desde hace cerca de 20 años. Se trata de un especialista dedicado el 100% de su tiempo al tema de inversiones. Y en el centro de nuestra propuesta está nuestro Relationship Manager, nuestro asesor local o internacional, dependiendo de la figura que exista en cada sitio. Entonces, con todo ese armado estructural es como cubrimos al cliente” de alto patrimonio.
García de Alba también ponderó el hecho de que BBVA GWA está constituido como RIA, por lo que el deber fiduciario ayuda a que exista una mayor alineación de intereses con el cliente. “Creo que el área de oportunidad más grande que tiene BBVA en el negocio de Wealth es en este momento en la parte internacional”, aseguró el CEO.
“Localmente, tenemos mucha confianza en este negocio. Vemos una oportunidad de crecimiento de multiplicar varias veces los AUMs. Hemos construido el modelo, tenemos a la gente y equipos muy potentes. Tenemos una oportunidad de recorrido muy relevante, y creo que tenemos todas las bases para hacerlo”, concluyó.
Fitch Ratings acaba de publicar una nota en la que le echa un vistazo al sector de las aseguradoras latinoamericanasen el marco del aumento de los aranceles estadounidenses. Y las primeras conclusiones son que las entidades del sector son robustas: «Se espera que las calificaciones de las aseguradoras latinoamericanas resistan los posibles efectos secundarios de un menor crecimiento económico derivado de la guerra comercial en curso y los aranceles resultantes, incluyendo un menor crecimiento de las primas y una mayor inflación de costos», señala la calificadora.
México será el país más afectado por los cambios en la política estadounidense en el marco de un crecimiento internanual positivo para el sector, aunque más lento, de las primas para las aseguradoras latinoamericanas en 2025, debido a la estabilización de precios y suscripción.
«Una menor inflación y un crecimiento económico moderado podrían impulsar ciertas líneas de negocio, como los seguros de crédito y de vida crédito, al tiempo que reducen los costos de siniestros. Sin embargo, aún se pueden esperar aumentos de tarifas para ciertas líneas de negocio con reclamos catastróficos o donde la inflación de reclamos supera la inflación general, como los seguros de salud», dice la nota de la clasificadora de riesgos.
Fitch prevé un crecimiento moderado del PIB regional en 2025, con un menor crecimiento relativo en México y Brasil, parcialmente compensado por un mayor crecimiento en Argentina. Sin embargo, el sector de seguros no vida podría enfrentar un aumento significativo en los costos debido al aumento de las tasas de interés, dada la mayor inflación, así como al riesgo cambiario. Las interrupciones en la cadena de suministro también podrían afectar los ramos de seguros de motocicletas y daños. El seguro de vida se vería algo menos afectado, gracias a la estabilidad de las inversiones en renta fija, pero aún sufriría los efectos de un menor crecimiento y las dificultades de suscripción.
En Brasil, las dificultades económicas podrían reducir la demanda de seguros de vida, mientras que el seguro no vida podría enfrentar impactos moderados por el aumento de los costos de reparación (seguro de automóviles). En Chile, el seguro de vida se mantiene estable a pesar de la posible volatilidad del mercado, mientras que el seguro no vida podría verse afectado por los tipos de cambio y los problemas en la cadena de suministro. Colombia y México probablemente experimentarían tendencias similares, con los sectores no vida más expuestos a la inflación y las presiones económicas. Se espera que Perú, Panamá y Uruguay experimenten efectos comparables, concluyeron.
Foto cedidaCarlos Ruiz de Gamboa, Executive Vice President de Santander Corporate & Investment Banking Chile
Con el inicio de agosto empezará un nuevo ciclo para la unidad de Santander Corporate & Investment Banking en Chile, con un nuevo liderazgo. Y es que el banco de capitales españoles reclutó a Carlos Ruiz de Gamboa, un ejecutivo con más de tres décadas de trayectoria en la banca privada, quien ocupará el cargo de Executive Vice President.
Según informaron a través de un comunicado, el profesional iniciará sus nuevas funciones a partir del 1 de agosto de este año. Así, Ruiz reemplaza a Andrés Trautmann, que dejó el cargo para tomar el mando de la rama chilena de Santander, como CEO y Country Head.
Antes de unirse al grupo de matriz española, el ejecutivo fue parte de la boutique de finanzas corporativas Tyndall Group, que ofrece asesoría y soluciones estratégicas a medida a clientes de toda la región. Ahí pasó una década y fue socio.
