La SEC de Estados Unidos dio un paso relevante hacia la actualización de las reglas que rigen la relación entre analistas y banqueros de inversión en Wall Street. El regulador acordó enmendar el Global Research Analyst Settlement, el acuerdo alcanzado a comienzos de los 2000 con 12 grandes broker-dealers tras el estallido de la burbuja punto-com, con el objetivo de eliminar requerimientos que hoy considera desactualizados y de alto costo para las firmas.
El Global Research Settlement surgió tras las investigaciones que detectaron conflictos de interés entre investigación y banca de inversión: se acusó a banqueros de presionar a analistas para emitir reportes favorables y así ganar mandatos de colocaciones. Para corregirlo, el acuerdo impuso obligaciones estrictas, como separar operativamente ambos equipos y limitar comunicaciones, entre otras medidas prescriptivas.
Según la SEC, desde 2004 el marco regulatorio se transformó sustancialmente. Entre los hitos, destaca la adopción de Regulation AC, que obliga a los analistas a certificar la independencia de sus opiniones y transparentar su compensación, y la entrada en vigor de la FINRA Rule 2241 en 2015, que aborda los mismos conflictos con un enfoque más basado en principios. Para la Comisión, esta norma hoy provee una estructura adecuada y actualizable, lo que vuelve redundantes partes del acuerdo original.
«Parece difícil argumentar que los requisitos del Acuerdo Global de Investigación sigan siendo relevantes -dice el comunicado-. La Norma 2241 de la FINRA ofrece ahora un marco sólido para gestionar los conflictos, las divulgaciones y la supervisión de los analistas de investigación, pero lo hace a través de una norma SRO basada en principios que puede actualizarse mediante notificaciones y comentarios e interpretarse de manera coherente en todas las empresas miembro».
No se trata de protecciones más débiles, sino de herramientas de mitigación de conflictos específicas, transparentes y alineadas con la forma en que se produce, se paga y se consume realmente la investigación, agrega el regulador. «La medida de la Comisión reducirá las fricciones en materia de cumplimiento, promoverá interpretaciones más coherentes y, en última instancia, ampliará la disponibilidad de la cobertura de la investigación, lo que ayudará a los inversores a tomar mejores decisiones», afirma.
Además, el regulador subrayó que las firmas estadounidenses que venden research a gestores europeos y británicos enfrentan reglas externas —como las derivadas de MiFID II— que a veces resultan superpuestas o contradictorias, elevando la fricción de cumplimiento.
Objetivo: más research, sobre todo para “small & mid caps”
La SEC vinculó explícitamente este cambio con la caída en la producción de research sell-side en EE.UU. durante las últimas dos décadas, fenómeno que golpeó con fuerza a compañías de baja y mediana capitalización. El regulador apunta a que, al reducir costos y rigideces, los brokers mejoren la cobertura de esos segmentos donde —argumenta— los inversores más necesitan análisis de calidad.
En palabras de la propia SEC, se trata de una reforma regulatoria “de buen gobierno” que busca equilibrar integridad de mercado con eficiencia operativa, sin debilitar la mitigación de conflictos.



