Desde su atalaya como directora de Arquitectura Abierta en CaixaBank AM, Elena Ruiz Takata tiene un amplia visión sobre el sector de fondos en España. En esta entrevista con Funds Society -y tras participar en el Funds Society Leaders Summit, celebrado el pasado 10 de septiembre en Madrid-, nos da su perspectiva sobre temas candentes como el equilibrio entre gestión pasiva y activa (ETFs y fondos tradicionales), el escenario ESG, el auge de los alternativos en las carteras, el foco creciente en el mundo cripto y, sobre todo, los retos que afronta el selector en un mundo más incierto y dinámico, marcado también por las oportunidades y retos de la digitalización.
En su opinión, en un entorno volátil y cambiante como el actual, «es fundamental mantener una actitud dinámica en la gestión», y por ello, han hecho cambios en sus carteras temáticas, por ejemplo: «Hemos realizado rotaciones tácticas hacia ideas más defensivas, incrementando exposición a longevidad y bienestar y a infraestructuras, en detrimento de ideas relacionadas con la digitalización, con el objetivo de mejorar la resiliencia ante escenarios de mayor incertidumbre. A nivel estratégico, estamos incorporando nuevas tendencias de largo plazo», entre ellas, dice, «la tesis del mundo multipolar», que responde a cambios estructurales en el orden geopolítico donde la fragmentación de bloques está reconfigurando las cadenas globales de producción.
Ruiz Takata explica también las tres grandes tendencias que, en su opinión, marcarán la evolución del sector de fondos en los próximos años (las soluciones más eficientes, transparentes y personalizadas, gracias a la tecnología; un mayor uso de mandatos; y la mayor centralización en la toma de decisiones). No se pierdan la entrevista, que reproducimos a continuación.
A pesar de las fusiones y los movimientos corporativos en la industria de fondos, no dejan de llegar nuevos actores al mercado español. ¿Cómo trabajáis desde CaixaBank AM para estar al día de todas las novedades y, sobre todo, filtrar la amplia oferta de producto existente? y ¿cuáles son los factores más importantes que habría que considerar a la hora de elegir un fondo de inversión?
En CaixaBank AM valoramos positivamente la entrada de nuevos actores. Los nuevos actores amplían el universo de inversión y nos permite identificar oportunidades más ajustadas a cada perfil de cliente. Contamos con un equipo de 15 selectores especializados por tipo de activo, organizados en dos verticales: Long Only y Gestión Alternativa. Esta estructura nos permite mirar el universo completo con profundidad y criterio propio.
A la hora de seleccionar un fondo, priorizamos tres factores: entender la estrategia—qué alfa busca capturar—, la calidad del equipo gestor —cohesión, recursos, destreza —, y la gestión de riesgos, con especial atención en la gestión de drawdowns.
Antes de analizar un fondo, para nosotros es fundamental realizar una due diligence operacional rigurosa sobre la gestora. Evaluamos las capacidades y solidez de las gestoras, dando especial importancia a la estructura de gobernanza y la estabilidad financiera. Sólo si esa base es sólida, pasamos al análisis del fondo.
Más allá de elegir a los mejores, también supongo que miráis el tema de la rentabilidad. En este sentido, ¿qué papel juegan los ETFs en vuestras carteras, han aumentado su protagonismo en los últimos años? ¿Funcionan únicamente para exponerse a beta o su rol es más amplio, y acabarán canibalizando a los fondos tradicionales? Y para acceder a alfa: ¿en qué sectores y mercados, o tipología de vehículos lo encontráis con mayor eficiencia?
Los ETFs han ganado peso en nuestras carteras en los últimos años, principalmente por su capacidad de ofrecer granularidad en la exposición a activos. Nuestros usuarios más sofisticados buscan expresar opiniones relativas a tramos de la curva, países, industrias etc… y los ETFs permiten implementar estas apuestas de forma más precisa.
Respecto a la posible canibalización de los fondos tradicionales, parece que estamos en un punto de inflexión en EE.UU. Este año, varias gestoras han anunciado el lanzamiento de toda su gama de gestión activa en formato ETF, impulsadas por las ventajas fiscales que ofrece este vehículo en EE.UU. No descartamos que, en un futuro, el mutual fund americano tenga una presencia limitada. En Europa, sin embargo, la evolución está por verse.
En lo que respecta a la generación de alfa, consideramos que la inversión en ETFs puede implicar un coste de oportunidad significativo a largo plazo. Actualmente observamos un comportamiento muy sólido en los fondos de renta fija de gestión activa. En un entorno que favorece el análisis fundamental, creemos que tiene más sentido invertir en gestión activa, especialmente por la forma en que se construyen los índices de renta fija. Además, en Europa la baja correlación y elevada dispersión está permitiendo un buen ejercicio de alfa en renta variable.
En un entorno como el actual, complejo, volátil, cambiante, muchos selectores dicen que no es momento para cambiar las carteras, sino para demostrar su buen hacer en la selección. ¿Estás de acuerdo o hay que mostrarse dinámicos? En este sentido, ¿estáis trabajando en algún movimiento importante de corto plazo? Y más de cara a tendencias de medio plazo, no tanto a corto… ¿estáis trabajando para incorporar nuevas tendencias?
En un entorno volátil y cambiante como el actual, creemos que es fundamental mantener una actitud dinámica en la gestión. En nuestras carteras temáticas, por ejemplo, hemos realizado rotaciones tácticas hacia ideas más defensivas, incrementando exposición a longevidad y bienestar y a infraestructuras, en detrimento de ideas relacionadas con la digitalización, con el objetivo de mejorar la resiliencia ante escenarios de mayor incertidumbre.
