Foto cedida. "El cisne verde": riesgos climáticos dentro de la esfera de estabilidad financiera de los bancos centrales
El Banco de Pagos Internacionales (BPI) publica El cisne verde-Bancos centrales y sostenibilidad financiera, un libro que revisa cómo abordar los nuevos riesgos del cambio climático dentro del mandato de estabilidad financiera de los bancos centrales. Los autores de este libro han sido Patrick Bolton, profesor de negocios en la Universidad de Columbia; Morgan Despres, subdirector del Departamento de Estabilidad Financiera del banco de Francia; Luiz Awazu Pereira Da Silva, subdirector general del BIS; Frédéric Samana, director de Inversión Responsable en Amundi; y Romain Svartzman, economista en el Banco de Francia.
No obstante, integrar el análisis de riesgos relacionados con el clima en la monitorización de la estabilidad financiera supone un desafío debido a la incertidumbre radical asociada con el cambio climático: un fenómeno físico, social y económico que cambia constantemente e involucra dinámicas complejas y reacciones en cadena.
Por ello, el libro advierte que las tradicionales evaluaciones de riesgos retrospectivas y los modelos económicos climáticos existentes no pueden anticipar con suficiente precisión la forma que adoptarán los riesgos relacionados con el clima. Estos incluyen los denominados “cisne verde”, eventos que potencialmente pueden ser extremadamente perjudiciales desde el punto de vista financiero y podrían estar detrás de la próxima crisis financiera sistémica.
Frente a estos, los bancos centrales “tienen un papel que desempeñar para evitar dicho resultado, buscando mejorar su comprensión de los riesgos relacionados con el clima a través del desarrollo de un análisis prospectivo basado en escenarios”, argumenta el libro. No obstante, los bancos centrales, por sí solos, no pueden mitigar el cambio climático, sino que se requiere la coordinación de acciones de muchos actores, incluidos los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil y la comunidad internacional.
En este sentido, los autores abogan porque los bancos centrales ocupen un papel adicional para ayudar a coordinar medidas contra el cambio climático. Por ejemplo, políticas de mitigación del clima, como la fijación de precios del carbono, la integración de la sostenibilidad en las prácticas financieras y los marcos contables, la búsqueda de combinaciones de políticas apropiadas o el desarrollo de nuevos mecanismos financieros a nivel internacional. Si bien todas estas acciones serán complejas de coordinar y podrían tener importantes consecuencias redistributivas que deberían manejarse adecuadamente, “son esenciales para preservar la estabilidad financiera (y de precios) a largo plazo en la era del cambio climático”, subrayan.
Marysol Novo-Capello, courtesy photo. Marysol Novo-Capello se une a AXA Investment Managers
En un esfuerzo por fortalecer su creciente grupo de clientes de las Américas, AXA Investment Managers contrató a Marysol Novo-Capello para gestionar sus Cuentas Clave.
Novo-Capello tendrá su sede en Greenwich, CT y reportará a Marcello Arona, CEO de AXA IM en las Américas.
Marysol se centrará en la incorporación de nuevos inversores y distribuidores, incluidos los servicios bancarios, brokers independientes, RIAs y bancos privados regionales. Trabajando con el equipo de ventas y servicios de clientes y operaciones de AXA IM, también desarrollará infraestructura y procedimientos operativos para respaldar la expansión de las asociaciones con clientes offshore.
Marysol trabajó recientemente con Morgan Stanley Wealth Management, donde apoyó con éxito el desarrollo del negocio de fondos offshore de la empresa.
Pixabay CC0 Public Domain. AllianceBernstein revisa los mercados de renta variable de China tras el brote de coronavirus
Los crecientes temores por el coronavirus han afectado a las acciones chinas, asegura AllianceBernstein. Si bien los mercados permanecerán inestables hasta que el país asiático consiga controlar el brote, los inversores en renta variable deberían volver a examinar las lecciones aprendidas con epidemias anteriores y considerar los posibles efectos a largo plazo de la crisis actual.
A medida que aumentaron el número de muertos y los infectados a nivel mundial, se intensificó la reacción de los inversores ante el coronavirus. El índice MSCI China A Onshore cayó un 9,2% en dólares el 3 de febrero, y se recuperó un 3,1% al día siguiente.
“Los inversores temen que el bloqueo de millones de personas pueda infligir un gran golpe a la economía china que también afectaría al crecimiento mundial”, advierten en un artículo John Lin y Stuart Rae, gestor de renta variable china y CIO de renta variable ‘value’ en Asia Pacífico, respectivamente, de AllianceBernstein.