Con todo, Ruiz suma más de 30 años de trayectoria en la industria financiera local, con experiencia en banca de inversión, mercados globales, renta fija, finanzas corporativas y gestión de riesgos. En su carrera, ha ocupado diversos cargos de liderazgo en Latinoamérica y Estados Unidos. El grueso de su carrera –25 años– lo desarrolló en J.P.Morgan, donde alcanzó el cargo de Managing Director.
Su llegada a Santander CIB Chile, informaron en la nota de prensa, refuerza la “apuesta del banco por seguir ampliando su propuesta de valor para clientes corporativos e institucionales con una mirada global”.
“Estoy entusiasmado de iniciar este nuevo capítulo como Head de Santander CIB en Chile. Espero trabajar con nuestro excepcional equipo para entregar soluciones de talla mundial que soporten las ambiciones de nuestros clientes, mientras seguimos construyendo alianzas de largo plazo fuertes y reforzando el liderazgo de Santander en la región”, indicó el profesional en una gráfica compartida por el banco en LinkedIn.
De la mano de una mayor actividad de fusiones y adquisiciones (M&A), el ecosistema de firmas de asesoría de inversión registradas (RIAs, por sus siglas en inglés) ha madurado, desarrollando nuevas estrategias, productos y, por consiguiente, oportunidades de crecimiento. Es esta dinámica, según señaló la firma de estudios Cerulli Associates, la que ha llamado la atención de las grandes de firmas de private equity, elevando el interés en participar del auge de este negocio.
El documento, titulado “The Cerulli Edge—The Americas Asset and Wealth Management Edition”, destacó que hay más de 18.000 RIAs enfocadas en inversionistas retail, aumentando el potencial de crecimiento y escala para las firmas. Según recalcaron a través de un comunicado, nuevos jugadores están entrando al mercado, incluyendo algunos de los inversionistas de capital privado más grandes. La meta: acceder a estos canales, de creciente importancia.
Hace cinco años, destacó la firma, la relación de las firmas de private equity con los canales RIA era limitada a las compañías de mayor nivel. Sin embargo, con cada vez más oportunidades en el mercado, más inversionistas buscan desplegar capital para ayudar a las RIAs a crecer. El resultado, según Cerulli, es que ha aumentado la competencia por las empresas de asesoría que crecen más rápido, creando situaciones de múltiples oferentes y negocios de mayor tamaño.
Además, pese a las tasas de interés más altas y la baja del mercado en 2022, las valorizaciones del sector se mantienen altas.
La actividad, de paso, no está efervescente sólo en el segmento de grandes compañías, agregaron. Si bien los mega-negocios representan las significativas oportunidades –todavía crecientes, en la visión de Cerulli– para el capital privado en los canales RIA, estos inversionistas siguen siendo “muy activos” en segmentos con un menor AUM, captando empresas desde 2.000 millones y 3.000 millones en activos.
Considerando el tamaño del mercado, la firma de servicios financieros recalcó que la tendencia tiene espacio para seguir desarrollándose.
Apoyo y competencia
Considerando este mayor interés en el sector, desde Cerulli recalcan que los inversionistas de private equity deben agregar valor de forma significativa para ayudar a sus carteras de RIAs a crecer rápidamente.
“El interés core en RIAs sigue constante, con ingresos estables respaldados por relaciones con los inversionistas apegadas, un área de alto crecimiento de gestión patrimonial y un mercado compuesto predominantemente por jugadores más pequeños y dispares”, indicó Stephen Caruso, Associate Director de Cerulli, a través de la nota de prensa.
“Para apreciar mejor ese potencial de crecimiento, sin embargo, los inversionistas deben estar preparados para ayudar a las RIAs de su portafolio, lo que puede incluir apoyar transacciones de M&A subsiguientes, guiar al equipo ejecutivo en períodos de cambio o desarrollar la marca, como comprador”, agregó.
Debido al atractivo del espacio RIA, señalan desde la firma de estudios, las compañías de capital privado se enfrentan a una mayor competencia con los inversionistas minoritarios y compañías que ofrecen crédito privado.
Los minoristas, en particular, son participantes experimentados de la industria, con horizontes más largos para el capital. “Los inversionistas minoritarios tienden a ser más pacientes en su estilo, lo que le permite a las RIAs desarrollarse sin la presión de crecer lo suficiente para una salida”, explicó Caruso.