A nivel estratégico, estamos incorporando nuevas tendencias de largo plazo. Una de las más relevantes es la tesis del mundo multipolar, que se materializa en inversiones en ciberseguridad, robótica, e industrialización de economías desarrollados. Esta temática responde a cambios estructurales en el orden geopolítico donde la fragmentación de bloques está reconfigurando las cadenas globales de producción.
Me gustaría saber tu opinión sobre el futuro de la inversión sostenible: ante lo que llega de EE.UU., ¿seguirá avanzando en Europa, quedará rezagada o se reforzará con armas como un enfoque más sofisticado, práctico y quizá simplificado, como apunta la nueva regulación? ¿Tenéis buena oferta de fondos ESG en vuestras listas?
Se ha hecho mucho en el ámbito del ESG y desde luego la concienciación y el aprendizaje de todos los agentes ha sido relevante. La regulación avanza intentando encontrar el adecuado equilibrio entre simplicidad y pragmatismo, y la excesiva complejidad o burocracia, para alcanzar una adecuada transparencia. Desde mi perspectiva, el contexto actual representa una oportunidad estratégica para que las gestoras europeas refuercen su liderazgo en sostenibilidad y ganen cuota frente a competidores americanos.
Desde nuestro equipo, gestionamos tres perfiles mixtos con un enfoque temático sostenible. Aunque los activos bajo gestión han experimentado salidas debido al mal comportamiento relativo de estas estrategias, el universo de inversión se sigue ampliando con nuevas ideas atractivas. Creemos que un entorno de tipos a la baja e inflación controlada volverá a favorecer a estas estrategias que siguen contando con un importante viento de cola.
Con respecto a alternativos y los mercados privados: ¿son la próxima incorporación ineludible en las carteras de los inversores, y son aptos para todos? ¿Preferís alternativos líquidos –hedge funds- ahora mismo o ilíquidos? ¿Y el mundo cript
Los activos alternativos están ganando protagonismo como fuente de diversificación de las carteras. En CaixaBank estamos especialmente positivos en las estrategias de hedge funds, tanto en formato UCITS como en formato hedge fund. La normalización de políticas monetarias, mayor volatilidad macroeconómico y elevada dispersión entre el retorno de acciones están generando un entorno propicio para estas estrategias.
Respecto de los ilíquidos, actualmente no los incorporamos por criterios de liquidez en nuestras carteras, pero reconocemos su potencial como palanca de diversificación a largo plazo, especialmente en temáticas como la transición energética o a la digitalización, que se benefician de tendencias estructurales favorables.
En cuanto a criptoactivos, seguimos su evolución con interés, pero con cautela. Por ahora, no hemos incorporado ETFs cripto en nuestras listas recomendadas, aunque monitorizamos el desarrollo regulatorio y la evolución del mercado.
Todo esto me lleva a preguntarte por tendencias en la selección de fondos, por ejemplo, la sofisticación. ¿Se han sofisticado las carteras y eso lleva a una mayor preparación/conocimiento de diferentes y nuevos mercados por parte del selector?
Efectivamente, la sofisticación de las carteras ha aumentado de forma notable, impulsada por la evolución de los mercados y por el mayor nivel de formación del inversor. En este contexto, los ETFs están evolucionando rápidamente: volatilidad (Buffer ETFs), crédito estructurado, activos ilíquidos o cripto… Esta sofisticación exige una constante actualización técnica por parte del selector.
Personalmente, considero que esta evolución es una de las partes más estimulantes de nuestro trabajo. Nos obliga a aprender, a cuestionar y a desarrollar criterio en un entorno de cambio permanente. La capacidad de adaptación y el pensamiento crítico son hoy más relevantes que nunca.
Otra tendencia clave es la digitalización y la introducción de la IA. ¿Qué impactos está teniendo en vuestro trabajo, en qué partes os ayuda y qué partes siguen siendo más ‘factor humano’?
Sin duda, el impacto de la digitalización y la inteligencia artificial en nuestro trabajo está siendo muy positivo. Actualmente utilizamos IA en varios de nuestros procesos y estamos estudiando nuevos casos de uso que nos permitirán ser más ágiles, dedicando menor tiempo a tareas de bajo valor añadido y aumentar la calidad de nuestro trabajo.
La tecnología nos está ayudando a reducir sesgos, mejorar la eficiencia y aumentar la trazabilidad de los procesos. Pero la selección de fondos es una mezcla de ciencia y arte, y el factor humano seguirá siendo fundamental a la hora de valorar a los equipos gestores, interpretar el contexto de mercado, y de aplicar nuestros juicios e intuición basados en la experiencia.
Sobre el futuro de la industria de fondos en España: ¿eres positiva, hay potencial de crecimiento? ¿Cómo vislumbras la industria en 10 años?
Somos optimistas sobre el futuro de la industria de fondos en España. El gran reto será acompañar al cliente en su evolución de ahorrador a inversor fomentando una mayor cultura financiera. Para ello, seguiremos impulsando las soluciones de gestión discrecional, mediante carteras diversificadas y gestionadas activamente. En este contexto, vemos tres grandes tendencias que marcarán la evolución del sector en los próximos años:
- Soluciones más eficientes, transparentes y personalizadas, gracias al avance tecnológico.
- Mayor uso de mandatos, por su capacidad de adaptación, eficiencia en costes y total transparencia.
- Mayor centralización en la toma de decisiones, lo que favorecerá una colaboración más estrecha entre los equipos de Selección y Estrategia, para anticiparse a los mercados con los productos adecuados.