Los repuntes suelen ser rápidos
Estas preocupaciones son comprensibles, pero, según la gestora, en episodios previos similares, las correcciones del mercado fueron “relativamente breves y comparativamente superficiales”. Por ejemplo, durante la epidemia del SRAS en 2003, el índice de Hang Seng cayó alrededor del 7,7% del 5 de marzo al 25 de abril, cuando las infecciones estaban aumentando, pero se recuperó rápidamente cuando la situación mejoró.
En las anteriores epidemias y pandemias se han observado patrones de mercado similares. En todos los casos, se pasó del pánico inicial a la búsqueda de gangas cuando los inversores ganaron confianza de que la enfermedad estaba bajo control.
“Por ahora, no hay tal certeza sobre el coronavirus. Como resultado, la volatilidad que hemos visto probablemente persistirá hasta que se reciban buenas noticias tangibles”, señala AllianceBernstein. A su juicio, los inversores también deben recordar que la vuelta del pánico a un momentum positivo puede ser rápida, especialmente en los mercados de China, que están dominados por inversores minoristas.
Efectos en la producción y el consumo
Incluso sin una claridad sobre el virus, se pueden evaluar los posibles efectos macroeconómicos. Según la gestora, los esfuerzos por detener la propagación confinando a la gente en sus casas e imponiendo una cuarentena en ciudades enteras tendrán un impacto real en la economía, a través de la producción y el consumo.
“En las últimas dos décadas, China se ha convertido en la fábrica del mundo, suministrando bienes y materias primas a muchas industrias. Los cierres de fábricas probablemente resulten en diversos grados de interrupción del suministro”, advierte. Wuhan, el epicentro del coronavirus, es un centro de fabricación de equipos de telecomunicaciones, desde cables de fibra óptica hasta placas de circuitos impresos (PCB). La producción de esos componentes puede verse afectada, lo que tendría consecuencias para las cadenas de suministro de tecnología, tanto en China como a nivel mundial.
Wuhan es también sede de grandes empresas industriales, incluyendo uno de los mayores fabricantes de automóviles de China. “En esas compañías, la producción se reducirá sin duda hasta que el brote esté bajo control y las fábricas puedan reanudar sus operaciones normales”, asegura AllianceBernstein.
A su juicio, la caída del consumo perjudicará a los minoristas, pero las empresas de comercio electrónico pueden capear bien el temporal, ya que los consumidores desplazan la demanda hacia los vendedores minoristas online. Algunos de los servicios de entrega de alimentos online de China ya han informado de un aumento del uso, ya que los compradores se mantienen alejados de las tiendas. “Los inversores tendrán que vigilar la forma en que las distintas industrias se verán afectadas por las repercusiones de la crisis del coronavirus”, advierte.
¿Cambios a largo plazo?
Durante un ciclo interminable de noticias dramáticas en desarrollo, es difícil pensar más allá de la crisis inmediata. Sin embargo, AllianceBernstein cree que los eventos actuales podrían desencadenar cambios estructurales a largo plazo que afectarán a las empresas e industrias. “La epidemia de SARS de 2003 probablemente ayudó a impulsar la adopción del comercio electrónico en China y en Asia en general”.
¿Qué podría pasar después del coronavirus? “Estamos en medio del mayor experimento de trabajo desde casa en China y millones de estudiantes chinos están siendo forzados a estudiar online mientras las escuelas cierran por largos periodos”, señala. Para la gestora, estas experiencias podrían desencadenar “cambios fundamentales” en la forma de trabajar y de impartir clase.
Si esto sucede, ¿podríamos ver una década de crecimiento en la adopción de productos de trabajo y aprendizaje a distancia? ¿Cómo cambiaría la infraestructura de las redes de comunicaciones y los centros de datos para afrontar una mayor demanda? “Son preguntas difíciles de considerar ahora, pero, cuando el peligro inmediato disminuya, se volverán más relevantes para los inversores”.
Mientras la situación del coronavirus siga sin resolverse, AllianceBernstein considera que los inversores en China deberían reducir la exposición a las empresas directamente afectadas. Asimismo, basándose en la experiencia, “una cartera china debería posicionarse a largo plazo y prepararse para la posibilidad de una fuerte recuperación cuando se resuelva la crisis”.
El 21 de febrero de 2020, la División de Valores de Massachusetts (Securities Division) anunció la aprobación de su Regla Fiduciaria, la cual presenta un estándar de conducta fiduciaria para los broker dealers y sus agentes que realicen negocios dentro o fuera de Massachusetts.