Además, la industria del crédito privado también entró al ring, dándole un respaldo valioso a las firmas orientadas al crecimiento. “El crédito privado es cada vez más atractivo para los canales RIA, como una forma de capital que no diluye. A medida que las firmas sopesan el costo del capital, aquellos que quieren mantener el control tienen una opción adicional, mientras más proveedores entran al mercado”, en palabras del ejecutivo.
Desde hace varios años la inclusión financiera en México se ha vuelto una de las prioridades tanto en el sector público como privado. Si bien los rezagos todavía son evidentes, es innegable que existen avances al respecto.
En el sistema financiero del país, concretamente el bancario, la institución más grande del país, BBVA es una de las más aventajadas al respecto, su informe denominado «La inclusión financiera digital muestra avances en 2024», reporta que solo el año pasado la digitalización permitió que el 8,5% de los usuarios de productos de ahorro y el 12,2% de los usuarios de crédito contrataran su último producto mediante una aplicación de celular o página de internet de la institución financiera.
También, en 2024, la población en localidades urbanas utilizó relativamente más los canales digitales (app o página de internet de la institución) para la contratación del último producto de ahorro (9,4%) y de crédito (13,4%) que la población en localidades rurales (6,3% y 8,4%, respectivamente).
BBVA informa que entre 2021 y 2024, se registraron aumentos relevantes en la contratación digital del último producto en zonas urbanas: +5,4 puntos porcentuales para productos de ahorro y +8,3 puntos porcentuales para productos de crédito.
En contraste, en zonas rurales el crecimiento fue más moderado: +4,0 puntos y +5,3 puntos, respectivamente. Este comportamiento de crecimiento desigual genera que la brecha se vaya ampliando entre este tipo de localidades.
Sin embargo, BBVA reconoce que el uso cotidiano de medios digitales para pagos sigue siendo limitado. Por ejemplo, en 2024 sólo el 4,4% de los adultos reportó usar transferencia electrónica o por aplicación de celular con mayor frecuencia para compras de hasta 500 pesos, y apenas el 7,6% para compras mayores a 500 pesos.
El rezago, de acuerdo con el análisis de BBVA, está relacionado con el ecosistema en el que se desarrollan las transacciones. Por ello, es fundamental fortalecer no sólo la inclusión financiera de las personas, sino también la de las empresas, asegurando que estas últimas cuenten con las capacidades necesarias para aceptar pagos digitales por sus productos o servicios.
Los pilares de la inclusión financiera
De acuerdo con el reporte de BBVA, la definición de inclusión financiera en México está basada en cuatro pilares:
El acceso;
El uso: en ambos casos tanto en el punto uno como en el dos, se refiere a productos financieros formales como cuentas, seguros, créditos y Afores);
Regulación apropiada (para garantizar esquemas de protección al consumidor);
Competencias económico-financieras (de los usuarios).
BBVA explica en su análisis que tradicionalmente el acceso se ha vinculado a la cobertura del sistema financiero medida por su infraestructura física (sucursales, terminales punto de venta, cajeros automáticos y corresponsales).
Sin embargo, la combinación de internet , dispositivos tecnológicos —computadoras, tabletas y teléfonos inteligentes— y una regulación adecuada ha abierto, no sólo otra vía de “acceso”, sino también de “uso”, a partir de los canales financieros digitales (principalmente páginas de internet o aplicaciones).
Hay avances, pero falta mucho
BBVA pone el acento en los avances de la inclusión financiera en el país, pero también en lo mucho que falta por avanzar, así como en algunos aspectos como la interpretación cotrrecta de las cifras que arroja el análisis.
Por ejemplo, el banco reconoce que sus resultados relacionados con el indicador de contratación por medios digitales podrían estar subestimados debido a que hay una proporción de población que contestó que no contrató de manera digital, pero una causa fue por no haber tenido la opción, Un buen indicador debería tomar un período en el que todos los que contratan deciden entre canales tradicionales o canales digitales; Sin embargo, se aprovecha la información para analizar el desempeño de este indicador.
BBVA anticipa que será inevitable el avance en la digitalización e inclusión de los clientes en las zonas rurales, el argumento es de llamar la atención: «Es de esperar que en algún momento la población en localidades rurales tiendan a hacer más uso de canales digitales para la contratación del último producto financiero, que las urbanas, principalmente por los costos que conlleva moverse hacia los puntos de contratación tradicional; por ejemplo, llegar a una sucursal toma 38,3 minutos en promedio si se está en una localidad rural y 16,0 minutos si se está en una localidad urbana», explica la institución bancaria.
