El verano es momento de desconexión, vacaciones, descanso, sol y playa, o viajes infinitos. Pero eso no quiere decir que los mercados financieros queden en el olvido. Por eso, con la llegada de la estación estival, en Funds Society inauguramos sección, «Un verano para invertir», en la que preguntamos a varios profesionales sobre las mejores ideas para estar posicionados en los mercados a lo largo de estos meses… sin olvidarnos de los riesgos que puede haber por el camino.
En esta ocasión nos ha contestado Óscar Anaya, socio y director de Negocio Institucional de Cobalto Inversiones EAF, que destaca las oportunidades en el sector inmobiliario en España.
De cara a los próximos meses, ¿cuál es la idea, la mejor idea, que destacarías para invertir? ¿Qué factores apoyan su atractivo?
Una de las ideas en las que estamos más positivos actualmente es sobre el sector inmobiliario en España. El entorno macro en el que nos encontramos, en el que nuestro país sigue siendo uno de los de mayor tasa de crecimiento de PIB de la Eurozona, unido a un escenario de bajada de tipos como el que estamos viviendo actualmente por parte del BCE y cuyos efectos seguirán impactando en los próximos trimestres, ofrecen, sobre el papel, una muy buena combinación para que el sector pueda seguir haciéndolo muy bien.
Adentrándonos algo más en sus fundamentales, vemos aún fuertes catalizadores sobre los que apoyarnos: fuerte crecimiento en las firmas de hipotecas, en máximos de los últimos 14 años, entorno de precios al alza y una fuerte demanda de vivienda frente a la oferta actual, mientras que a nivel valoración, bajo nuestro punto de vista, las inmobiliarias siguen cotizando con fuertes descuentos frente a su NAV, lo que nos parece difícil de justificar en el entorno actual.
Si bien lo anterior aplica a la parte más residencial, no podemos dejar de lado el buen comportamiento que están teniendo otro tipo de subyacentes incluidos dentro del sector inmobiliario como son los centros de datos, colivings, residencias de estudiantes, flex living, etc. que, sin duda, respalda y posiciona al sector como una opción muy atractiva de cara a los próximos meses.
De forma contraria, un activo con el que habría que ser cautos este verano.
Más que un activo, en lo que estamos cautos de cara a los próximos meses es sobre un área geográfica, en este caso en EE.UU. La incertidumbre diaria que llevamos viviendo desde la llegada al poder de Donald Trump hace imposible vislumbrar cualquier tipo de escenario para los próximos meses. La agresividad empleada en las negociaciones, la incertidumbre existente una vez finalicen las prórrogas concedidas y el impacto que, poco a poco, empezará a sentirse en los datos macroeconómicos de EE.UU., sin olvidar tampoco el progresivo debilitamiento del dólar, nos lleva a mantenernos alejados durante los próximos meses.
De cara al verano, ¿cuáles son los principales riesgos que podrán afrontar los inversores? (guerra arancelaria, tensiones geopolíticas, aumento de la inflación…)
Efectivamente, durante estos meses de verano seguiremos teniendo abiertos muchos frentes de incertidumbre. Yo destacaría seis: 1) la guerra arancelaria, coincidiendo con el final de las prórrogas de negociación, 2) las tensiones geopolíticas, con varios conflictos bélicos abiertos tanto en Ucrania y ahora en Oriente Medio, cuyo riesgo de escalada podría seguir aumentando, 3) el impacto de las tarifas en la economía global donde esperamos ver una desaceleración generalizada, 4) la inflación, sobre todo en EE.UU., aunque sin perder ojo a la europea, si bien, este frente está más controlado gracias al poder de actuación del BCE, 5) una mayor tensión de la curva de tipos norteamericana que, con el 10 años llegando al entorno del 5%,empieza a reflejar una señal de preocupación en el mercado al ver, por un lado como parece descontrolarse el, ya de por sí, excesivo déficit fiscal y, por otro, al ver a un Trump incapaz de atajarlo a través de sus ocurrentes e improvisadas medidas y 6) los resultados trimestrales de las compañías, tanto en EE.UU. como en Europa, en donde, por un lado, podremos empezar a palpar el impacto real que están teniendo los aranceles en la evolución de sus negocios y, por otro, nos servirá para ver en las guías que éstas vayan anunciando para los próximos meses un escenario mucho más ajustado de cara a final de año.
¿Cómo te gustaría encontrar los mercados cuando vuelvas en septiembre de vacaciones?
Pues me gustaría ver unos mercados menos sensibles a los vaivenes diarios que sufren ante cualquier mensaje en redes sociales o cualquier ocurrencia nocturna. Un mercado como el actual, cada vez más alejado de los fundamentales de las compañías y más cercano al azar, hace que para el gestor sea muy difícil mantener su convicción en la cartera seleccionada basada en sus diferentes criterios. Si tuviera que pedir un deseo de verano, quizás sería ése: unos mercados con menos ruido mediático y más cercanos a la realidad económica.