Según informó el secretario de la Commonwealth, William Galvin, las nuevas regulaciones entrarán en vigencia el 6 de marzo de 2020 y será el 1 de septiembre de 2020 cuando la división empiece a regular su adherencia. La división considera el incumplimiento de este estándar fiduciario como una práctica deshonesta o poco ética, lo que puede resultar en multas, revocación del registro en la Commonwealth y consecuencias colaterales con otras agencias estatales y federales.
Galvin mencionó que la regla fiduciaria del estado se realizó para imponer «un verdadero estándar de conducta fiduciaria» en Massachusetts, luego de que la regulación de la SEC no le parece la adecuada. «La promulgación de esta regla proporcionará protecciones más fuertes para los inversores de Massachusetts, al imponer un mayor deber de cuidado y lealtad a los brokers y agentes», mencionó Galvin.
De acuerdo con la firma Kilpatrick Townsend & Stockton, en comparación con la propuesta modificada de diciembre, en el Reglamento final:
Se eliminaron las referencias a asesores de inversiones y representantes de asesores de inversiones «porque ya están sujetos a un estándar fiduciario según las leyes de valores y su inclusión dentro del alcance de las regulaciones puede tener consecuencias no deseadas. Por lo tanto, el Reglamento final solo se aplica a los BD y RR«.
Se eliminaron las referencias a commodities y productos de seguros porque estos productos están excluidos de la definición de «valores» en virtud de la Ley Uniforme de Valores de Massachusetts y el Reglamento Final se limita al negocio de valores. (Pero, la venta de una garantía para comprar un producto de seguro aún estaría cubierta por la regla).
No cambió la definición de cliente. Los comentaristas solicitaron que la definición de cliente se limitara a clientes minoristas domiciliados en Massachusetts, pero el Reglamento Final no se modificó en base a estos comentarios. La División de Valores declaró que «la Ley Uniforme de Valores de Massachusetts es clara sobre el alcance y la aplicabilidad del Reglamento Final y no necesita más aclaraciones». Esto significa que las sucursales en Massachusetts deben cumplir con el Reglamento Final con respecto a todos los negocios realizados desde Massachusetts con clientes minoristas, incluso si el cliente no es un cliente de Massachusetts. Además, los RR en cualquier parte del país deben cumplir al realizar transacciones con un cliente minorista ubicado en Massachusetts. A diferencia de Reg BI, un «cliente» bajo el Reglamento Final no se limita a personas físicas que invierten para fines personales, familiares o domésticos. Sin embargo, los inversores institucionales (incluidas las empresas sofisticadas con más de 5 millones en activos) se encuentran entre los excluidos de la definición de «cliente» en virtud del Reglamento Final.
Aclaración sobre la aplicación del deber fiduciario
El deber fiduciario se ejecuta durante el «período en el que se realiza un asesoramiento en relación con la recomendación de una garantía al cliente», es decir, cuando se da la recomendación o el asesoramiento. El deber fiduciario se extenderá más allá del período de recomendación cuando el BD o RR tenga:
Autoridad discrecional sobre la cuenta de un cliente;
Una obligación contractual que impone un deber fiduciario;
Una obligación contractual de monitorear la cuenta del cliente de manera regular o periódica (por ejemplo, un deber de monitorear una vez por trimestre significa que el deber fiduciario se aplica durante el curso de la revisión trimestral).
El Reglamento Final también eliminó la presunción de que el uso de ciertos títulos, supuestas credenciales o designaciones profesionales imponía un deber fiduciario continuo y agrega un estándar de razonabilidad al deber de lealtad, proporcionando orientación adicional sobre las obligaciones de los BD y RR para divulgar, evitar, eliminar y mitigar conflictos de intereses.
Cabe mencionar que el Reglamento Final excluye específicamente los valores gubernamentales, valores emitidos por gobiernos federales, estatales y municipales de EE. UU., del deber de las disposiciones de lealtad.
Ken Bentsen, presidente y CEO de la Asociación de la Industria de Valores y Mercados Financieros (SIFMA por sus siglas en inglés), dijo en un comunicado el viernes que su asociación espera revisar la regla «con especial atención sobre si es coherente con los estándares fiduciarios federales existentes y los mejores intereses a los que están afiliados nuestros miembros, o si puede entrar en conflicto de manera, intencional o no, que impediría a nuestros miembros servir mejor a sus clientes minoristas».