Sin embargo, los resultados de la Enif 2021 y 2024, indican que, considerando a una localidad rural como aquellas con menos de 15 mil habitantes (CNBV, 2025), las localidades urbanas tienen relativamente un mejor desempeño en la contratación del último producto de ahorro y de crédito por medios digitales, respecto de las localidades rurales.
La gran conclusión consiste en que los avances son relevantes, en un mercado que tiene muchas oportunidades para la inclusión financiera como el de México, y que por lo tanto también representa el gran reto de abatir a la brevedad el enorme rezago todavía vigente.
Luego de la nueva amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el sentido de imponer aranceles del 30% a México, a partir del 1 de agosto, los analistas tratan de dibujar algunos escenarios probables en la relación comercial de ambas naciones, y especialmente el impacto para el país latinoamericano, la economía más débil del Tratado de México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). En este momento se llevan a cabo negociaciones entre ambas naciones y que deberán concluir antes de la fecha pactada.
Actualmente, las importaciones mexicanas de Estados Unidos que no cumplen con las reglas del T-MEC deben pagar un arancel del 25%, cifra que aumentaría hasta 30% al inicio de agosto. En ese sentido, asumiendo que las exenciones derivadas del TMEC continuarán, Banamex actualizó su estimación de como quedarían los aranceles ponderados para las importaciones mexicanas a Estados Unidos a partir de ese momento.
La institución bancaria proyecta que el nuevo arancel se ubicaría en 13,7%, desde el 11,9% vigente actualmente. El arancel mundial promedio subiría a 15% con los nuevos impuestos anunciados. Considerando los cambios en las tasas arancelarias a otros países, que se han anunciado durante julio, Banamex proyecta que la tasa ponderada promedio de las importaciones estadounidenses pasaría de 12,1% a 14,7%.
Al respecto se consideran las cartas enviadas a Camboya, Laos, Myanmar, Tailandia, Indonesia, Sudáfrica, Kasajistán, Corea del Sur, Japón, Malasia, Filipinas y Brasil, además de los acuerdos anunciados entre Estados Unidos y Reino Unido, además de Vietnam.
A pesar de que el arancel mundial promedio es 12%, el efectivamente pagado en mayo fue de 9%, agregaron desde el banco mexicano.
De acuerdo con los datos del US Census Bureau, en mayo de este año la tarifa promedio ponderada de las importaciones de Estados Unidos fue de 8,7%, más de 3 puntos porcentuales por debajo de la estimación previa a las modificaciones anunciadas para entrar en vigor a partir de agosto.
Sobresale que el arancel de las importaciones chinas en dicho mes fue de 45,6%, mientras que el de las provenientes de México fue de 4,3%, casi 8 puntos porcentuales por debajo de la estimación, siendo este el comportamiento dominante. Es decir, salvo China, el arancel efectivamente pagado es menor al estimado.
Sin embargo, es probable que los datos (preliminares) del US Census Bureau muestren una mayor recaudación conforme se normalice el flujo operativo en las aduanas de Estados Unidos, dado que los cambios normativos se han sucedido rápidamente.
Así, en caso de que se implementen las medidas anunciadas en las cartas enviadas la semana pasada, entonces a partir de agosto Banamex espera que el arancel promedio efectivamente pagado de las importaciones de Estados Unidos se ubique alrededor de 10,5% a nivel mundial, mientras que para las importaciones mexicanas se ubicaría alrededor de 5%.
Foto cedidaEl nuevo equipo de Head of Strategy and External Channels (izq a der): arriba: Nicolás Bacarreza, Roly Prieto; abajo: Catherine Ruz, Paulina Olguín, Victoria Bazán
Reforzando su rama de Wealth External, la firma chilena de gestión patrimonial Grey Capital anunció una serie de seis contrataciones, incluyendo un equipo senior de Head pf Strategy and External Channels, sumando décadas de experiencia en la industria financiera. El target es reforzar los esfuerzos en el segmento de asesores independientes.
Según informaron a través de un comunicado, los fichajes incluyeron tres profesionales que ingresaron con el rol de Head: Victoria Bazán, Paulina Olguín y Roly Prieto, todos profesionales con más de 20 años de trayectoria en gestión patrimonial.