. México busca impulsar el crecimiento de los fondos de inversión
El pasado 20 de febrero se llevó a cabo el primer Foro de Fondos organizado por la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles (AMIB). Si bien en México hay más de 2 millones de cuentas de ahorradores en fondos y con aproximadamente el 10% del PIB invertido en fondos, el tamaño de la economía presenta una gran oportunidad para las gestoras de fondos.
El evento, en el que participó el premio Nobel de economía Myron Scholes, fue seguido por cerca de 850 personas, tanto de forma presencial como en streaming, según comentaron a Funds Society desde la AMIB.
«El entender asset management va más allá del producto. Debes entender al cliente y ganar su confianza» comentó Scholes en su ponencia, durante la cual recordó a los asistentes que «las inversiones pasivas no son constantes. El riesgo cambia. No debes solo invertir en pasivo y te olvidas… además son los retornos compuestos (compounded) los que cuentan en la vida».
El premio Nobel también habló de la importancia de la tecnología en el sector, mencionando que hay nuevas generaciones que están utilizando la inteligencia artificial para desarrollar nuevas formas de servicios financieros. En su opinión, se debe de «aprovechar la innovación, como el 5G, cómputo cuántico o el Blockchain para optimizar los portafolios, generar confianza y otorgar más valor a los mercados».
Durante el panel “Perspectivas de la industria de fondos, retos y oportunidades», Samantha Ricciardi, de BlackRock México comentó sobre la importancia de diseñar productos que el público entienda. Por su parte, Fanny Rodríguez de Multiva, mencionó que «necesitamos una homologación urgente en el sector para que el inversionista pueda entender y comparar las opciones disponibles».
Hugo Petricioli, de Franklin Templeton, recordó a los jóvenes que cuanto más temprano empiecen, el interés compuesto más juega a su favor y que como tampoco pedirían pilotear un avión, deben confiar en su asesor. “Automatizar el ahorro y la inversión le quita mucho ruido a tus finanzas”, mencionó el directivo cuya gestora celebró 15 años en México ese día.
Mientras que Jaime Lázaro de BBVA Asset Management mencionó que la tecnología permite democratizar las inversiones y que «hay que tomar las sanas prácticas de los países exitosos para formar una agenda a desarrollar… Lo más importante es enfocarse a lo que requiere el inversionista, darles soluciones tecnológicas, pero principalmente soluciones de asesoría».
Postura de funcionarios
Tras inaugurar el foro, el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio González, mencionó que la SHCP buscará impulsar el crecimiento de los fondos de inversión en México, y que se anunciará un segundo paquete de reformas para el sistema. En su opinión, «los fondos de inversión se han consolidado en los últimos años como una opción de ahorro para la gente en México. … Promover el ahorro es crucial para todas las personas, por eso se deben seguir desarrollando productos y una industria que lo faciliten«.
Hablando sobre la potencial reforma, Alejandro Aguilar Ceballos, presidente del Comité de Operadoras de Fondos de Inversión de la AMIB, señaló que aún está pendiente hacer una reforma fiscal «para apuntalar el crecimiento de los fondos de inversión, ya que el régimen fiscal se quedó obsoleto».
Por su parte, Adalberto Palma, presidente de la CNBV comentó sobre la importancia del gobierno corporativo para el buen desarrollo de los mercados, y Javier Guzmán, subgobernador de Banxico mencionó que «los fondos de inversión cuentan con un amplio margen para contribuir al desarrollo del mercado de instrumentos de mediano y largo plazo».
Durante el evento, Alfonso Romo, jefe de la oficina de la presidencia, mencionó que AMLO «ya tiene como prioridad el crecimiento económico y ganarse la confianza de los inversionistas».
El cierre del evento corrió a cargo de Álvaro García Pimentel Caraza quien ese día asumió la Presidencia Ejecutiva del Consejo Directivo de la AMIB.
Pixabay CC0 Public Domain. La gestora chilena Quest AGF lanza un nuevo fondo que invierte en el mercado hotelero americano
Según informó Quest AGF a la bolsa de Santiago, a partir del próximo martes 25 de febrero ya se podrán adquirir las cuotas del fondo Quest Hoteles USA Fondo de Inversión no rescatable.
El objetivo principal del fondo, tal y como se recoge en el reglamento del fondo es la inversión “en acciones y/o en títulos o instrumentos de deuda emitidos por una o más sociedades extranjeras que a su vez inviertan, directa o indirectamente, a través de otras sociedades, en el negocio hotelero en Estados Unidos de América y/o en otras actividades o negocios relacionados a dicha industria”. El 70% de la inversión del fondo será en títulos extranjeros y contempla hasta un máximo del 30% de inversión en fondos nacionales e internacionales.