Antes de llegar a Grey, Bazán se desempeñaba como subgerente de Banca Privada de Vantrust Capital, firma donde trabajó dos años y medio. En el pasado también trabajó en el multi-family office Addwise, como gerente comercial, y Banchile Corredores de Bolsa, como asesora financiera de Banca Privada.
Olguín, por su parte, pasó más de una década en LarrainVial, donde desarrolló el grueso de su carrera, según consigna su perfil de LinkedIn. La profesional llegó al área de Wealth Management de la casa de inversiones chilena como gestora patrimonial, en 2012. A inicios de 2024, dio un salto y fue nombrada como subgerente de Gestión Patrimonial y encargada del proyecto de canal híbrido del área.
En el caso de Prieto, antes se desempeñaba en SURA Investments, donde pasó los últimos 13 años y fracción. Si bien su primer trabajo en la industria financiera fue como ejecutivo de la Banca de Empresas de Santander, su formación como gestor patrimonial se llevó a cabo en la firma de matriz colombiana. Ahí, alcanzó el cargo de jefe comercial.
Este equipo opera bajo el liderazgo de Catherine Ruz, co-fundadora –junto con Nicolás Bacarreza– de Grey Capital, una firma con presencia en Chile, México y Colombia.
“A ellos se suma un equipo de Channels especialmente seleccionado, completando así una estructura robusta y enfocada en el segmento de altos patrimonios”, agregan desde el multi-family office en la nota de prensa.
Estas contrataciones, acotaron, tienen el objetivo de consolidar la oferta de la firma para asesores financieros independientes, que incluye respaldo regulatorio, productos de inversión, tecnología y proveedores especializados en banca privada.
“Estamos completamente seguros de que las inversiones deben estar miradas desde el cliente, desde lo tributario, el riesgo emisor de los productos, la calidad y la construcción del largo plazo. Eso sólo puede ser construido con asesores financieros independientes y nosotros estamos preparados para entregar lo mejor de los dos mundos”, indicó Ruz en la nota de prensa.
La última ronda de capitalización de iCapital trajo a dos nuevos inversionistas, quienes se sumaron a las inversiones follow-on de caras familiares para la fintech para llevar el levantamiento a recaudar más de 820 millones de dólares. Se trata de T. Rowe Price y el hedge fund SurgoCap Partners, quienes lideraron la operación.
Según informaron a través de un comunicado, la ronda contó con la participación adicional de State Street y, además, aumentos en los compromisos para tres caras conocidas para la firma tecnológica: Temasek, UBS y BNY. Con todo, esto llevó la valorización de la compañía sobre los 7.500 millones de dólares.
El destino de este capital, según detallaron, será acelerar la estrategia global de adquisiciones de iCapital, la expansión geográfica y la innovación tecnológica.
“Los recursos de este aumento de capital va a ser desplegado estratégicamente para acelerar nuestros esfuerzos de adquisición, con el foco en mejorar nuestra plataforma de tecnología y expandir nuestras capacidades de datos”, detalló Michael Kushner, Chief Financial Officer de la fintech, en la nota de prensa.
Así, iCapital sigue en la senda de consolidación que han recorrido desde 2013, cuando fue fundada. En total, señalaron, han invertido más de 700 millones de dólares en su plataforma y ha concretado 23 adquisiciones estratégicas, incluyendo las compras más recientes de Mirador, AltExchange y Parallel Markets.
Actualmente tienen 945.000 millones de dólares bajo servicio a nivel global en su plataforma, incluyendo 257.000 millones de dólares en activos alternativos, 203.000 millones de dólares en inversiones estructuradas y annuities pendientes y 485.000 millones en activos de clientes.
Es más, desde la fintech recalcan que los últimos 12 meses han traído un aumento en la actividad global de su plataforma, con el número de fondos subiendo a 2.100 y los profesionales financieros que lo usan elevándose a 114.000.
“Este aumento de capital refleja el entusiasmo de nuestros inversionistas por la oportunidad que tenemos de transformar la experiencia de inversión”, señaló el Chairman y CEO de iCapital, Lawrence Calcano.
La ronda de capitalización contó con la participación de Goldman Sachs como asesor financiero y agente colocador, mientras que el consejo legal vino del estudio Ropes & Gray.
Aunque la política arancelaria de EE.UU. ha copado la mayor parte de los titulares, a lo largo del primer trimestre de 2025 se han producido otros desarrollos que pueden tener un efecto directo tanto sobre el crecimiento como sobre los ya de por sí elevados riesgos geopolíticos. Destaca particularmente el giro del nuevo gobierno alemán para modificar su estrategia fiscal, históricamente marcada por un estricto control del endeudamiento estatal.
Los planes incluyen la exención del gasto en defensa que supere al 1% del PIB del freno a la deuda que se incluyó en 2009 en la Constitución germana, así como la creación de un fondo de infraestructuras al margen del gasto ordinario dotado con 500.000 millones de euros para gastar en los próximos doce años; en esta partida se incluyen 100.000 millones que se destinarán a apoyar medidas para combatir el cambio climático, como promesa del nuevo canciller Friedrich Merz a Los Verdes. Además, los estados federados podrán pedir prestado el equivalente a unos 16.000 millones de euros.
Lluvia de millones
“Aunque estos cambios fiscales representan una notable evolución de la política alemana, las implicaciones económicas siguen siendo inciertas”, comentan analistas de Candriam sobre este anuncio histórico. Según sus cálculos, el impacto de estas medidas sobre el crecimiento del PIB alemán no superará el 0,6% en 2025 y el 0,8% en 2026, “dada la dependencia de Alemania de las importaciones para el gasto militar y los importantes riesgos de ejecución asociados a las inversiones en infraestructuras”.
El movimiento de Alemania forma parte realmente de una tendencia más amplia hacia el rearme de las principales regiones del mundo. Así, también se produjo en el primer trimestre de 2025 el anuncio del plan ReArmar Europa de la Unión Europea, con el objetivo de dotar a los estados miembros de flexibilidad fiscal para incrementar su gasto militar. “Estamos en una época de rearme. Europa está dispuesta a impulsar masivamente su gasto en defensa”, declaró con motivo del anuncio de este plan Úrsula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.
ReArmar Europa está estructurado en dos partes: por un lado, se activará la cláusula general de salvaguardia del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, permitiendo a los estados miembros incrementar sus gastos de defensa en hasta un 1,5% de su PIB sin tener que activar el procedimiento de déficit excesivo. Por otro, se creará un nuevo instrumento de financiación dotado con 150.000 millones de euros en préstamos para inversiones en el ámbito de defensa. “Se trata básicamente de gastar mejor y de gastar juntos”, afirmó Von der Leyen en un comunicado distribuido a medios europeos.
En conjunto, el gasto en defensa podría alcanzar los 800.000 millones de euros hasta 2030, según estimaciones de la propia UE. No obstante, desde Candriam hablan de la existencia de riesgos de implementación: “Como mencionó Draghi, la base industrial está fragmentada y en el sector de defensa, la planificación común precede al gasto común”.
Mientras tanto, en EE.UU., el presidente Donald Trump y Pete Hegseth, su secretario de Defensa, anunciaron en la primera semana de abril un paquete de gasto militar con la cifra récord de un billón de dólares a partir de 2026, con el objetivo, según sus palabras, de “reconstruir el ejército estadounidense sobre la base de la letalidad y la preparación”.
También la OTAN avanzó en abril que dos tercios de sus miembros ya han alcanzado un gasto en defensa del 2% – objetivo instaurado en 2014- por primera vez en la historia de la organización, alimentando el debate a favor de incrementar el gasto hasta el 3%.
Desde J. Safra Sarasin Sustainable Asset Management (JSS SAM), el responsable de Sostenibilidad, Daniel Wild, constata que los mercados llevan ya meses recogiendo estos acontecimientos, de modo que las valoraciones ya estarían reflejando esas expectativas de crecimiento significativo. “El sector de defensa de la UE superó al Stoxx Europe 600 en más de un 30% durante el pasado año”, observa. Con fecha a 31 de marzo de 2025, 12 de las compañías de defensa con mayor capitalización tienen sede en Europa, y otras 13 en EE.UU. El sector del aeroespacio y defensa pondera un 4,5% en el índice MSCI Europe, y un 2% en el MSCI US.
Reto para la inversión ESG
El posible despegue del sector de defensa puede ser visto como una oportunidad de inversión, pero, tras décadas de implementación generalizada de criterios de sostenibilidad en la industria de gestión de activos, la realidad se presenta más compleja. Por tanto, el objeto de este artículo no es abordar si la tendencia general hacia un mayor gasto militar puede ser un estímulo necesario para reactivar a las economías, sino de entender hasta qué punto podría ser posible conjugar la exposición a este sector con un acercamiento netamente ESG.