El fondo de inversión no rescatable contará con dos cuotas A y B, requiriendo esta última una inversión mínima inicial o compromisos por valor de de 500.000 dólares. Las comisiones (IVA incluido) ascienden a 1,785% para la clase A y a 1,19% para la clase B. El reglamento no contempla remuneración variable y los aportes se pueden realizar tanto en pesos chilenos como en dólares estadounidenses.
La duración del fondo será de 7 años, pudiendo prorrogarse dicho plazo por dos períodos consecutivos de un año si así lo acuerdan los aportantes. Así, el fondo distribuirá al menos el 80% de los beneficios netos anuales en concepto de dividendos y el reglamento señala que “ en todo caso, y siempre que ello sea posible, la Administradora tendrá como política la de distribuir trimestralmente dividendos provisorios del fondo con cargo a los resultados del ejercicio correspondiente”.
Quest AGF, gestiona hasta la fecha 8 fondos de inversión, por un volumen aproximado de 225 millones de dólares según las últimas cifras disponibles en ACAFI (Asociación chilena de administradoras de fondos de inversión).
Miguel Jiménez, analista y gestor de Renta 4. Miguel Jiménez (Renta 4): “El inversor conservador tiene que perder el miedo a la bolsa, la renta fija también tiene riesgos”
Para Miguel Jiménez, gestor de Renta 4, la pregunta que tienen que hacerse hoy los gestores es ¿en qué parte del ciclo nos encontramos? En este sentido, el riesgo más evidente que localizan es el del fin del ciclo económico. “No se trata de nuestro principal escenario, pero después de una década de crecimiento económico nos encontramos ya hoy en el más longevo del último siglo”, explica el gestor, en un desayuno en Madrid.
Otra de sus principales preocupaciones es que ven ciertos mercados caros, sobre todo para los inversores conservadores, es decir, la parte de renta fija. Con la situación actual de los tipos de interés y spreads en mínimos, los gestores de la entidad descartan alcanzar buenos resultados con las inversiones en este tipo de activo. “Los inversores más conservadores van a tener dificultades para encontrar rentabilidad en este entorno. Hace cinco o siete años, logramos rentabilidades mucho mayores que las de ahora y de una forma más fácil”, recuerda.
La parte que ven peor parada es la deuda pública, mientras que la corporativa “no está tan mal”. Sin embargo, están limitando su inversión en esta clase de activos ya que los bonos corporativos dan rentabilidades “insuficientes”. Jiménez ha puesto el ejemplo de Telefónica, una compañía muy atractiva para los inversores conservadores, ya que tienen la seguridad de que es muy difícil que quiebre, pero actualmente con unos cupones del 0,6%, es algo que “no compensa”.
Más cautela en las inversiones en renta fija
Asimismo, al tema de los precios se suma el de la liquidez del mercado, algo que justifica la cautela de los gestores de Renta 4 respecto a la inversión en renta fija. “Cuando venga una recesión vamos a tener un problema importante en vender nuestras emisiones en renta fija, lo que acentuará el precio a la baja”, explica Jiménez. “Hay muchos inversores metidos en fondos de renta fija que no saben que este tipo de inversión puede tener pérdidas. Este elemento nos da cautela”, añade.
Por otro lado, en la parte de renta variable sí encuentran oportunidades más interesantes, aunque menos que hace 12 meses. “Si lo comparamos con la renta fija, la variable sigue siendo mucho más interesante en términos de rentabilidad-riesgo. Hay muchas acciones que nos dan un dividendo más atractivo frente a la rentabilidad de los bonos”, aclara.
En este caso, Jiménez recomienda a los inversores conservadores plantearse la compra de acciones de empresas estables. “Hay que decirle al inversor que hay que perder el miedo a la bolsa ya que la renta fija también tiene riesgos”, aconseja. En este sentido, Jiménez está a la busca del “activo ganador” que, a sus ojos, sobre todo para los inversores conservadores, serán acciones de empresas que tengan unos flujos de caja predecibles y que puedan mantener su dividendo durante los próximos cinco años.
Debido a esto, los gestores de Renta 4 han bajado su exposición a renta fija, no tienen deuda pública y cada vez tienen menos corporativa. Han aumentado liquidez y los pagarés de empresas, los cuales, «a corto plazo, nos dan una rentabilidad pequeña en torno al 0,5% pero es mejor que nada”, explica Jiménez.