Según datos publicados por Efama, los fondos UCITS calificados como artículo 8 terminaron 2024 con un patrimonio gestionado de 7,1 billones de euros, mientras que el patrimonio gestionado en fondos artículo 9 equivaldría a unos 300.000 millones. En un informe de la asociación que recoge la actividad de 2024 se constata que los fondos artículo 9 encadenaron cinco trimestres consecutivos de reembolsos netos, con salidas equivalentes a 7.500 millones solo en el cuarto trimestre del año pasado. Según los datos de Efama, el patrimonio en fondos artículo 9 se ha mantenido en los mismos niveles desde el primer trimestre de 2023, mientras que los fondos artículo 8 han experimentado un incremento en el patrimonio gestionado del 84,5% (ver gráfico).
Concretando más, el experto de JSS SAM cita un estudio publicado recientemente por Bank of America (BofA) según el cual menos del 9% de los fondos europeos con designación ESG cuentan con alguna compañía de defensa en cartera y menos del 3% de los fondos sostenibles poseen nombres con más del 50% de exposición de sus ingresos a este sector.
La principal piedra de toque para el sector es la exposición a armas controvertidas, fuertemente regulada y generalmente excluida, particularmente de los artículo 9. A partir de datos de Morningstar y Spainsif (tracker de fondos artículo 8 y artículo 9 comercializados en España), más del 90% de los fondos artículo 9 (66,8% en el caso de los artículo 8) no opera empresas implicadas en el negocio de las armas controvertidas, mientras que este porcentaje desciende al 50% en el caso de empresas implicadas en la generación de energía nuclear (45% para los artículo 8). En el caso del tabaco, estos porcentajes son del 86,1% para los fondos del artículo 9 y del 72,6% para los articulo 8 (ver gráficos).
De acuerdo con una nota de Morgan Stanley firmada por los analistas Stanley Arushi Agarwal y Rachel Fletcher, que fue citada por Bloomberg el 24 de marzo de 2025, ambos expertos calculaban que los fondos europeos clasificados bajo los artículos 8 y 9 del reglamento SFDR podrían canalizar entre 53.000 y 119.000 millones de dólares hacia el sector aeroespacial y de defensa, de eliminarse las restricciones actuales.
¿Cambios en la percepción?
Cabe pensar en vista de estas cifras que la posible afluencia de dinero a estrategias con criterios ESG podría estar abriendo las mentes de las gestoras de fondos, buscando la manera de aprovechar nuevas oportunidades sin sacrificar su sello de sostenibilidad. A partir del análisis de los últimos tres estudios de mercado de Spainsif, Andrea González, directora general de la organización, habla de una tendencia hacia la segmentación, entendida como la evolución desde una exclusión general del sector armamentístico hacia un enfoque más matizado: “Las entidades empiezan a distinguir entre armamento convencional y armamento controvertido (como armas químicas, biológicas o minas antipersona), lo cual abre la puerta a la posibilidad de financiar actividades relacionadas con la defensa que se consideren compatibles con el marco normativo internacional y los derechos humanos”.
La experta explica que el contexto geopolítico ha actuado como un catalizador, particularmente desde 2022-2023 con el estallido de la guerra de Ucrania: “Se empieza a reconsiderar la exclusión total del sector defensa, reconociendo su papel en la seguridad europea y su alineamiento potencial con valores democráticos y sostenibilidad estratégica”.
González añade que “algunos gestores de activos han manifestado explícitamente su intención de revaluar estas exclusiones, ya que consideran que la sostenibilidad también incluye la estabilidad institucional, la seguridad ciudadana y el respeto al Estado de derecho, donde las capacidades defensivas tienen un papel relevante”. Spainsif está actualmente en una fase de recopilación de datos para la publicación de un estudio en profundidad sobre la materia en 2026.
Con ánimo de pulsar los ánimos respecto a esta lluvia de millones, en Funds Society nos hemos puesto en contacto con las firmas que mayor compromiso han mostrado con la sostenibilidad en los últimos años. Vaya por delante que la mayoría declinaron participar en el reportaje por diversas razones, por lo que solo citaremos a continuación a las que sí han mostrado opiniones al respecto.
“Estamos tratando de conciliar una reticencia natural a invertir en defensa, debido a su asociación inherente con conflictos insostenibles y no deseados, con el hecho de que somos inversores multiactivo, y queremos equilibrar la compensación entre riesgo, rendimiento y sostenibilidad cuando se trata de gasto en defensa”, afirma Aliki Rouffiac, gerente de cartera de Robeco Sustainable Multi-Asset Solutions.