Respecto a la renta variable, los expertos se mantienen flexibles y aclaran que aún hay compañías que encuentran interesantes. En concreto, Jiménez ha incluido en la cartera de su fondo de renta variable Renta 4 Nexus, empresas como Facebook o Tencent (empresa líder en videojuegos), ya que considera que las tecnológicas están superando a las empresas de la “economía vieja”. Asimismo, ha incluido empresas con altos dividendos cuya comparación con la renta fija es favorable como Unibail Rodanco o Imperial brands; materias primas como Repsol; valores penalizados en sectores atractivos como Fresenius, Reckitt o Día y algunas empresas financieras de forma táctica.
“La tasa Tobin podría reforzar a los fondos de inversión”
Respecto a la tasa Tobin, el experto de Renta 4 ha señalado que podría ser una buena noticia para los fondos de inversión, en el sentido de que muchos inversores verán ahora los fondos como una forma de ahorrar mejor que las acciones. “Los costes asociados a la compra de acciones serán mayores que los de los fondos”, ha aclarado.
A pesar de este posible aumento de flujo hacia los fondos, Jiménez ha señalado que dentro del sector financiero la tasa Tobin “viene mal a todos”.
Pixabay CC0 Public Domain. IASE se presenta en España como principal certificador internacional en ESG
2020 será un año de crecimiento global moderado, sin grandes desequilibrios ni riesgos de recesión, una tendencia que se mantendrá estable en los próximos tres años, según los expertos de GVC Gaesco. “La reducción del ruido geopolítico y la solidez de los resultados empresariales apuntan a un 2020 positivo en los mercados financieros, que retornarán a la racionalidad con una rentabilidad más moderada y menor volatilidad”, aseguran.
No obstante, ante posibles cambios de ciclo y dado que los mercados raramente son lineales, “también podría ocurrir que tuviéramos un excepcional año 2020”, aseguraron en el evento organizado por GVC Gaesco “Perspectivas financieras 2020. Un año brillante o tres años de crecimiento”, celebrado en Barcelona. El acto contó con la participación de Maria Àngels Vallvé, fundadora y presidenta del Grupo GVC Gaesco, y Enrique García Palacio, CEO del Grupo GVC Gaesco. Asimismo, Víctor Peiro, director general de Análisis de GVC Gaesco Valores, y Jaume Puig, director general de GVC Gaesco Gestión, también intervinieron en la presentación.
Previsiones para 2020
Los especialistas de GVC Gaesco recomiendan apostar por aprovechar dos desequilibrios actuales en los mercados: las bolsas baratas y, de nuevo, el segmento value barato frente al segmento growth. La principal incógnita para este 2020 será cómo influirán los problemas geopolíticos en los mercados, tras un intenso inicio de año.
Además, la guerra comercial entre Estados Unidos y China seguirá siendo una de las principales amenazas, aunque “hay motivos para no considerarla, ni sucumbir al ruido de tuits”, asegura Jaume Puig. Lo mismo ha remarcado Víctor Peiro con su previsión de una pronta clarificación del Brexit.
En relación con una posible burbuja financiera, los especialistas indican que los niveles de confianza empresarial son satisfactorios y se está lejos del exceso de confianza que desembocó en la anterior crisis económica. “Tras varios años muy buenos, no hay ni empresas ni consumidores eufóricos”, señala Puig. Así, Peiro subraya que “para 2020, se repite el escenario de 2019: en ausencia de shocks externos, no habrá recesión”.
Los especialistas de GVC Gaesco recomiendan apostar por valores beneficiados por bajos tipos de interés como el real estate, renovables y concesiones, y valores con buena posición estructural en sectores industriales con buenas carteras de pedidos como, por ejemplo, Gestamp, Acerinox y Técnicas. También destaca el potencial de reestructuraciones pendientes y posibles fusiones (bancos, telecos, distribución, energéticas), junto con oligopolios con poder de precio como Amadeus, Cellnex, y firmas del sector del lujo.
Los expertos han hecho hincapié en las previsiones de la entidad, que ya avecinaban un año de crecimiento económico y no una recesión, como algunas fuentes preveían y, sobretodo, se han certificado las subidas bursátiles, que superaron claramente los descensos de 2018. Asimismo, los expertos financieros de GVC Gaesco ya apostaron en 2019 por el inicio de un ciclo value frente a los valores growth.
Foto cedida. Andrew Norelli, gestor de renta fija de JP Morgan AM, durante su intervención
La reducción de las tensiones comerciales y de la probabilidad de un Brexit sin acuerdo, así como la reciente aprobación en el Senado estadounidense del texto final del USMCA, son factores que impulsarán el crecimiento mundial en 2020, pero la incertidumbre persistirá. En este contexto, JP Morgan Asset Management recomienda invertir en crédito high yield y defiende que existen buenas oportunidades en renta variable europea.
En una conferencia ante los clientes en Madrid, el gestor de renta fija de la entidad, Andrew Norelli, reveló que la relajación monetaria, unida a la firma del acuerdo de Fase 1 entre China y Estados Unidos, han hecho que la gestora reduzca la probabilidad de que este año se produzca una recesión del 40% que preveían en 2019 al 25%.
En esta línea, destacó la reacción “abrumadora” de los bancos centrales en 2019, que generó relajación en todos los mercados, incluidos los emergentes. Esto, a su vez, provocó un desequilibrio entre la oferta y la demanda: “Existe más efectivo y menos activos, lo que ha causado inflación en los precios”. A su juicio, la provisión de liquidez de los bancos centrales va a continuar, por lo que “el precio de todos los activos seguirá subiendo”.
Según el gestor, este entorno de “carry” a corto plazo favorece al high yield y los emergentes, pero perjudica a la duración de calidad. Eso sí, no parece que pueda mantenerse ininterrumpidamente todo el año debido a las valoraciones elevadas y al impacto de las elecciones estadounidenses. La clave residirá en “enhebrar el hilo en la aguja”, es decir, en realizar una cuidadosa selección de bonos.
En ese sentido, Norelli defendió las posibilidades que brinda el JPM Income Fund. “Tiene dos objetivos sencillos: proporcionar una TIR atractiva con menor volatilidad y obtener ingresos a través de una distribución predecible y constante”, señaló. Asimismo, destacó que el proceso de inversión del fondo es completamente activo y se basa en tres claves.
La primera es un análisis de los factores fundamentales, cuantitativos y técnicos de distintos países, sectores y emisores a nivel global. La segunda es la diversificación, que se combina con la tercera: un filtro de ingresos. El resultado es una cartera que optimiza riesgos y minimiza las fluctuaciones en los pagos periódicos de dividendos. Actualmente, la deuda corporativa de alto rendimiento es la que más peso tiene (24%), seguida de las titulizaciones hipotecarias (MBS) y de activos (ABS).
El rendimiento total a vencimiento del fondo es del 5,27% (a 31 de diciembre de 2019) y cuenta con un objetivo de volatilidad del 4% al 6%. “No podemos tener éxito si no logramos reducir riesgos a través de la diversificación”, apuntó. Según Norelli, los retornos del fondo son atractivos y su volatilidad, menor que la del high yield tradicional. Por lo que, “en esta etapa final del ciclo económico, es una buena propuesta para reducir riesgos y preservar los ingresos”.
Renta variable europea
Por su parte, Michael Barakos, gestor de renta variable europea, abordó este mercado y destacó que, en la última década, las acciones de la región han obtenido un rendimiento total “extraordinario” del 10%. La cifra es idéntica a la registrada por los emergentes, pero con una volatilidad mucho menor.
Eso sí, admitió que en los dos últimos años las valoraciones de la renta variable europea no han sido demasiado justas, lo que ha provocado numerosos reembolsos, que ya suman 2.000 millones de dólares. Sin embargo, “es el cambio de expectativas lo que mueve los precios, y ya hace seis meses que las expectativas para los PMIs alemanes y, por tanto, para la situación económica europea en general, han mejorado”.
Barakos abordó el estilo “growth” y el “value” y, aunque admitió que en la última década los inversores se han centrado en el primero, señaló que también ha habido momentos de volatilidad en los que el segundo ha registrado buenos rendimientos. “Los inversores en ‘value’ se sienten muy solos, pero las valoraciones relativas muestran que hay oportunidades para ellos en Europa, sobre todo a medio plazo”. Mientras, el ‘growth’ parece demasiado caro, por lo que Barakos recomendó prestar atención a ese crecimiento que todavía no se ha anticipado.
En ambos casos, JP Morgan ofrece estrategias “genuinamente ‘value’ y genuinamente ‘growth’, que generan alfa” y que han solido obtener mejores rendimientos que sus índices de referencia en sus dos décadas de historia.