El experto considera que Robeco sí debería posicionarse en el largo plazo para beneficiarse de los cambios significativos en la política europea para aumentar el gasto en defensa. La previsión de la firma es que, al materializarse ReArmar Europa, el peso del subsector aeroespacial y de defensa supere el 2% de exposición actual en el índice de renta variable global, “mientras que otras partes del mercado también se beneficiarán del incremento en el gasto”.
“Antes considerada incompatible con los criterios ESG, la defensa está emergiendo ahora como un sector dinámico que está reformulando lo que realmente significa la inversión ética”, afirma Kate Donegan, directora asociada de Producto, Legal y ASG de WisdomTree. Dicho esto, Donegan insiste en que “la creación de carteras centradas en defensa exige un desarrollo meticuloso, especialmente en torno a las implicaciones geopolíticas y las sensibilidades éticas vinculadas a las armas controvertidas”.
Donegan señala que los tres principales riesgos que deben tener en cuenta los inversores que quieran acercase a esta temática son los riesgos regulatorios, los riesgos reputacionales y el riesgo de sanciones, dado que pueden plantear problemas jurisdiccionales. En este sentido, la experta destaca el buen posicionamiento de las empresas europeas de defensa: “Operan bajo algunos de los marcos normativos más estrictos del mundo, incluidas las prácticas empresariales éticas y las normas ESG. Además, estas empresas operan en jurisdicciones signatarias del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP), lo que garantiza su concordancia con las normas mundiales de control de armamento”.
La experta insiste en que tanto los resultados en materia de ESG como sus actividades empresariales ”están a disposición del público y pueden verificarse de forma independiente a través de fuentes de terceros, como la herramienta de calificación ESG de MSCI, que ofrece una mayor transparencia y confianza a la hora de evaluar la alineación de una cartera con los criterios ESG y permite a los inversores evaluar la implicación de una firma en actividades empresariales específicas, incluida la producción de armas controvertidas”.
Dadas todas estas características, la representante de WisdomTree – que acaba de lanzar un ETF que replica esta temática- concluye: “Las empresas europeas de defensa no solo ofrecen ventajas estratégicas y financieras potenciales, sino que también representan una oportunidad atractiva para que los inversores apoyen la paz, la estabilidad y la resiliencia democrática, valores centrales de la inversión sostenible”.
Una postura más escéptica
Sin embargo, no todas las firmas de gestión consultadas muestran el mismo nivel de convencimiento. Léa Dunand-Chatellet, gestora y directora de Inversión Responsable para DNCA (Natixis IM), relativiza el margen para invertir con criterios sostenibles: “Los inversores deben tener claro que la defensa es una inversión de nicho”. Coincide en señalar que es un sector fuertemente regulado, lo que obliga a los operadores que cotizan en bolsa a cumplir con una serie de restricciones y disponer de licencias, además de encontrarse con limitaciones para comercializar ciertos productos, una situación que también comparten otros sectores tradicionalmente problemáticos para la inversión ESG, como el tabaco.
En este sentido, la experta declaró en el contexto de un foro para medios organizado por Natixis IM el pasado mes de marzo en París que lo más importante para abordar esta problemática será “mantener la coherencia” a lo largo del tiempo. “El primer paso para invertir depende de la filosofía de inversión y de la diversificación. Pero no podemos desarrollar un producto de inversión basado solo en criterios éticos. Necesitamos transparencia, ser muy claros con los filtros de exclusión; tenemos que aplicar un acercamiento gradual en función de inversores que sean más estrictos u otros que sean más flexibles. El cliente necesita saber en qué está invirtiendo”.
En una línea similar, desde Candriam recuerdan que “los inversores sostenibles deben ser conscientes de los retos intrínsecos de los distintos sectores”. En particular, indican que, aunque el sector de la defensa haya sido una inversión “gratificante” en los últimos tres años, también conlleva ciertos riesgos: “La complejidad del sector, desde las fases iniciales hasta los mercados finales, suele traducirse en una falta de transparencia y trazabilidad. Esto puede exponer a los inversores a desafíos legales y éticos, como la corrupción y las violaciones de los derechos humanos, que a su vez pueden representar riesgos de reputación y regulatorios. Estos riesgos son inherentes al sector de la defensa”.
Este artículo fue publicado en la pagina 37 de la revista Número 43 de Funds Society Américas. Para acceder a la revista, haz click aquí!