Aunque reconoció que el estilo ‘value’ sigue siendo poco atractivo para la mayoría de los inversores, el gestor hizo hincapié en que el JPM Europe Strategic Value Fund ha registrado buenos retornos (un 18,02% en 2019) e, incluso en los últimos años, ha conseguido generar algo de alfa. Su objetivo es proporcionar un crecimiento del capital a largo plazo invirtiendo en empresas europeas infravaloradas con unos fundamentales sólidos. Por sectores, predominan en la cartera la banca (15,3%), los seguros (13,9%) y la energía (11,8%).
Por su parte, el JPM Europe Strategic Growth Fund es “el fondo ‘growth’ más rentable del mercado”, destacó Barakos. Su objetivo es generar crecimiento del capital a largo plazo invirtiendo en firmas europeas con potencial de crecimiento, es decir, compañías de alta calidad con un momentum superior que todavía no ha sido identificado. Actualmente, el 15% de la cartera lo conforma el sector farmacéutico, seguido de los bienes de equipo (13,9%) y alimentos, bebidas y tabaco (11,6%). En 2019, el fondo obtuvo un rendimiento del 31,39%.
“Creo que es importante apreciar que el panorama de la renta variable está mejorando y hay que aprovechar estos dos fondos que pueden generar retornos fantásticos frente a los activos individuales”, sentenció.
Foto: Paula Pez, Flickr, Creative Commons.. cohete
Santander Asset Management ha lanzado al mercado un fondo de inversión libre con el objetivo de diversificar en activos y geografías para mejorar la relación riesgo/beneficio de la cartera. Es el primer FIL que comercializa desde 2008.
El Santander Patrimonio Diversificado FIL invertirá en renta fija, renta variable y fondos de retorno absoluto, así como en vehículos del mercado inmobiliario y otros activos alternativos como fondos de capital riesgo, fondos de deuda privada, fondos de préstamos, fondos de infraestructuras, entre otros, y en diferentes áreas geográficas: Europa, EE UU, Japón y países emergentes. Se limita a un máximo del 5% el peso de cada una de las inversiones con el propósito de asegurar la diversificación de la cartera. Con ello, se pretende aumentar la probabilidad de obtener una mejor combinación de rentabilidad/riesgo gracias a la distinta naturaleza de las inversiones y la descorrelación de activos. «La combinación de activos tradicionales con inversiones alternativas, en activos reales o menos líquidos suponen una oferta muy diferencial respecto al resto de los fondos de inversión que existen en la industria», explican en un comunicado.
El nuevo fondo tiene también un sesgo sostenible, por lo que tratará de buscar, siempre que sea posible, inversiones que cumplan con los criterios ASG (ambientales, sociales y de buen gobierno) definidos por la metodología interna de Santander AM. Cuenta con distintas clases, incluida una de reparto, en función del importe y la tipología de cada inversor con unas comisiones muy competitivas, que se mueven en una horquilla entre el 0,4% y el 0,9% de comisión de gestión fija más una comisión variable.
La comercialización de este nuevo producto se enmarca dentro de la transformación que está viviendo la gestora desde hace meses. Al tratarse de un fondo multiactivo, además, es fundamental contar con el apoyo de una gran gestora como Santander Asset Management, que tiene presencia en diferentes mercados y sólidos equipos de inversiones en todas las geografías.
A todo esto se suma la dilatada experiencia profesional del gestor, destaca el comunicado. Javier Mazarredo se incorporó a BSN Gestión en 1992 como gestor de Fondos de Renta Variable y Mixtos y, desde entonces, ha asumido diferentes responsabilidades dentro del grupo: director de Renta Variable y Sicavs en Santander Gestión de Activos SGIIC, director de Análisis y Estrategia de Santander Bolsa SVB, director Comercial y de Producto Global en Santander AM y, finalmente, director de Santander Banca Privada y director de Private Wealth en España.
En España, Santander Asset Management es líder en sostenibilidad, al acaparar en torno al 50% del patrimonio gestionado en fondos de ISR. Además, Santander Asset Management fue la primera gestora en lanzar una gama de fondos Sostenible, integrada por un fondo de bonos verdes (Santander Sostenible Bonos), dos fondos mixtos (Santander Sostenible 1 y 2) y uno de renta variable pura (Santander Sostenible Acciones), así como el primer fondo que apuesta por la igualdad de género (Santander Equality Acciones). A ello se une la iniciativa global Santander GO, la nueva gama de fondos mandatados a gestoras terceras, que incluye el fondo sostenible Santander GO Global Equities ESG gestionado por Boston Partners (Robeco). Asimismo, la gestora ha incorporado criterios ASG a su gama de planes de pensiones Mi Proyecto Santander Sostenible.